Sony anunció a principios de año su intención de adquirir Bungie, compañía responsable de las sagas Halo y Destiny, por una cantidad que asciende a los 3600 millones de dólares. Pese a tamaño desembolso, que todavía está siendo estudiado por la FTC, la desarrolladora no va a trabajar en exclusiva para consolas PlayStation, como confirmaron desde aquel momento, sino que continuará publicando sus proyectos en todas las plataformas. Ahora el CEO de Sony, Kenichiro Yoshida, ha asegurado que la compra de esta compañía surge precisamente de su intención de ampliar sus fronteras y hacerse "más multiplataforma".
"Nuestra adquisición de Bungie también representa un gran paso adelante para ser más multiplataforma", ha afirmado Yoshida en una reunión estratégica que ha celebrado recientemente Sony y a la cuyas declaraciones han tenido acceso desde VGC.
Esa declaración venía después de otra que aportaba otro motivo más para la compra de Bungie: "Creemos que será un catalizador para ampliar nuestras capacidades de juegos como servicios", ha explicado, aunque esta razón sí la habían explicitado anteriormente y de hecho era el motivo principal de la adquisición.
PlayStation y su cambio de política de exclusividades
La apertura de Sony hacia nuevas plataformas es algo que ha quedado patente en los últimos años con lanzamientos de juegos de sus principales sagas en PC, plataforma que ha recibido títulos como Horizon Forbidden West, God of War o Final Fantasy VII Remake Intergrade, entre muchos otros. Tal es su apuesta por lanzar sus proyectos en ordenadores que incluso registró una marca para ello, aunque cabe señalar que este cambio en la política de exclusividades no vino por iniciativa propia sino por la petición expresa de los principales equipos de PlayStation Studios. Lo último que supimos es que en Sony están buscando a un responsable de la "planificación y la estrategia" en el mercado de PC.