Grandes expectativas
Es sorprendente lo mucho que puede llegar a hablarse de un juego, para que meses después, y meses antes de su salida en España, parezca desaparecido en combate. Algo así le ha pasado a The Bouncer. Considerado hace un año como una de las promesas para Playstation 2, The Bouncer ha sido un claro ejemplo de lo que el "hype" puede hacer a un juego. Las imágenes que se iban distribuyendo mostraban un apartado gráfico apabullante, y los vídeos que iban saliendo de las secuencias CG del juego eran simplemente impresionante. Square estaba detrás de The Bouncer, y los programadores de juegos como Tobal y Ergheiz estaban llevando a cabo el proyecto. Nada podía salir mal, y al parecer estábamos frente a uno de los grandes títulos de PS2. Pero desde que el primer análisis del juego, en Famitsu como siempre, indicase algunos de sus más claros defectos -exceso de secuencias CG y una jugabilidad algo extraña principalmente-, la expectación comenzó a disminuir. Finalmente, y tras el acuerdo de Square y Sony para que Sony distribuyese los títulos de la compañía japonesa en Europa, The Bouncer ha llegado a España; no por la puerta grande, pero tampoco por la de atrás. Como un título normal y corriente, con sus pros y sus contras, que es lo que finalmente resulta ser The Bouncer. No es un mal juego, ni tampoco el juego que va a vender Playstations 2. Simplemente no ha cumplido las enormes expectativas que había sobre él, por lo que algunas personas se han visto decepcionadas, y ha demostrado que no todo lo que sale de la casa Square es una obra maestra, o al menos no todo lo que no sean RPGs. Empecemos pues, a hablar de The Bouncer.
Una historia completita
La historia de The Bouncer gira en torno a dos porteros, gorilas, o como queráis llamarlos, de un bar llamado Fate (destino), y una misteriosa chica llamada Dominique. Por alguna extraña razón, Dominique es secuestrada por las fuerzas especiales de la corporación Mikado. Está claro, según los cánones del videojuego, que en un futuro habrá una corporación hiper-poderosa que tendrá demasiado poder e intentará establecer un regimen semi-fascista en el mundo. Mikado es un buen ejemplo. Dirigida por el "director supremo" Dauragon, Mikado (no confundir con los deliciosos palitos de galleta y chocolate) está estableciendo un satélite que utilizará la energía solar para generar ondas microondas, que a su vez serán convertidas en energía eléctricas tras ser dirigidas a la tierra. No es difícil imaginar que un satélite de estas características dominado por una multinacional no puede ser bueno, y posiblemente haya algo más que lo del suministro eléctrico, sobretodo cuando se juntan las palabras "microondas" y "satélite".
Como decíamos, Dominique ha sido secuestrada, y los tres Bouncers salen en su búsqueda. Estos tres expertos en artes marciales son, por orden, Sion, un joven pero ágil luchador, que está relacionado sentimentalmente con Dominique y que luce en su rostro la carismática tirita "me hice una herida hace seis años pero aún no ha cicatrizado del todo", y al cuello una enorme cadena con un extraño símbolo, que debe de pesar unos cinco kilogramos; Volt, un grandullón y duro luchador, cuyo rostro tiene, por orden de rareza, dos cuernos (pero de verdad) y más de una docena de piercings (la razón por la que los enemigos no le atacan arrancándoselos y causándole un dolor impresionante permanecerá en el misterio para siempre). Volt trabajó para Mikado, y tiene relación con algunos de los sicarios del siniestro imperio de las finanzas. Y por último Kou, heredero de una familia de alta alcurnia, que ha dejado su herencia y su nombre por el taekwondo y cuyo pasado no es tan transparente como debería. Kou es de hecho el más normal de los tres, incluso teniendo la mitad del cuerpo tatuado. Estos tres personajes tienen alguna que otra relación con la totalidad de los enemigos importantes, tal vez por coincidencia, tal vez porque el bar se llama "destino".
Podriamos profundizar más en la historia, pero sería revelaros cosas que el juego se encarga, a medida que avanza, de contarnos, así como el trasfondo de todos los personajes y su relación con la ansiosa de dominio mundial corporación Mikado.
