Análisis de Infernal (PC)

La milenaria guerra entre las fuerzas del bien y el mal está a punto de cambiar radicalmente. Uno de los mejores ángeles al servicio de la luz, expulsado por su falta de tacto a la hora de afrontar las misiones que se le asignaban desde lo más alto, ha decidido ponerse al servicio del mismísimo infierno, hasta la fecha rival a batir por él y sus propios compañeros de batalla. Las motivaciones que impulsan a Ryan Lennox, ángel caído en paro, a cambiar radicalmente el rumbo de su vida quedan expuestas de forma clara y contundente al comienzo de la aventura, cuando los soldados de la luz, armados hasta los dientes, deciden asaltar al protagonista de la acción en un lujoso emplazamiento en lo alto de un edificio. Lennox, con la ayuda de sus habilidades de combate y los consejos del líder de Abyss (el infierno), logra escapar y jura fidelidad a su anterior enemigo a cambio, por supuesto, de obtener más poder y dinero del que jamás había dispuesto.

http://www.youtube.com/watch?v=xPFz6Dsfvq8|Trailer del juego

Con este planteamiento inicial tan prometedor da comienzo este espectacular juego de acción e infiltración en tercera persona desarrollado por Metropolis Software que destaca, sobre todo, por ofrecer un apartado técnico espectacular con una optimización del motor gráfico realmente sorprendente.

Pese a que en un primer momento Infernal puede parecer un juego de acción en tercera persona bastante convencional, tras superar el frenético primer nivel nuestro protagonista, el citado Ryan Lennox, logrará hacerse con una serie de poderes demoníacos que sin duda modificarán notablemente el estilo de juego que deberemos desarrollar a lo largo de la aventura. En este caso, con un sistema de control bastante intuitivo basado en la clásica combinación del teclado y ratón, deberemos superar una gran variedad de entornos plagados de enemigos y una serie de trampas, usando para ello la fuerza bruta, el sigilo, o los mentados poderes demoníacos que el líder de Abyss nos ofrecerá al comienzo de la partida. Y aunque en un primer momento tengamos la sensación, como decimos, de estar ante un juego bastante clásico en su planteamiento jugable, poco a poco iremos descubriendo algunos de los elementos que convierten a esta creación de Metropolis en uno de los títulos más interesantes para compatibles en estos momentos.

Como explicábamos, el primer nivel de la aventura será bastante clásico ya que únicamente deberemos recorrer una serie de instancias armados hasta los dientes disparando a todo ser viviente que se cruce en nuestro camino, encontrándonos con algún que otro puzle, bastante simples, que dotarán de cierta variedad al desarrollo de la trama. Sin embargo, desde un principio quedará claro que en Infernal ante todo prima la acción desenfrenada, encontrándonos con un notable arsenal de armas de fuego que ampliaremos a lo largo de la partida registrando los cadáveres de los enemigos abatidos, o explorando concienzudamente los escenarios. En este punto cabe destacar que la ingente cantidad de enemigos que aparecerán en pantalla nos obligará a emplear prácticamente todo nuestro arsenal, lo que sin duda agradará a los aficionados al género cansados de encontrarse con títulos en los que de verdad solamente se emplean dos o tres armas como mucho. Otro elemento a destacar lo encontramos en la posibilidad de cubrirnos en determinados elementos del entorno, como cajas o esquinas, no ya sólo para avistar a los enemigos sin ser vistos, sino también para poder dispararles de forma rápida y sencilla sin necesidad de ponernos al descubierto. En este caso, con Ryan de espaldas a una esquina, podremos mover el punto de mira del arma libremente sin poner en riesgo la salud del protagonista y, una vez hayamos seleccionado el blanco al que disparar, simplemente pulsando el botón de acción nuestro héroe saldrá rápidamente y comenzará disparar al objetivo marcado. Cuando dejemos de disparar, automáticamente volverá a su posición anterior evitando así que los disparos enemigos le alcancen.

A todo esto debemos sumar la posibilidad de sorprender a los enemigos mediante el sigilo, u otro tipo de armas como las granadas, que también nos permitirán terminar con los rivales sin ponernos en peligro. Aún así, y pese a que este hecho nos beneficiará en más de una ocasión, en la mayoría de casos terminaremos siempre liados a tiros, lo que en este sentido le resta cierta variedad al desarrollo de la acción. Y es que sin duda este se trata de uno de los principales puntos negativos en Infernal. Como hemos explicado, en el transcurso de los niveles nos encontraremos con momentos de acción desenfrenada, los más comunes, y otros en los que deberemos usar más el sigilo, o resolver sencillos puzles, para seguir avanzando en la aventura.



