Charlie Scibetta, director sénior de comunicaciones de Nintendo América, ha insistido en las razones por las que Nintendo ha decidido retrasar hasta 2020 Animal Crossing: New Horizons. Y es que durante el E3 la empresa ya explicó que debía escoger entre darle más tiempo de desarrollo o imponer crunch a los desarrolladores.
"No vamos a sacar un juego antes de que creamos que está listo para ser disfrutado por los jugadores", ha dicho Scibetta. "En el caso de una saga como Animal Crossing, con tantos fans leales, les haríamos un deservicio si sacáramos un producto a toda prisa".
"Es una decisión difícil para una compañía retrasar un juego. Creemos que pasar el título al 20 de marzo del año que viene ha sido la decisión correcta porque necesitábamos que el equipo de desarrollo pudiera tener suficiente tiempo para hacer que el juego fuera el juego que queríamos hacer", explica.
"Esta ha sido la filosofía de Nintendo desde el principio y creo que es algo que vamos a seguir haciendo. No vamos a precipitarnos en lanzar juegos porque queremos mantener la calidad", concluye Sciabetta.
Y es que lo que señala, al fin y al cabo, se vincula con una máxima de Shigeru Miyamoto: "un juego retrasado probablemente sea bueno, un mal juego será malo por siempre".
