Bungie ha anunciado que Destiny dejará de recibir nuevas actualizaciones y contenidos en PlayStation 3 y Xbox 360 a partir del 16 de agosto.
Separación de partidas entre generaciones
A partir de ese día se producirán algunos cambios importantes en el funcionamiento del juego, ya que los progresos que realicemos dejarán de compartirse entre PS3 y PS4, y entre Xbox One y Xbox 360.
De este modo, si queremos llevar nuestros datos a la versión de nueva generación de nuestra consola tendremos que importarlos tal y como se indica en la web oficial, aunque este proceso solo se puede realizar una vez por cuenta.
El fin de las actualizaciones y los eventos
Eso sí, esto no significa que Destiny vaya a dejar de ser jugable en PS3 y Xbox 360, ya que los servidores se mantendrán abiertos, aunque ya no podremos comprar más Plata (la moneda que se obtiene con dinero real) y eventos como las Pruebas de Osiris o los relacionados con las diversas festividades estacionales dejarán de realizarse.
Como ya sabréis, esto también significa que Destiny: Los Señores de Hierro, su próxima expansión, no llegará a las consolas de la pasada generación.