El problema radica en que los desafíos que se nos propondrán en los escenarios a la larga también resultarán bastante repetitivos, ya que la mayoría consistirán en activar determinados ordenadores o sistemas, o en encontrar las llaves de acceso para lograr entrar en las siguientes zonas del nivel. Y aunque algunos niveles estarán diseñados de tal forma que este sistema funcionará a la perfección, combinándose momentos más pausados con la locura que se desatará cuando los enemigos nos ataquen; otros realmente resultarán aburridos, lo que ofrece un resultado un tanto irregular.

En cuanto a los citados poderes demoníacos que se nos irán concediendo conforme avancemos en la aventura, cabe destacar que por una parte jugarán un papel importante en la resolución de puzles, y por otra nos permitirán afrontar las batallas contra los rivales con un cierto grado de libertad, ya que nos ofrecen otras alternativas al sigilo o a las batallas frenéticas con armas de fuego. En el primero de los casos, en Infernal tendremos la posibilidad, por ejemplo, de cargar nuestras armas con energía demoníaca para abrir nuevos pasajes (por ejemplo derribar una pared inestable), y de este modo lograr acceder a zonas que en principio parecían cerradas. Del mismo modo, también podremos usar un tipo de visión especial para detectar códigos necesarios para activar determinados sistemas, así como incluso podremos llegar a transportar nuestra alma de forma temporal a un lugar determinado para lograr accionar los mecanismos necesarios para que podamos proseguir en la aventura.

Este tipo de acciones estarán a la orden del día, resultando realmente interesantes en un primer momento, aunque después esta fórmula se repetirá en exceso. No obstante, como decimos, resulta una forma de resolver determinados enigmas bastante ingeniosa ya que, por poner un ejemplo, para lograr pasar por un túnel repleto de cámaras de vigilancia, deberemos transportar nuestra alma al sistema de control de todos los sistemas de vigilancia para desactivarlo, y de este modo poder pasar sin miedo a que todas las compuertas se cierren ante nuestras narices. También, otro poder importante en el transcurso de la partida será el de la telequinesia, que nos permitirá mover una gran cantidad de objetos para lograr alcanzar determinados lugares, o para bloquearles el camino a los enemigos. Por tanto, conforme avancemos en la aventura el líder de Abyss nos irá ofreciendo nuevos poderes para lograr superar los puzles que se nos irán planteando a lo largo del juego.

Sin embargo, como decíamos, estos poderes demoníacos también nos permitirán terminar con los enemigos de forma más contundente, resultando casi imprescindibles en determinadas situaciones. Así pues, cuando los enemigos nos ataquen desde las imponentes torretas defensivas, podremos cargar nuestras armas con el poder demoníaco para realizar golpes letales, pudiendo de este modo despejar el camino sin excesivos problemas. También, cuando hagamos frente a algunos enemigos de final de fase podremos emplear este tipo de poderes para terminar con su vida, encontrándonos con algún que otro combate final realmente interesante por la forma en la que deberemos terminar con la vida del rival.

Otro elemento a destacar radica en el gran trabajo realizado por Metropolis a la hora de diseñar la interfaz de usuario, ya que en todo momento tendremos clara la cantidad de munición de la que dispondremos, la cantidad de energía con la que contaremos, y nuestro nivel de salud. En este último caso, para restablecer nuestra vida simplemente tendremos que hacernos con las almas de los incautos abatidos, lo que además nos permitirá hacernos con munición para nuestro arsenal y, en contadas ocasiones, con tarjetas de acceso para poder proseguir en la partida, lo que en principio favorecerá la exploración de todo el entorno ya que obligatoriamente deberemos dar con los soldados concretos para arrebatarles las tarjetas.

