El político británico Keith Vaz, conocido por sus declaraciones siempre en contra de la violencia en los videojuegos y que llegó a decir que el asesinato de una niña de 14 años en febrero del 2004 tenía relación con la violencia del videojuego Manhunt, ha vuelto a arremeter contra la industria.
En esta ocasión, Vaz la ha tomado con Call of Duty: Modern Warfare 3, más en concreto con la polémica escena de los atentados de Londres. El político ha presentado una resolución en el Parlamento donde ha pedido una mayor responsabilidad a la hora de clasificar por edades a los videojuegos.
Esto se debe a que Vaz considera que lo que ocurre en Londres en el videojuego se asemeja a los atentados reales que tuvieron lugar en el 2005. Esta resolución bautizada como Early Day Motion intenta destacar en todo momento que existe una relación confirmada entre la violencia real y los videojuegos.
Tom Watson, uno de los miembros del parlamento, se ha opuesto a esta propuesta donde especifica que las escenas que ocurren en el metro de Londres no tienen nada que ver con los atentados reales y que Call of Duty: Modern Warfare 3 es un juego para adultos, y que por tanto, sólo deberían jugarlos las personas con mayoría de edad, que deben ser libres para escoger sus formas de entretenimiento.
