En Vandal Random seguimos celebrando el auge de la cultura otaku. Si en el anterior artículos os hablábamos de la definición de otaku y de sus implicaciones en la cultura del manga y el anime, así como de la importancia de los productos procedentes de Japón en nuestro día a día, hoy intentamos añadir un poco de contexto a las diferentes aficiones existentes alrededor de la misma. ¿Cuántos tipos de otaku existen?
Los tipos de Otaku más comunes: múltiples aficiones y vertientes que celebran la cultura japonesa
El manga y el anime son el corazón de la afición. Es así, son el núcleo del entretenimiento japonés, una de sus más bellas e interesantes formas de expresión audiovisual, y el principal elemento con el que millones de personas disfrutan y llenan su tiempo libre y ocio. Aunque suene un poco a boutade, el manga son aquellas historias ilustradas e impresas, que se editan en tomos y revistas. Por su parte, el anime son las historias animadas en formato de cortometrajes, series o películas para cine, televisión tradicional o digital. En otras palabras: la diferencia entre manga y anime es, principalmente, el formato.
Pero no es la única gran exportación en términos culturales de Japón. También podemos ser aficionados a su gastronomía, a su folclore, sus videojuegos o incluso a sus figuras de colección, todas piezas de un acervo cultura mucho más mayor e interconectado de lo que creemos. Os seleccionamos algunos tipos o variantes de otakus para que comprendáis un poco mejor esta idea.
1. Otaku del anime
Son aquellas personas entusiastas del anime que disfrutan coleccionando y viendo anime. Aunque mucha gente disfruta viendo anime, pues es una afición cada vez más grande, global y universal, los otakus lo llevan a otro nivel y son considerados incluso más frikis que sus homólogos amantes del manga. Por ejemplo, personas se obsesionan más que otras con un determinado aspecto del anime, o incluso a un género en particular, lo que lleva a otros tipos de obsesión de los fans de la cultura japonesa, como el coleccionismo de figuras. Un verdadero otaku debería haber visitado Akihabara al menos una vez, núcleo de aquello que aman.
2. Otaku del manga
El manga es una industria fuerte en Japón. Únicamente tenéis que echarle un vistazo a las cifras que manejan algunas de las licencias, sagas e historias como One Piece, que está muy cerca de superar el récord de ventas de Harry Potter. Debido a la amplia oferta existente, es fácil encontrar un manga que satisfaga nuestros propios intereses personales, por muy nicho que sea -por ejemplo, historias de guerra para los gunji-ota (otaku militares) o manga yaoi para los kifujin (fans del manga homoerótico)-. Hay de todo. Debido a la gran cantidad de publicaciones y del ritmo de las mismas, aquellos otaku con un gran interés por el manga pueden tener una colección de miles de volúmenes.
3. Otaku de los videojuegos
Es de cajón, sí, pero también hay otakus de los videojuegos. Son aquellos que viven y respiran por y para los videojuegos, poseyendo varias consolas, adorando a una marca en concreto o siguiendo religiosamente los nuevos lanzamientos de su saga preferida como Pokémon, Final Fantasy o Dragon Quest. En los últimos años, los otakus de los videojuegos no se limitan a un solo tipo de plataforma o máquina en concreto, ya que también son comunes los otakus de los juegos para teléfonos inteligentes y los otakus de las consolas portátiles, un nicho realmente importante en Japón. Algunos otakus de los videojuegos pueden tener más amigos online que en la vida real, lo que puede llevar a pensar que los otakus de los videojuegos tienden a ser solitarios, pero nada más lejos de la realidad.
4. Otaku de figuras
El merchandising es cada vez más común en nuestros días. Cualquier historia, saga, manga o anime está sujeta a los designios del mercado y al coleccionismo. Los otakus de figuras suelen coincidir con los otakus de videojuegos o anime/manga, ya que muchas figuras se crean para representar a personajes de estas obras artísticas. Es lo que decíamos al comienzo del reportaje: los tipos de otaku confluyen y se retroalimentan. Pero hay que destacar que aquellos otaku de las figuras más dedicados, se centran sobre todo en coleccionarlas para exponerlas en vitrinas especiales, cuidándolas mucho, y comprándose aquellas ediciones limitadas o especiales. Marcas como Bandai o Kotobukiya son de las más cotizadas y veneradas. ¿Un ejemplo? el merchandising de Pokémon o Dragon Ball y su demanda no hace más que crecer.
