Parece que la Blizzcon de 2019 se ha saldado con un balance positivo tras el fiasco del año pasado y el duro año que ha experimentado Blizzard a múltiples niveles. Con un anuncio esperado como el de Diablo 4, que promete volver a los orígenes de la emblemática saga de rol y acción, los aficionados están más que satisfechos. Sin embargo, como comenta Matt McDaid, responsable de la dirección artística de esta cuarta parte, los inicios del desarrollo estuvieron llenos de incertidumbre y experimentos estéticos. Tanto es así, que Diablo 4 casi toma una perspectiva completamente distinta.
Diablo... ¿al estilo Dark Souls?
Diablo 4 será una vuelta las raíces góticas, oscuras y extrañas de las dos primeras entregas. En Vandal ya lo hemos probado y os podemos decir que las promesas de Blizzard parecen ir en buen camino y dirección. Pero antes de concretar todas las buenas decisiones y nuevos detalles, en el equipo estuvieron dándole vueltas a un cambio de perspectiva, que abandonaría la cenital para depositarse sobre los hombros o las espaldas de los protagonistas en una especie de variante al estilo Dark Souls o el más reciente God of War.
"La verdad es que consideramos diferentes opciones en las etapas de preproducción y no descartamos nada", explicaba Matt McDaid a VG24/7.. "Probamos varias opciones con la cámara, pero cuando llegamos a la vista isométrica, sentimos que era Diablo de principio a fin", puntualiza. De hecho, esto confirma los rumores que vimos hace unos meses que hablaban de un proceso de desarrollo convulso y un tanto complejo para el videojuego, que parecía estancado y poco inspirado en su planteamiento. Según estas filtraciones, que ahora son corroboradas de forma parcial por la propia Blizzard, uno de los primeros prototipos en recibir luz verde de Diablo IV se llamaba Hades, y presentaba una cámara al hombro muy al estilo del célebre videojuego de FromSoftware.
Apostaba por una mecánica similar a la de Diablo, pero buscaba ahondar en un estilo gótico distinto y más agresivo, con mazmorras difíciles y un mundo oscuro lleno de intrincados pasillos, cuevas y asentamientos derruidos.
El videojuego en esta versión estaba tan alejado del planteamiento clásico de Diablo, que incluso se planteó un cambio de nombre para intentar lanzarlo y aprovechar el trabajo realizado, hasta que finalmente se decidió cancelarlo en 2016 dando luz verde a Fenris, la versión que se ha terminado presentando y que llegará a Xbox One, PS4 y PC en 2020.
Una vuelta al mundo tétrico de Diablo
"Tras probar por primera vez Diablo 4 lo mejor que podemos deciros es que al menos en esta demo el juego ofrece todo lo que los fans de la saga quieren ver. Un juego mucho más tétrico y sangriento que la entrega anterior y que, en ese sentido, nos recuerda a las dos primeras entregas", os explicábamos en nuestras impresiones tras jugarlo en la Blizzcon.