Análisis de F1 2010 (PS3, Xbox 360, PC)
Los aficionados al Gran Circo pueden estar contentos. La Formula 1 ha vuelto a los videojuegos por todo lo alto.
Pablo Grandío ·
Actualizado: 21:31 17/8/2020
GRÁFICOS
8.5
SONIDO
9
NOTA
8.6
DIVERSIÓN
8.5
JUGABILIDAD
8.5
Análisis de versiones PS3, Xbox 360 y PC.
Tras unos años de ausencia, desde el lanzamiento de PlayStation 3 en marzo de 2007, la Formula 1 vuelve a los videojuegos. La licencia, hasta 2008 propiedad de Sony, ha pasado a la compañía británica Codemasters, reputados expertos en videojuegos de conducción que cuentan en su haber con sagas como Race Driver o Colin McRae. La compañía británica lanzó el año pasado F1 2009 para PSP y Wii con bastantes buenos resultados, aunque lejos del sobresaliente, pero las más altas expectativas estaban puestas en este F1 2010, que llega a las consolas de nueva generación y al PC. Y han conseguido hacer uno de los mejores juegos del año.
F1 2010 es una gran noticia para los aficionados a la Formula 1. Como simulador puro y duro, todavía tiene cierto margen de mejora. Tiene varias opciones de configuración de dificultad, pudiendo activar y desactivar ayudas, y en el nivel extremo la simulación es muy buena, aunque no perfecta. Pero como juego de Formula 1, a la hora de ofrecer opciones, inmersión y posibilidades, es el mejor que ha habido desde aquel Grand Prix 3 de Microprose. De aquella, Alonso estaba en Formula 3000.
Codemasters se ha propuesto ofrecer un juego de Formula 1 para todo el mundo, pero que sobre todo logre sumergir al jugador en el mundo del "Gran Circo". Comenzamos el juego, como ya os contábamos en nuestro último contacto con él, eligiendo el nombre, nacionalidad y apodo de nuestro piloto. Al ser esta la versión en castellano, pudimos comprobar no solo la calidad del doblaje, excelente, sino también cómo se han adaptado los diferentes motes a la cultura española. Hay algunos como "Rayo", "Sinfreno", "Supersónico" o "Correcaminos" que podríamos llamar estándar, otros juegos de palabras más o menos acertados como "Vasatogás", "Zero Acién", "Tomas de la Prisa" o "Ricardo Petardo", y homenajes a la cultura española como "Speedy González" o "Fitipaldi", el apelativo de todos los domingueros despistados. También podemos optar por que nos llamen por nuestro nombre de pila, de entre una selección de nombres de chico y chica existente.
Una vez elegidos nuestros diferentes nombres y la nacionalidad, la entrevistadora nos pregunta qué reto queremos (elegimos el nivel de dificultad por defecto), cuánto tiempo queremos estar en la Fórmula 1 (entre tres y siete temporadas) y, finalmente, una de las escuderías que nos ofrecen contrato (todas menos las cinco grandes: Renault, Mercedes, Red Bull, Maclaren Y Ferrari). Al firmar por una escudería accedemos finalmente al menú del juego, ambientado en un paddock, estando en principio dentro de la caravana donde se encuentra nuestro agente y nos habla de nuestros progresos, nuestras exigencias para la temporada y algún detalle más.
F1 2010 diferencia entre nuestra trayectoria como piloto, lo que podemos llamar el modo carrera, y el resto de modos de juego. El menú del paddock nos permite volver al modo carrera ("Trayectoria"), o elegir entre Grandes Premios, Contrarreloj, Multijugador y "My F1", que no es otra cosa que las opciones. La opción de Grandes Premios, como ya comentamos, nos permite elegir entre varias carreras que disputar, con la duración que querámonos, marcándonos una agenda de competición y dándonos el juego una duración estimada. También podemos optar por jugar la temporada completa y, por supuesto, no estaremos sujetos al equipo en el que estamos en el modo trayectoria, sino que podremos elegir al piloto que queramos (incluyendo al que hayamos reemplazado en el equipo que nos haya fichado). La opción de contrarreloj nos permite hacer entrenamientos libres en cualquier pista, mientras que del multijugador hablaremos más adelante en el artículo.
