Nintendo ha desvelado algunos detalles del argumento del próximo juego de Zelda. Se confirma, así, que Link es un chico joven que vive en una aldea rural, y que debe ir a un festival en Hyrule. Cuando parte, Link no sabe nada del oscuro destino que acecha al reino, pues el Twilight Realm (Reino Crepuscular) está cubriendo Hyrule. Nada más entrar en este reino, Link se ve transformado en lobo y es capturado, lo que explica una parte de lo que hemos visto en el último tráiler del juego. Encerrado en unas mazmorras, este Link convertido en lobo recibe ayuda de una figura misteriosa, Midna, que aunque al principio será un rival, lo libera y empieza a usarlo como montura, creando un binomio muy peculiar en el que Midna usará su magia para escapar de este reino de sombras, pues un peligro mucho mayor se cierne sobre ellos.
El juego, según han declarado durante una rueda de prensa en la que se han mostrado diferentes momentos de la demo y se han respondido a varias preguntas de la prensa, tendrá lugar cronológicamente varias décadas después de los hechos de Ocarina of Time, por lo que se sitúa dentro de la línea de la saga entre éste y Wind Waker
Y es que el juego va a tener como un eje muy importante la dualidad entre estos dos mundos, el reino de luz (Hyrule) y el oscuro (Twilight Realm), de manera que algunos puzles exigirán alternar entre ambos mundos, algo similar a lo que sucedía en el clásico de Super Nintendo, aunque se espera que de manera mucho más profunda. También ha confirmado Nintendo que Link podrá comunicarse con los animales, y aprender nuevas habilidades de ellos, que le serán muy útiles en un mundo mucho más grande que el vimos en Ocarina of Time y que tendrá, en consecuencia, más mazmorras. Además, será el primer juego con contar con una banda sonora orquestada.
Su lanzamiento mundial está previsto para finales de este año.
