Xenoblade Chronicles 3 es una realidad y está en las últimas etapas del desarrollo, apuntando a una ventana de lanzamiento establecida en los primeros meses de 2022 y con mejoras visuales respecto a Xenoblade Chronicles 2. Todo ello según una información publicada por el medio Fanbyte donde se citan fuentes anónimas. Por lo tanto, coged la siguiente información con pinzas, ya que, incluso aunque los datos sean veraces, los planes de Nintendo y/o Monolith Soft pueden cambiar durante el desarrollo.
La existencia del proyecto fue sugerida en junio por Jenna Coleman, actriz que puso voz a Melia en Xenoblade Chronicles, publicado en Wii en 2010 y remasterizado en mayo del año pasado en Nintendo Switch. La entrevista en la que habla de que están haciendo un nuevo juego de la saga se difundió por la red en los últimos días tras ser detectada por los fans de la serie.
El desarrollo se ha ralentizado por la pandemia
La fuente anónima de la mencionada cabecera apunta que Nintendo iba a anunciar Xenoblade Chronicles 3 a principios de este año para publicarlo en invierno (la segunda entrega de la serie, la mejor vendida hasta el momento, se lanzó en diciembre de 2017). Sin embargo, la pandemia de COVID-19 ha ralentizado el desarrollo y la optimización de hardware.
No se descarta que Nintendo y Monolith Soft anuncien el título en los meses que restan de 2021, pero el lanzamiento no se producirá, como pronto, hasta la primera mitad de 2022. La información no abunda en detalles: la historia tendría lugar cientos de años después de la segunda entrega, contará con personajes nuevos y otros conocidos (de ahí que Coleman conociera el proyecto) y habrá más personajes en pantalla a la vez que en la segunda parte, tanto jugables como enemigos.
Monolith Soft anunció en abril que su equipo había crecido hasta los 272 empleados. La firma, además de ocuparse en tiempos recientes de la saga Xenoblade (además de los mencionados, también está Xenoblade Chronicles X para Wii U), también apoya el desarrollo de otros juegos de Nintendo, como es el caso de The Legend of Zelda: Breath of the Wild.