La chicha del juego, aparte del multijugador, claro, está por lo tanto en el modo Trayectoria, una forma ambiciosa por parte de Codemasters de intentar sumergirnos en el mundo de la Fórmula 1. Comenzaremos con unas pocas opciones, pero a partir del cuarto o quinto Gran Premio de nuestra primera temporada ya las tendremos todas abiertas. Como es de esperar, el modo trayectoria está organizado en los diferentes Grandes Premios, y antes y después de ellos podremos consultar cómo va la clasificación de pilotos y escuderías, qué reputación tenemos como piloto, y cómo de contentos o descontentos están con nosotros en el equipo.
Finalmente, podemos acceder al próximo Gran Premio, seleccionando antes de entrar el nivel de dificultad y el tipo de fin de semana. Mientras que en las carreras del resto de modos de juego podemos elegir el número de vueltas, en el modo Trayectoria podemos elegir entre fin de semana corto y largo. El largo incluye la sesión de entrenamientos libres, la de clasificación y la carrera al completo, es decir, con todo el tiempo de entrenamientos, de clasificación y todas las vueltas de carreras. El corto limita los entrenamientos a una hora y la clasificación a 20 minutos, y nos permite seleccionar qué porcentaje de carrera queremos correr. Pero como mínimo, un 20%.
Éste es quizás el único problema del modo trayectoria, la alta duración obligatoria de las carreras. Mientras que los entrenamientos libres podremos abreviarlos lo máximo posible (haciendo solo una vuelta, por ejemplo), y además son útiles para conocer el trazado, y en la clasificación solo tendremos que hacer una vuelta si queremos, las carreras suelen tener como mínimo alrededor de doce vueltas. Podemos hacer que tengan más, hasta el total del recorrido, pero nunca menos del 20% de la carrera.
Este mínimo es inusualmente largo para un videojuego y tiene sus partes positivas: nos obliga a experimentar parte de la emoción de las carreras de F1, haciendo obligatoria una parada en boxes, y también nos permite tener tiempo para remontar si hemos cometido alguna pifia en las primeras vueltas. La contrapartida es que a muchos jugadores pueden cansarles, ya no de aburrimiento o monotonía, sino cansarles físicamente la vista y los reflejos, al estar obligados a correr un mínimo de alrededor de 20 minutos. Es cierto que le puedes dar a pausa y relajar la vista un rato, pero habría estado mejor que se pudiese rebajar a 6 vueltas; la parada en boxes podría ser obligatoria igual, y el juego no exigiría tanto tiempo y esfuerzo.
Ésta es la única crítica a un modo trayectoria que, por lo demás, es impecable. Hace que a los jugadores les importen realmente los entrenamientos libres y la clasificación, al exigir el equipo un resultado mínimo en ésta, y también al estar compitiendo con nuestro compañero por tener el lugar preferente en el equipo. Aparte, para que los entrenamientos libres también interesen, el equipo nos plantea retos cronometrados en ellos de vez en cuando: si los cumplimos, el coche evolucionará, es decir, obtendremos mejoras. En estos entrenamientos, así como en la pantalla previa a las carreras, también podremos modificar los reglajes del coche. F1 2010 es inteligente en este sentido, al ofrecernos unos reglajes rápidos que van desde mojado a seco, pero también permitiéndonos modificar manualmente cada uno de los parámetros del coche en una pantalla.
Del mismo modo, en las sesiones podremos elegir qué neumáticos usar, y en esa misma pantalla planear la estrategia de paradas de la carrera: con qué neumáticos empezamos (blandos o duros), y en qué vuelta queremos cambiar de unos a otros. Esto es fantástico. Al final de las carreras haremos frecuentemente declaraciones a la prensa con tres respuestas diferentes por pregunta. Dependiendo de estas respuestas nuestra relación con el equipo puede empeorar o mejorar. Es un buen añadido, pero algunas respuestas son muy evidentes. Ante una victoria o una buena posición, las tres opciones claras, con otras palabras, son "soy el mejor del mundo", "soy un tío humilde" y "todo se lo debo al equipo". En las preguntas sobre rivalidad con nuestro compañero, las respuestas se resumen en "es mi amigo", "que decida el equipo" y "soy mejor que él". Es fácil predecir las consecuencias.
