Análisis de FIFA 13 (PSVITA)
Es normal escuchar, siempre que sale un juego que acostumbra a lanzar un episodio por año, la típica frase de "¡pero si es igual que el del año pasado!". Normalmente esto no es del todo cierto, ya que las novedades que suelen incluir son más que suficientes para justificar la compra del producto, al menos, para algunos aficionados. Pero en este caso sí. Electronic Arts se ha dormido en los laureles y no ha sabido (o querido) hacer evolucionar el primer episodio de la saga que llegó hace algunos meses a PlayStation Vita.
Hay que ser claros desde el primer momento sobre este aspecto, ya que el juego es prácticamente idéntico al llamado FIFA Football, lanzado junto con PlayStation Vita en su lanzamiento. De hecho, incluso os remitimos al análisis de éste si queréis ver con detalle la base de la que EA parte para el nuevo episodio.
Si ya tenéis este título, FIFA 13 será únicamente una mera actualización de equipaciones y fichajes a precio de novedad, si no, será una agradable sorpresa que se perfila como el juego de fútbol clave, por el momento, para la nueva portátil de Sony. Nosotros lo analizaremos pensando en aquellos que no poseen el anterior episodio, ya que si sois poseedores de éste, repetimos, os encontrareis frente una simple actualización de contenido.
¡A jugar!
En los aspectos jugables, FIFA 13 parte de la base de FIFA 11, por lo que las últimas novedades vistas en las consolas de sobremesa no estarán presentes en esta versión. Sí que añade opciones adaptadas a la portátil, como la posibilidad de jugar con la pantalla táctil o el panel trasero. Mientras que la primera sirve para los pases (o disparar en función de la cámara) y la trasera hace las veces de portería (en función de dónde toquemos, dispararemos el balón). Estos controles son opcionales y podemos desactivarlos en caso de que no se ajuste a nuestro sistema de juego.
Por lo demás, el juego mantiene las mismas posibilidades de sobremesa en lo que respecta a regates, disparos, pases etcétera, pudiendo realizarlos todos usando simplemente los botones físicos de la consola. Todo es, tal y como en las versiones "mayores" muy personalizable, y asegura que la experiencia se adapte al jugador. En lo que respecta al control de los jugadores, éstos responden rápida y correctamente a nuestras órdenes, aunque a veces vemos fallos en la inteligencia artificial que los impulsa a quedarse embobados mirando el balón, como si intentasen moverlo con la mente.
En la pequeña pantalla
FIFA 13 es una versión ligeramente reducida de lo que vemos en consola de sobremesa. Es perceptible una reducción de polígonos en los modelos, y texturas de menor resolución, pero aun así el conjunto sigue siendo destacable para PlayStation Vita. La fluidez es casi absoluta, ya que en algunos momentos de caos vemos como baja la tasa de imágenes por segundo, pero nada que entorpezca seriamente la jugabilidad del título. Los jugadores se parecen a sus homónimos reales, y los estadios son reconocibles a simple vista, aunque en las secuencias de presentación y en las repeticiones (donde esto es más perceptible) el juego puede ver comprometida su fluidez.
En el sonido volvemos a encontrarnos con Manolo Lama y Paco González, sin duda, imbatibles en la locución. Bromas, anécdotas y generalmente adecuación en los comentarios son una constante durante los partidos. Lama y González están acompañados por cánticos reales, e incluso megafonía que nos informa del marcador, las alineaciones o que la grúa va a retirar el coche con la matrícula tal que se encuentra mal aparcado en el exterior. Si no estáis familiarizados con la saga, el aspecto sonoro será sin duda un muy grata sorpresa.
Horas de juego
El fútbol mueve masas, y Electronic Arts sabe cómo tener a los aficionados al juego virtual pegados a la pantalla. FIFA 13 es adictivo, y propone al jugador variedad de modos. Como no podía ser de otra manera, está el obligatorio partido de exhibición, que junto con modos más profundos (conviértete en profesional, carrera, torneo, creador de jugadores) complementan la experiencia de juego. Falta uno de los más populares en otras plataformas, el Ultimate Team, modo que esperábamos que apareciese en esta versión, pero que por el momento, tendrá que esperar.
Incluye, por supuesto, modo de juego a través de internet, que permite elegir entre los modos cara a cara, ligas de amigos, y vestíbulos en los que organizar la partida. El juego online se limita a dos jugadores, pero si hay algo que hemos notado de diferencia con respecto a FIFA Football es una mayor fluidez en estos partidos. No hemos experimentado ‘lag’ grave ni problemas de conexión en los encuentros disputados a través de internet, pero como podéis imaginar, esto depende de las conexiones de cada jugador y no podemos establecerlo como un hecho inamovible.
Conclusiones
FIFA 13 es, claramente, una simple actualización de FIFA Football. El hecho de enfrentarnos al mismo juego de hace unos meses nos lleva a preferir no ponerle nota, ya que la que obtendría como juego no sería representativa de la que obtendría como "nuevo" episodio y viceversa. Las equipaciones de esta temporada y fichajes actualizados son la única novedad real del juego, y por mucho que hayamos intentado encontrar diferencias significativas con el anterior episodio, nos ha sido imposible. Es necesario darle un tirón de orejas a Electronic Arts, ya que muchos aficionados se quedaron esperando este título tras ver cómo la primera entrega del simulador para PlayStation Vita apuntaba muy buenas maneras, esperando que comenzase a recibir las novedades de las versiones de sobremesa.
Independientemente de compartir o no las decisiones de una compañía, podríamos incluso a llegar a entender desde un punto financiero que se descuide este tipo de juegos con entregas anuales en consolas que van a ser sucedidas próximamente, pero hacerlo en una consola que acaba de salir al mercado no nos parece comprensible. De un modo u otro, FIFA 13 es un muy buen simulador, y sigue siendo el juego de fútbol a recomendar para la portátil de Sony, aunque únicamente para aquellos que no tengan FIFA Football o no les importe pagar por tan escasas novedades.