Análisis de MySims (NDS)
Allá por el año 2000, Will Wright creó Los Sims, un simulador de vida para PC que nos ponía al mando de una familia, con el objetivo de mantenerla y evolucionar con ella. Así, empezó el periplo de una de las franquicias de mayor rentabilidad de la compañía Electronic Arts, con un amplio repertorio de expansiones y una segunda parte: Los Sims 2. En la actualidad, después de varios años desde la primera entrega y con un gran número de títulos a las espaldas, aparece MySims, un título específicamente diseñado para la Nintendo DS, en el que centraremos el presente análisis, a la vez que un título homónimo para la Wii, con la intención de darle un brusco giro al diseño y sistema de juego al que la saga nos tenía acostumbrados…
Bienvenido, Mr. Sim…
MySims, primero de todo, nos pondrá en las manos al personaje que será el protagonista de nuestra aventura, y nos permitirá personalizarlo de arriba a abajo, dentro de unos límites, por supuesto. Se nos permitirá cambiarle el estilo de peinado, el color de la piel y el pelo, y la ropa que lleve puesta durante el juego. A partir de que hayamos seleccionado la apariencia de nuestro personaje, la historia nos llevará a una nueva ciudad (a la que deberemos darle nombre nosotros mismos) donde deberemos trasladarnos e instalarnos.
Al llegar a ella, veremos que la ciudad en cuestión no está en su mejor momento, con unas pocas tiendas y algunos habitantes que sobreviven como pueden al tedio del día a día y que sólo pueden lamentarse y recordar tiempos mejores, en los que la ciudad era un famoso destino turístico. Conoceremos a todos los vecinos y a la alcaldesa de la ciudad y, a partir del primer día de estancia en ella, nuestra misión consistirá en hacer que la ciudad resurja de sus propias cenizas y vuelva a convertirse en un lugar agradable y próspero para vivir.
Así, nos instalaremos en una casa apartada, al este de la ciudad, y lo primero que haremos será adecuar mínimamente la estancia para hacerla más habitable: colocaremos los muebles en nuestro hogar, gracias a una cuadrícula sobre la que distribuiremos el mobiliario, representado por cuadrados y rectángulos de diferente color y tamaño. Podremos cambiar totalmente el diseño de nuestros muebles y la disposición de éstos dentro de la casa todo lo que queramos durante el juego, pudiendo comprar nuevos modelos de armarios, sillas mesas, camas, etc. en las diferentes tiendas de la ciudad. Podremos también cambiar el diseño del suelo de nuestra casa, así como las paredes, y también podremos decorarla con plantas y algún que otro accesorio. El número de objetos que podremos introducir en la habitación, será limitado, pero, como ya hemos dicho, podremos cambiarlos todas las veces que queramos. Además, en un estadio más avanzado del juego, podremos diseñar nuestros propios muebles y nuestro vestuario, y podremos intercambiarlos con otro jugador mediante la red local de nuestra consola.
Por otra parte, también podremos cambiar nuestra apariencia física en cualquier momento, accediendo al armario de nuestra casa, en el que podremos cambiar nuestra vestimenta y nuestro peinado. Podremos comprar nuevos vestidos y nuevas prendas de vestir en la sastrería de la ciudad. Cabe decir que las tiendas de nuestra querida villa dispondrán de actualizaciones en el inventario cada cierto tiempo, según vayamos avanzando en el juego, con lo que podremos ir adquiriendo nuevos objetos a medida que el número de visitantes a nuestra ciudad aumente y los diferentes negocios de la ciudad prosperen.
Según vayamos haciendo cosas por embellecer y mejorar nuestra ciudad, irán apareciendo nuevos visitantes y vendrán nuevos habitantes a la misma, algunos de los cuales instalarán nuevos negocios. La prosperidad de nuestra ciudad se mide gracias a una barra de energía que irá aumentando a medida que mejore nuestra situación, y que, una vez se haya llenado al máximo, añadirá una estrella a nuestro contador de prosperidad. Esto hará que el estatus de la villa mejore, que se añadan nuevos cambios a la misma, y que lleguen nuevos habitantes con nuevos negocios para nuestra ciudad.
Controlaremos a nuestro personaje a través del stylus o con la cruceta y los botones, guiándolo por las diferentes zonas de la ciudad y sus alrededores. Deberemos hablar con los diferentes habitantes y turistas, interactuando con ellos a través de unos iconos que representan acciones básicas en la conversación: conversar, escuchar, enfadarse, animar, llorar, alentar, reír… A través de ellas "hablaremos" con los diferentes personajes, teniendo en cuenta que cada acción tendrá un efecto diferente en cada personaje dependiendo del estado de ánimo del mismo en ese momento. Aún así, lograr el éxito en estas conversaciones será muy sencillo, y aunque conseguir dicho éxito será necesario para conseguir nuevas mejoras en nuestra ciudad, conversar con los demás Sims acabará por convertirse en una tarea sumamente aburrida y repetitiva.
