Tras varios meses con múltiples cruces de acusaciones, el pasado mayo los creadores del exitoso PUBG decidieron demandar a Epic Games y Fortnite Battle Royale por lo que consideraban una grave infracción de derechos. La denuncia trascendió el pasado mayo, pero se habría producido y presentado el pasado enero en un tribunal de Corea del Sur. Sin embargo, en un movimiento que ha cogido por sorpresa a muchos, PUBG Corp ha decidido echarse atrás en el último momento.
Habrían considerado que no iba a prosperar
El equipo responsable de PlayerUnknown's Battlegrounds y sus asesores legales habrían evaluado seriamente la situación y todas las posibles implicaciones del proceso, reconsiderando su postura inicial.
En ella, alegaban que el videojuego de Epic cogía la fórmula de PUBG y la copiaba sin ningún género de dudas, encontrando similitudes en planteamiento y jugabilidad. Tal y como confirman en Bloomberg, PUBG Corp no ha dado explicaciones públicas ni oficiales, pero sí se especulan con los motivos.
PUBG Corp. y Epic Games son dos empresas con importante accionariado por parte de Tencent, la megacorporación china de la que hemos hablado largo y tendido en Vandal. El gigante asiático podría haber servido de intermediario y mediador en este conflicto. No hay que olvidar que, paradójicamente, el propio PUBG usa y está construido en base al célebre Unreal Engine de Epic.