En cuanto a los poderes mágicos, Infernal contará con un ingenioso sistema que nos restablecerá automáticamente la energía consumida siempre que nos encontremos en lugares corrompidos por el mal, o cada vez que realicemos actos malvados como matar a los enemigos, mientras que ocurrirá todo lo contrario cada vez que visitemos lugares santos como iglesias y demás. En otras zonas, las que podríamos definir como neutrales, la energía solamente se gastará conforme vayamos haciendo uso de los poderes, lo que en cierto modo nos obliga a racionalizar nuestros poderes demoníacos. En este sentido, como destacábamos con anterioridad, destaca el gran trabajo llevado a cabo con la interfaz de usuario, ya que el contador de energía variará en su forma dependiendo del tipo de zona en la que nos encontremos, por lo que con un rápido vistazo sabremos si estamos sobre suelo santo, en un lugar propicio para reabastecer nuestra barra de energía, o en una zona neutral.



Con todas estas habilidades y armas a nuestra disposición deberemos recorrer una gran variedad de entornos, algunos realmente apasionantes, no ya sólo por la enorme cantidad de enemigos que nos saldrán al paso, sino también por la forma en la que se nos presentarán todos los desafíos, aunque en este sentido desgraciadamente también nos encontraremos con otros niveles no tan redondos que destacarán precisamente por la falta de libertad, lo que puede llegar a resultar algo tedioso en determinados momentos de la partida. Y es que aunque la linealidad en los escenarios sea una constante en el desarrollo de Infernal, habrá ciertos escenarios que por su diseño, disimularán a la perfección esta linealidad, y los que al final nos harán pasar algunos de los mejores momentos de la partida. Otro punto negativo en esta obra de Metropolis lo encontramos en la inteligencia artificial de los enemigos, ya que se limitarán a atacarnos sin preocuparse en exceso de realizar tácticas de combate para cogernos por sorpresa, o de al menos intentar ponerse a cubierto, lo que unido a la ingente cantidad de disparos que podremos recibir antes de morir, hacen que determinados enfrentamientos no destaquen precisamente por la tensión y la emoción. Esto, sin embargo, no se cumple en los combates contra los jefes de final de fase donde sí sufriremos a la hora de exterminarlos.

En lo referente al apartado gráfico, Infernal no se trata de uno de los títulos más impactantes del momento, pero sí destaca por su fantástica ambientación, así como por el sobresaliente trabajo llevado a cabo por Metropolis en lo referido a la optimización del motor gráfico, lo que permite que los usuarios con equipos de gama media disfruten sin problemas, y con todo lujo de detalles, del espectáculo que se nos presentará en pantalla. En este sentido, destaca el modelado del protagonista de la acción, así como la gran cantidad de enemigos que llegarán a salirnos al paso. Del mismo modo, los efectos de luces serán sobresalientes, con un gran trabajo en las texturas y los efectos de partículas, y unos entornos de considerables dimensiones, con una gran alternancia entre zonas de interior y otras en el exterior.

También brillan con luz propia las secuencias cinemáticas generadas con el propio motor del juego que se encargarán de hilvanar correctamente la interesante historia que se nos narra en Infernal, con un acompañamiento musical notable que mezclará melodías bastante clásicas y acordes a la ambientación que se nos presenta, con otras más cañeras para los momentos de acción. En estos últimos casos, estas piezas pueden llegar a resultar algo pesadas con el paso del tiempo, aunque en general, como decimos, estamos ante un apartado también bastante destacable. Por último, cabe mencionar que los efectos sonoros, y en especial el de las armas de fuego, no resultan los más espectaculares del momento, aunque podemos decir que cumplen su cometido a la hora de ambientar sonoramente el juego. También, pese a que las voces se mantienen en inglés, Infernal ha sido traducido al castellano, lo que permite a los menos duchos en el idioma enterarse de la historia y, sobre todo, atender correctamente a las explicaciones que el líder de Abyss nos ofrecerá a la hora de superar algunos desafíos, aunque en este sentido en más de una ocasión sus consejos no serán de muy poca ayuda.

En definitiva, esta creación de Metropolis se trata de un gran juego de acción que seguro encantará a los aficionados al género, pese a los errores ya comentados con anterioridad. Y si bien es cierto que la falta de una modalidad de juego online le resta cierto atractivo para una gran parte de los usuarios afines a este género, su sistema de juego, así como el notable desarrollo de la acción en su vertiente individual, lo convierten en una de las grandes sorpresas del año. Aún así, es una lástima que por una serie de errores en la inteligencia artificial, y un diseño de los niveles un tanto irregular, Infernal no sea un título completamente redondo, ya que de haberse solventado dichos problemas, ahora mismo estaríamos ante un imprescindible dentro del género de la acción en tercera persona.