Uno de los detalles que más nos llaman la atención al jugar, y con los que tenemos que tener mucho cuidado, son las penalizaciones. En F1 es relativamente fácil chocar con los rivales, especialmente en las primeras carreras, y de hecho por la costumbre de otros juegos (donde los choquecitos no tienen consecuencias), no le daremos importancia a embestir por detrás un rival, o tocarlo lateralmente. En F1 2010 los monoplazas son muy frágiles, como en la vida real, y un choque por detrás, aparte de acarrear casi obligatoriamente la destrucción del alerón (y de la parte trasera del rival), generalmente significará una penalización. Dependiendo del nivel de dificultad, se permiten ciertos choques ligeros, pero un choque fuerte que sea nuestra culpa siempre nos supondrá una penalización: de puestos en la parrilla en la sesión de entrenamientos, y de tiempo, es decir, puestos finales, en la carrera.
Otra penalización frecuente, y especialmente dura en los entrenamientos, es la de saltarse curvas. Si "abreviamos" una chicane, o tomamos una curva demasiado por el interior, el juego nos advertirá que nos hemos saltado una curva. En las sesiones cronometradas esto implica vuelta nula. En la carrera, depende de la frecuencia y las consecuencias, y también del nivel de dificultad. Si lo hacemos muchas veces nos penalizarán seguro, y si lo hacemos y adelantamos a un rival en el proceso, declararán el adelantamiento nulo y nos caerán 10 segunditos.
Evidentemente muchas veces estos comportamientos serán involuntarios, como también lo serán las pifias en forma de trompos (la chicane de Montmeló es uno de los picos de dificultad del juego al principio), salidas de la pista por pasadas de frenada y demás raikkonadas. Para eso el juego implementa los "flashbacks", como en los últimos juegos de Codemasters, la posibilidad de rebobinar la acción unos segundos para poder tomar de nuevo esa curva, o frenar antes de embestir al rival por detrás. A estos movimientos se accede a través del menú de repetición, pulsando el botón cuando queramos "reaparecer", y la cantidad de ellos que tenemos está limitado por el nivel de dificultad. En el normal tenemos tres, en el fácil cuatro, mientras que en el más experto simplemente no hay.
Otro aspecto a mencionar de este modo y de las carreras en general es la climatología, tan protagonista como los choques en la Formula 1 real por cómo altera las carreras, los cambios de neumáticos y las entradas en boxes. En F1 está presente y es dinámica, es decir, que podemos comenzar una carrera lloviendo, con intermedios o de mojado, y que vaya dejando de llover y el asfalto se vaya secando. Los factores como aprovechar las zonas húmedas o mojadas de la pista aparecen en juego, y las entradas a boxes a tiempo harán ganar o perder segundos.
En lo que a jugabilidad y control se refiere, el juego incluye una serie de niveles de dificultad que activan y desactivan automáticamente las ayudas, y mejoran los tiempos y la agresividad de los contrincantes. En el nivel normal, tenemos control de tracción y sistema antibloqueo de ruedas, así como una línea de trazada dinámica que nos va indicando cuándo frenar y acelerar, y que para los novatos será vital. Podemos modificar estos parámetros, desactivarlos todos o incluso activar la ayuda de frenada (en este caso el juego se convierte en un paseo), e incluso desactivar el limitador de velocidad en la zona de boxes. Aún así, en el nivel máximo de simulación al juego todavía le queda un poquito de trabajo. Hay, por cierto, una gran variedad de vistas, tanto interiores como exteriores, las suficientes para adaptarse a cualquier gusto.