Al interactuar con los diferentes habitantes de la ciudad, conseguiremos objetos que nos ayudarán en nuestra empresa, como una cámara de fotos, una caña de pescar, una raqueta de
La variedad de los minijuegos es uno de los defectos de este juego: no son demasiados, y algunos de ellos sólo serán accesibles a partir de un cierto número de horas de juego. Además, muchos de ellos son demasiado simplones para realmente divertir al jugador, y el hecho de que debamos de repetir una y otra vez la misma secuencia de menús para poder jugar a un minijuego que, por otro lado, no durará ni tan siquiera un minuto, acaba por hacer que desistamos muchas veces del empeño. En general, el sistema de menús dentro del juego deja mucho que desear: no hay ninguna opción de "repetir" o "volver a intentarlo" en los diferentes minijuegos, así como tampoco podremos realizar dos acciones diferentes seguidas cuando queramos comprar o vender algún objeto en las tiendas, teniendo que volver a empezar y pasar la misma secuencia de texto una y otra vez cuando queramos realizar una o varias de las acciones antes mencionadas.
Por otra parte, no podremos interactuar con muchos de los aspectos de la vida diaria de los personajes del juego: podremos cambiar el mobiliario de nuestra casa, las flores de los jardines, el vestuario de nuestro personaje… Pero no podremos (ni deberemos) alimentar o dar de beber a nuestro protagonista, por ejemplo. De hecho, dormir será la única acción que podremos hacer dentro de las necesidades humanas que toda persona debe cubrir, pero esto será absolutamente innecesario, ya que en el juego podremos pasarnos noches y noches en vela y seguir tan frescos realizando nuestras tareas cotidianas. A pesar de todo, durante la noche no podremos realizar muchas de las actividades del juego, con lo que la mejor alternativa para pasar el tiempo será, en la mayoría de los casos, pasar la noche durmiendo.
Contaremos en el juego con un menú de personaje en el que podremos ver, a parte de nuestro inventario, el estado de los diferentes habitantes de la ciudad, los premios que hayamos conseguido en los diferentes minijuegos, el mapa de la zona, y algunos archivos suplementarios, como la lista de peces que pescaremos durante el juego, con información sobre el hábitat y las costumbres de los mismos.
En la pantalla superior de la consola podremos ver, alternativamente, un mapa de la zona en la que estemos, con los personajes que podemos encontrar en ella en cada momento marcados en los lugares en los que se encuentren, o un reloj que nos marcará los diferentes momentos del día (mañana, mediodía, tarde y noche), y que nos permitirá ver cuánto tiempo falta para pasar de una franja horaria a otra.
Por lo que respecta al multijugador, el juego no cuenta con ninguna opción online, así como tampoco podremos disfrutar del juego junto a otro jugador mediante la conexión local, cosa que resta muchos enteros a la diversión del título. MySims es un título ciertamente largo, con el que podremos pasar horas y horas, pero que las opciones multijugador se reduzcan a sólo poder intercambiar algunos diseños de muebles y vestuario nos sabe, sin duda, a poco…
Apartado técnico
Los gráficos del juego son muy correctos: el juego cuenta con modelos de los personajes en tres dimensiones, de aspecto bastante infantil, que dan una impresión general desenfadada y divertida. Tanto los diseños de los personajes como de los edificios y las localizaciones son bastante dignos, así como el diseño general de los minijuegos, de gráficos más simples pero igualmente funcionales. Aún así, los personajes acaban por ser demasiado parecidos entre sí, sobretodo los visitantes y turistas, y los diseños de los diferentes vestuarios y del mobiliario de los edificios siguen unos patrones muy similares entre ellos.
La música acompaña la acción sin pena ni gloria. Encontraremos diferentes músicas para los diferentes momentos del día, así como para los diferentes minijuegos y, en las conversaciones, para los diferentes estados anímicos de nuestros interlocutores. Aún así, la banda sonora no es uno de los puntos fuertes del juego: la música de MySims está integrada por melodías repetitivas y sin personalidad, que, simplemente, acompañan la acción del juego sin ninguna pretensión.
En lo que a la jugabilidad respecta, el juego adolece de algunos fallos, como la interfaz de menús antes mencionada. Ésta acaba por incomodar bastante, y puede llegar a desesperar, sobretodo cuando una y otra vez debamos repetir la misma secuencia para acceder a los diferentes minijuegos, sobretodo en las primeras horas de juego, cuando aún no nos hayamos habituado al manejo de los mismos y debamos repetirlos una y otra vez para lograr algún resultado decente…
Por otra parte, el juego cuenta con pocos alicientes que hagan superar nuestras puntuaciones en los minijuegos, ya que ganar las diferentes condecoraciones no servirá de mucho y, al final, jugaremos para ganar dinero que nos permita seguir comprando los diferentes productos de los comercios de la ciudad. Aún así, esto no nos representará un problema demasiado grande, ya que el juego es muy generoso en lo que al dinero se refiere y los objetos no son caros en absoluto. Por otra parte, al no tener ninguna necesidad básica que cubrir, el único gasto regular que podremos hacer es el que hagamos al coger los vehículos que nos llevarán a las distintas zonas del mapa. Pero, aún así, este gasto será muy pequeño y, la mayor parte de las veces, innecesario, ya que a la mayoría de las zonas podremos acceder caminando sin ningún problema.
Conclusiones.
Con MySims, Electronic Arts ha querido dar un cambio de diseño a la saga, así como modificar el sistema de juego, queriendo hacer, quizás, un producto más al alcance de todo el mundo. El problema es que les ha salido un título demasiado centrado en el público infantil, que no ofrece nada nuevo y que, debido a algunos defectos graves en el sistema de juego, es de muy lento avance y acabará por aburrir al jugador. Por otra parte, el control sobre las necesidades de nuestro protagonista se verá muy limitado, y los minijuegos son demasiado simples como para enganchar al jugador, con lo que, probablemente, muchos jugadores se cansarán de este título a las pocas horas de juego.