El sistema de juego
Posiblemente ya lo habréis leido en infinidad de sitios o comprobado vosotros mismos. The Bouncer es mitad película, mitad juego. En realidad, el modo historia tiene más minutos de secuencias CG que de juego en sí, y eso a mucha gente puede no agradarle, ya que aunque las secuencias CG te cuentan la historia y tienen una realización muy buena, es evidente que cuando nos compramos un juego pretendemos jugar. En lo que se refiere a la parte jugable, The Bouncer es un beat 'em up al estilo "yo contra el barrio", aunque ese yo será en casi todas las ocasiones "yo y mis otros dos colegas". Cada vez que venzamos a un enemigo (debemos de darle el último golpe, eso sí), se nos otorgarán unos "Bouncer Points", que podremos canjear al término de cada nivel por nuevos golpes o por una mejora en las estadísticas de nuestro personaje, que son Vitalidad, Ataque y Defensa. Los Bouncer Points son acumulables, y a medida que vayamos usando estos puntos de experiencia nuestro luchador se irá haciendo más completo, e irá subiendo de grado. El modo historia es prácticamente igual para los tres jugadores, y en realidad podremos escoger a cualquiera de los tres durante todo el juego, aunque la primera selección, la que hagamos tras enfrentarnos por primera vez a Dauragon y la que hagamos en la lucha final determinarán algunos de los eventos, así como el final del juego.
Cuando terminemos el modo historia estarán disponibles nuevos personajes, y además del modo historia hay un modo survival bastante adictivo y un modo versus en el que peuden participar hasta cuatro jugadores.
El modo historia en sí es corto, pero volverás a jugar para seguir mejorando a los personajes y para descubrir el final del juego con otros.
Gráficamente impresionante
A nivel gráfico The Bouncer es sencillamente impresionante. No hace falta decir que las secuencias CG, viniendo de Square, tienen un aspecto sublime. Pero lo que realmente "asusta" es que es difícil diferenciar las secuencias CG de las secuencias en tiempo real, puesto que los personajes están modelados, animados y detallados de una forma magistral, tanto en los movimientos, riguroso motion capture, como en las animaciones faciales. Los gráficos se muestran de una forma suave y fluída, y los escenarios no le van a la zaga al diseño de personajes. También están recreados de una manera espectacular y con muchísimo detalle. La única pega que se le puede poner al excelente apartado gráfico es el abusivo uso del motion blur, que hace que algunas partes de la pantalla se muestren algo borrosas en algunas ocasiones.
Sonido, con Dolby 5.1
Como ya sabréis, The Bouncer soporta Dolby 5.1 y si dispones de un equipo que lo soporte el aspecto sonoro gana muchos enteros. La música es en ocasiones muy buena, pero en otras simplemente pasa desapercibida. Los efectos de sonido están muy conseguidos, aunque en realidad se limitan simplemente a los golpes. En cuanto a las voces, aunque no están dobladas al español, están muy bien dobladas al inglés, y unos subtítulos en nuestro adorado y a veces maltratado idioma nos traducen lo que los personajes dicen.
Jugabilidad simple
Por ahora, todo bien. Unos gráficos excelentes, un sonido a la altura, pero... ¿y la jugabilidad? Pues aquí es realmente donde The Bouncer no cumple las expectativas. El sistema de combate de este The Bouncer es, cuanto menos, curioso. Nuestro personaje se moverá por los escenarios mediante el control analógico, y una vez tengamos cerca a un enemigo, lo encarará. Esto significa que no tendremos un control real de a qué enemigo van a parar nuestros golpes, sino que está determinado por el que tengamos más cerca. La ejecución de los golpes se hace mediante cuatro botones, más uno auxiliar que se utiliza para las técnicas especiales. Hay cuatro tipos de golpes: Altos, Medios, Bajos y Saltando (no hay botón de salto, son golpes que se hacen saltando). Sin embargo, encadenar combos entre los cuatro tipos de ataques es muy difícil, al haber muy pocas combinaciones "mixtas". Por ello, el sistema de combate resulta muy simple: Con cada tipo de golpe hay tres golpes básicos: uno mientras corres, otro pulsando el botón poco y otro pulsandolo fuerte. Luego están los golpes especiales, que primero tendrán que ser adquiridos o aprendidos, como más os guste llamarlo, mediante el sistema de "Bouncer Points" mencionado más arriba.
Otra de las cosas que estropea la jugabilidad es el juego de cámaras, que al ser automático no siempre acierta al enfocar la acción, ya que nuestro enemigo puede estar en la zona que no enfoca la cámara, y muchas veces, caminando "hacia la cámara" nos toparemos con una desagradable sorpresa. Por último, hay que agradecer que se puedan saltar las escenas cinemáticas pulsando Start y eligiendo saltar en el menu, puesto que una vez terminado el juego pierden su razón de ser.
Técnicamente excelente, pero falla en la jugabilidad
The Bouncer, como ya dijimos al principio, no es la panacea de los beat'em up pero tampoco un mal título. Como aspecto positivo, su excelente apartado técnico y la historia, que acaba resultando muy interesante. Como aspectos negativos, una jugabilidad algo extraña y una duración demasiado limitada, ya que aunque la historia varía con cada uno de los tres personajes, el juego acaba haciéndose monótono. The Bouncer acaba siendo simple y llanamente un juego bastante bueno, que algunas personas detestarán, pero otras en cambio disfrutarán.