Tras la investigación iniciada en diciembre de 2020 por las organizaciones de protección del consumidor de varios países del continente, la Organización Europea de Consumidores (BEUC, por sus siglas en francés) pide a la Unión Europea una investigación conjunta después de recibir más de 25.000 quejas sobre el drift de los Joy-Con de Nintendo Switch procedentes de numerosos países del territorio.
El drift es un desperfecto que aparece en los mandos de Nintendo Switch de algunos usuarios y que provoca que las palancas o sticks reconozcan movimiento aunque se estén tocando, lo que resulta en que los personajes se muevan automáticamente o que la navegación por los menús sea engorrosa.
En algunos casos, el servicio de atención al cliente de Nintendo arregla el problema gratuitamente.
La Organización Europea de Consumidores ha remitido sus quejas a la Comisión Europea y a las autoridades de protección al consumidor de los países del continente, según informa Eurogamer, de acuerdo con las reglas sobre "la obsolescencia prematura y omisiones engañosas de información clave al consumidor de acuerdo a la Directiva sobre prácticas comerciales desleales de la Unión Europea".
El 88 % de los usuarios de Switch tienen problemas con los Joy-Con en dos años de uso
El grupo asegura que el 88 % de los usuarios de Nintendo Switch han tenido problemas con los mandos de la consola durante los primeros dos años de uso. El informe recoge las quejas de los jugadores de Francia, Bélgica, Países Bajos, Portugal, Italia, Noruega, Eslovaquia, Eslovenia y Grecia. El objetivo del BEUC es que Nintendo repare gratuitamente los Joy-Con estropeados y que informe a los consumidores de la "duración limitada" del producto.
"Los consumidores asumen que los productos que compran duran una cantidad de tiempo apropiada de acuerdo a expectaciones justificadas, no tener que pagar caros reemplazos debido a un defecto técnico", dice Monique Goyens del BEUC en referencia al precio de los Joy-Con, que cuestan 79,99 euros el par. "Nintendo tiene que elaborar soluciones apropiadas para los miles de consumidores afectados por este problema".
La compañía japonesa tiene varias demandas colectivas abiertas sobre este tema en Estados Unidos, Canadá y territorios eurpeos. El presidente de Nintendo, Shuntaro Furukawa, reconoció la existencia del error ante los accionistas en junio de 2020, pero dijo que no podía dar más detalles de las acciones que tomarían por los juicios pendientes.