5. Otaku militar
Es uno de los tipos más especiales y distintos. Hablamos del otaku militar o Gunji-ota, aquella variante que incluye a las personas que se dedican al ejército o a aspectos de éste muy concretas, como el armamento, los vehículos especializados y los uniformes, tanto históricos como actuales. Esta rama también incluye a los aficionados a los Gundam, los enormes robots de la serie Gundam y otras máquinas de guerra o de combate similares. Si amáis los mechas y sus historias, es probable que estéis en este grupo. Y lógicamente, coleccionéis figuras relacionadas con las mismas.
6. Otaku del tren
Esta categoría es peculiar, pues incluye a las personas que desarrollan una pasión por este medio de transporte, uno de los más usados y habituales en Japón. Los densha otaku, a veces también llamados tetsudou otaku, son capaces de detectar modelos de trenes clásicos y modernos con un simple vistazo, y conocen a la perfección sus rutas, horarios o si hay algún tren con una decoración única circulando por las vías de cara a la promoción de alguna serie o anime en concreto. Además, tienen figuras y videojuegos relacionados, por lo que una vez más, las aficiones confluyen y se juntan.
7. Cosplay Otaku
El roleplay en vivo y el cosplay son una actividades con cada vez mayor tirón en Occidente, pero es de recibo destacar que en Japón la gente se disfraza con especial ahínco y dedicación de sus personajes favoritos para llevar sus aficiones a un nuevo nivel. Estos otakus hacencosplay de todo tipo de personajes de anime, dibujos animados y videojuegos, a veces con gran detalle y otras con gran originalidad. Cada año se celebran diferentes convenciones en Japón para que los cosplayers muestren su talento a la hora de disfrazarse del personaje que representan. Este aspecto ha gozado de un nuevo vuelco con las retransmisiones online a través de plataformas como YouTube y Twitch, en las que muchos otakus interpretan a sus personajes o hacen desfiles con sus nuevas creaciones, modelos y disfraces.
8. Idol Otaku
Aunque es cierto que es un fenómeno que últimamente se orienta a Corea del Sur o el K-Pop -la música relacionada con este tipo de cultura-, los idol otaku se originaron en Japón y son personas aficionadas a las bandas de chicos o chicas del país. Suelen ser dedicados miembros de su club de fans, compran sus CDs y todo el merchandising disponible que la banda lance y básicamente están presentes en todos sus conciertos. Con el auge de las redes sociales, participan en montajes en redes, fanfics con shippeos ente integrantes de los grupos e incluso realizan coreografías sincronizadas durante los conciertos. Viven por y para la banda o el ídolo que admiran, y están presentes en los encuentros y saludos que organizan las discográficas. Lo divertido es que dentro de esta afición hay otra variante, la de los ídolos virtuales, personajes que no existen pero que publican trabajos musicales, cantan en directo ante millones de personas o tienen personalidades marcadas. Miku Hatsune, todo un fenómeno, es el ejemplo más relevante.
9. Otaku del folklore
Japón rebosa una cultura tradicional muy presente en todos los ámbitos de su día a día. Históricamente es muy relevante, y al igual que hay otakus que admiran el pasado, presente o futuro militar, hay otakus que deciden volcarse en las distintas épocas del Japón feudal, empapándose de sus batallas, personajes, emperadores o samuráis. Y no solo eso. Mística como pocas, y profundamente respetuosa con el pasado, la sociedad japonesa aviva y disfruta con leyendas e historias sobrenaturales sobre parajes naturales, criaturas del pasado remoto y más, como los fantasmas o yokai. Otra variante otaku del folklore, es aquella que se centra en un tema en concreto, como el cine y las kaiju eiga o películas de monstruos gigantes protagonizadas por seres de ficción como Godzilla o Gamera.
10. Otaku de la gastronomía
Esta es fácil de explicar: los otakus de la gastronomía aman cualquier producto culinario surgido de Japón, como el sushi, los dulces tradicionales que vemos en anime y manga o cualquier receta que sea mínimamente relevante. Desde hace décadas, el sushi y todo lo que se relaciona con él ha aumentado su popularidad en Occidente, pero al mismo tiempo se han abierto fronteras a comidas, productos y chucherías que antes no salían de Japón. El ramen y otras variantes, son cada vez más comunes en ciudades y aficionados a la cultura japonesa, con locales dedicados, restaurantes y tiendas de exportación que alimentan a una demanda cada vez mayor.