El modo multijugador ofrece las opciones esperables: carreras rápidas, carreras largas de ocho vueltas, y carreras completamente configurables. Una particularidad de este modo es que el número de corredores está limitado a doce, ya sean controlados por otros jugadores o por la inteligencia artificial, y de hecho solo se permite un coche por equipo. Esperemos que en posteriores versiones amplíen el número de jugadores online.
A nivel gráfico F1 2010 no puede compararse al "monstruo" de este año, Gran Turismo 5, aunque luce muy bien. El veterano motor Ego de Codemasters cumple a la perfección su cometido, moviendo el juego con fluidez, con una gran sensación de velocidad, que de hecho se combina muy bien con los efectos de sonido. Pese a que el modelado de los coches no es espectacular, sí está a un muy buen nivel, aunque los daños no son demasiado variados. El acabado de los escenarios no siempre es igual de bueno. Algunos son realmente vistosos y tienen preciosos efectos visuales; otros son más grises, apagados. Sin embargo, lo que importa es la sensación de velocidad, y F1 2010 saca sobresaliente en esto.
En el sonido por su parte destacan los ruidos de motor y los comentarios del paddock, por encima de la genérica, aunque agradable, banda sonora. El doblaje al castellano es excelente, con instrucciones de nuestro equipo constantemente, comentarios sobre cómo va la carrera, quién es número uno o ha hecho la vuelta rápida más reciente, o qué neumáticos están montando los rivales en boxes. También hay consejos sobre cómo adelantar a un rival, o advertencias sobre cumplir las normas, las condiciones del circuito o la carrera en general.
Conclusión
F1 2010 no decepcionará a los que llevan meses esperando el juego, y años un juego de Formula 1 excelente. Codemasters ha aprovechado su experiencia en el género, pero también se ha empapado de la cultura de la Formula 1 para ofrecer una experiencia muy inmersiva, no solo un simulador de Formula 1, sino un juego del Gran Circo con todas las letras que incluya todos los elementos de la competición para que el jugador interactúe con ellos. Esa emoción del telespectador al ver la carrera y no saber si Alonso quedará antes que su rival al salir de su parada en boxes, al ver cómo aprovecha los neumáticos blandos una vuelta más para arañar unas décimas o cómo influyen los repentinos choques o cambios de climatología, se traslada al juego y somos su protagonista.
Sin duda un título que tenía que existir desde hace ya un par de años, y que como asignaturas pendientes para el futuro tiene algo más de refinamiento en los gráficos y en la jugabilidad (y detalles como el Safety Car, que acabarán poniéndolo, aunque esperemos que opcional). Pero visto lo visto en esta primera entrega, el futuro parece muy prometedor.
Director y fundador
Últimos análisis
Caves of Qud - Análisis
Análisis
Caves of Qud es un complejo roguelike de mundo abierto en que cada partida te hace vivir una aventura radicalmente distinta a la anterior.
Legacy of Kain Soul Reaver 1 & 2 Remastered - Análisis
Análisis
Aspyr sigue la senda de anteriores franquicias remasterizadas ofreciendo un producto que, sin ser redondo, cumple las expectativas depositadas en él.
Astro Bot - Análisis
Análisis
El pequeño Astro Bot vuelve a bordarlo y hace triplete con su aventura más grande y ambiciosa hasta la fecha. Un juego de plataformas imprescindible y cargado de nostalgia que derrocha carisma y buen hacer por los cuatro costados.
Indiana Jones and the Great Circle - Análisis
Análisis
MachineGames nos ofrece el mejor homenaje al Dr. Jones que se ha hecho nunca en un videojuego que, sin embargo, no sabe bien lo que ser y no destaca en ninguno de sus apartados jugables.
Fear the Spotlight - Análisis
Análisis
Blumhouse se estrena en los videojuegos con una fantástica aventura de terror que nos ofrece la experiencia de los clásicos, concentrada.
Fitness Boxing 3: Your Personal Trainer - Análisis
Análisis
Fitness Boxing 3 propone una progresión potenciada en un juego que no quiere sustituir al gimnasio, sino proponer un interesante complemento.