Sony anunció ayer la fecha de lanzamiento de PS5, el 19 de noviembre en España, y los precios de sus dos modelos: 399,99 euros para la Digital Edition y de 499,99 euros para la consola estándar. Según Jim Ryan en declaraciones a The Washington Post estas cifras estaban fijadas hace tiempo, desde principios de año. Su intención era ofrecer una versión de PS5 al mismo precio de venta que el debut de PS4 en 2013, los 399,99 euros. Sin embargo apareció "la pandemia del coronavirus y los nuevos problemas en la distribución. La cancelación del evento E3 en junio causó que toda la industria reconsiderase sus planes", según el artículo.
"Por ahora, Ryan dice que Sony tiene más unidades de PS5 listas para la venta que PS4 en 2013. Unos 2,1 millones de PS4 se vendieron en todo el mundo en dos semanas de su lanzamiento, con un millón en su primer día", recuerda, el texto. Estos días Sony ha negado una reducción en la producción de la consola respecto a los planes de este año fiscal.
"Durante un tiempo, al inicio de la pandemia, el panorama estaba lejos de ser claro. Al igual que la producción estaba en duda, ¿habría algún mercado? ¿Podría la gente salir afuera? ¿Abrirían las tiendas? Este ha sido un año como ninguno.
Pero todo esto reforzó nuestra determinación y el camino marcado al inicio del año fue el correcto".
Una estrategia clásica
El texto aborda un modelo de negocio clásico, apostando por los estudios propios para ofrecer juegos exclusivos en cada generación. Ryan comenta que "no decimos que sea perfecto, pero es el nuestro. Nos gusta. Queremos que esté un poco matizado". The Washington Post señala que PS4 ha vendido más de 112 millones de consolas en siete años, y The Last of Us Parte 2, Ghost of Tsushima y Final Fantasy VII Remake son tres de los cinco juegos más vendidos en 2020 hasta el momento.
"Hemos invertido de manera constante y sin mucho ruido en esos estudios -los propios-. Ahora tenemos, en mi humilde opinión, cuatro o cinco de los mejores estudios en el mundo".
