Utiliza el mapa y el teletransporte
Los mapas son más grandes que en el primer Builders y hasta que no des unas cuantas vueltas no conocerás dónde se encuentra ese tipo de material concreto que necesitas. Abre el mapa y recuerda dónde has visto una madera, unas semillas o un tipo de roca que quizás necesites más tarde.
Pero lo mejor es que a lo largo del mapa encontrarás puntos clave para teletransportarte. Pueden ser aldeas o unas esferas que sirven de punto de control.
Una vez interactúes con estos objetos, podrás viajar instantáneamente a la zona desde el mapa, ahorrándote mucho tiempo de viaje. Cuando tengas que volver por quinta vez a un determinado bosque agradecerás que tenga por la zona alguna esfera de teletransporte.
Caer no te mata
No te recomendamos caer desde grandes alturas, algo que puede pasar al estás luchando en el borde de una torre o montaña, pero no temas, la caída te dañará aunque no te mata. El daño es proporcional a la altura, pero como mucho quedarás con un punto de vida. Tendrás que gastar comida y vigilar que no hay cerca enemigos, pero por suerte no habrá acabado la partida.
La gravedad no afecta a las construcciones
No temas si tu construcción parece algo inestable, el juego no tiene en cuenta físicas reales y eso permite formas extrañas a la hora de construir algo. Mientras los bloques tengan un contacto, podrás diseñar escaleras y pisos con cualquier peso.
Igualmente, al destruir la base del entorno deja los bloques superiores en el aire y no colapsan. Por ejemplo, podrías eliminar todas las raíces de un árbol pero el tronco y la copa no caerán.
Lleva una cama contigo
Si durante el día tu salud empieza a bajar, siempre puedes colocar una cama en el campo por la noche para dormir un poco y recuperar vida. Es recomendable llevar ya preparada alguna cama por si te encuentras explorando el mapa y cambia la hora.
Hay que tener en cuenta que además por la noche aparecen nuevos monstruos, en especial una insistente parca que puede acabar con tus personajes si no están bien preparados. Para estas ocasiones, duerme y harás avanzar la noche en un instante.
¡A cocinar!
Cuando tengas huertos y coseches comida podrás acumular muchos alimentos. El problema es que la comida cruda cura y elimina el hambre un poco; para que resulte efectiva debe ser cocinada en el fuego.
Conviene llevar siempre un buen montón de cocina preparada, por si sufres daños durante la exploración o aparece un jefe inesperado. Cocinar requiere unos segundos, pero si colocas tres o más fuegos cerca tendrás una manera rápida de conseguir varios platos al mismo tiempo.
Construcción sin límites
En cuanto quieras construir tu base o castillo en Dragon Quest Builders 2 necesitarás mucho material, sobre todo tipo roca o madera, para alzar las paredes de la mansión. Al principio obtener bloques de minerales es divertido, pero cuando necesitas acumular cientos de piedras para tu edificio se convierte en un incordio –y te llevará mucho tiempo-.
Por suerte, hay una manera de conseguir infinitos recursos de algunos materiales. Para ello, visita las islas opcionales –aleatorias y que no forman parte de la historia- y cumple con los objetivos de documentar cada planta y objeto de la lista que aparecerá en pantalla. Al hacerlo serás recompensado con materiales infinitos de ciertos bloques como la madera o fibras.