Después de superar el recorrido de Aguas voladoras como parte de la historia principal de Clair Obscur: Expedition 33, tu siguiente objetivo será adentrarte en el Santuario ancestral. En esta entrada de nuestra guía te vamos a contar paso a paso cómo superar esta zona del mundo (sin spoilers narrativos) y te daremos diversos consejos, además de mostrarte qué secretos, coleccionables o jefes puedes encontrar mientras avanzas en este tramo de la aventura.
¿Cómo completar la zona Santuario ancestral?
Nada más empezar en esta zona, activa la bandera del área Entrada. Aquí verás un nuevo tipo de enemigo: el Petank. Esta criatura es huidiza y siempre se irá moviendo a medida que te acerques a ella desde distintas posiciones. La idea es hacer que se mueva hasta que quede situada encima de una plataforma brillante. De esta forma quedará arrinconada y podrás atacarla para empezar el combate.
Aunque el Petank tiene barra de salud, no es un jefe al uso y, de hecho, no hace grandes daño. Lo complicado de su combate es derrotarlo a tiempo, ya que el Petank siempre acabará huyendo si tardas mucho en derrotarlo. Tendrás que asegurarte de ser rápido para acabar con él (por ejemplo puedes provocarle Ruptura para aturdirlo y hacer que tarde más en irse). Si logras vencerlo, este enemigo deja algunas cuantiosas recompensas en forma de recursos de mejora para el equipo.

Bien, sea como sea, a la izquierda de la plataforma para el Petank, sobre un pequeño riachuelo, tienes el pictos Salto energizante. Siguiendo la corriente del riachuelo podrás encontrar en el acantilado unos asideros que bajan hasta un hueco en el que está también el pictos Marca ardiente.
Continúa por el único camino posible y te toparás con un Chico joven. Después de hablar con él sigue hacia un claro en el que se sucede una escena. Te tendrás que enfrentar a un Sakapatate, un enemigo bastante grande que es débil al fuego y resistente a los rayos. Al derrotarlo, por cierto, consigues el arma Sakaram.

Después de este combate activa la bandera del área Laberinto del santuario. Por delante tendrás una bifurcación. Vamos a tomar primero el camino de la derecha para encontrar una roca en este lateral por la que puedes pasar agachado.

Al pasar al otro lado, verás que hay también otra bifurcación aquí. Si vas hacia la derecha, te encontrarás lo siguiente por este lateral:
- Un área con un enemigo y con croma para recoger.
- Una pared para trepar que conduce a un callejón sin salida con el pictos Inicio energizante II.
- Una cueva a oscuras con un Sakapatate de catapulta y, detrás de este, el pictos Robo de vida al atacar.
- Al fondo de la cueva, subiendo por una cuerda, un Color de lúmina y un atajo de regreso a la entrada de la zona.
Cuando acabes de explorar esta zona, pasa otra vez agachado por debajo de la roca de antes y ve ahora por la izquierda. Llegarás a un claro de flores azules en el que hay una especie de molino de madera y una casucha. Al lado del molino verás a un nuevo enemigo mimo. En un borde del claro también puedes recoger un Color de lúmina. Por último, dentro de la casucha medio en ruinas no olvides recoger un Fragmento de tinte revitalizante.

Tras acabar de hacer esto, para no liarnos, volvemos a la posición del inicio del "laberinto". Nos queda explorar el sendero de la izquierda de la entrada. Dirígete por aquí a una zona abierta con un Sakapatate. Un poco más adelante hay otro rondando cerca de una extraña estatua con esculturas brillantes azules.
A la izquierda de esta estatua tienes un sendero que conduce más adelante de nuevo a una bifurcación. Si vas primero por la izquierda acabarás encontrando a los pies de una estatua un Fragmento de tinte curativo. Cerca, tienes una calle empedrada con un Sakapatate robusto dando vueltas.

En un lateral de esta misma calle puedes encontrar una zona con unos vehículos destruidos y unos cadáveres que tienen el Diario: Expedición 63. Aquí, por los alrededores, si te fijas bien, también vas a encontrar tres cerrojos que pertenecen a una jaula de pintura situada en un terreno elevado.
Para llegar hasta la jaula vuelve a la calle y al lado de la cúpula destruida del edificio verás un estrecho sendero entre árboles. Tienes que meterte por ahí, bajar una cuerda y saltar entre plataformas para llegar a la jaula, que contiene un Fragmento de elixir de croma.
Ya puedes regresar a la calle y subir por el camino iluminado por farolas azules hasta la bandera del área Callejón de la campana gigante. Más adelante te espera el jefe final de la zona, así que prepárate bien.
Tras el combate con el jefe, no abandones la zona todavía. En el lateral de la izquierda de esta arena puedes recoger un Color de lúmina. Además, en el lateral de la derecha, donde hay cuerpos gestrales, puedes recoger un Fragmento de tinte de energía.

Después, cuélate agachado por un espacio entre las rocas cerca de este objeto para hallar un pequeño camino alternativo en el que hay esculturas y el pictos Aumento de aturdimiento.
Ya ahora sí, cuando quieras, abandona la zona para salir de vuelta al Continente. Podrás caminar un poco para entrar en la siguiente zona de la historia, la curiosa Aldea gestral.