Aunque siempre nos salten las alarmas cada vez que hablamos de meteoritos, rara es la ocasión en la que realmente ocurre algo destacable que perjudique a nuestro planeta. La NASA alerta al mundo, por norma general a través de sus propios comunicados, de sus últimos descubrimientos y de los movimientos extraños que recoge en nuestra Vía Láctea. Por suerte, hasta la fecha no nos hemos topado con ninguna situación similar a No mires arriba, pero es inevitable no estremecerse con este tipo de noticias. La Administración Nacional de Aeronáutica y el Espacio ha advertido de la pequeña probabilidad de que un meteorito, al que han denominado como 23 DW, se estrelle contra la Tierra dentro de 23 años. Concretamente, el 14 de febrero de 2046. ¡El día de los enamorados!
We've been tracking a new asteroid named 2023 DW that has a very small chance of impacting Earth in 2046. Often when new objects are first discovered, it takes several weeks of data to reduce the uncertainties and adequately predict their orbits years into the future. (1/2) pic.twitter.com/SaLC0AUSdP
— NASA Asteroid Watch (@AsteroidWatch) March 7, 2023
La NASA cree que este meteorito no es demasiado importante, pero alerta por si acaso
"Hemos estado rastreando un nuevo asteroide llamado 2023 DW que tiene una probabilidad muy pequeña de impactar la Tierra en 2046. A menudo, cuando se descubren nuevos objetos por primera vez, se necesitan varias semanas de datos para reducir las incertidumbres y predecir adecuadamente sus órbitas en el futuro", dice la NASA desde Twitter.
Davide Farnocchia, ingeniero de navegación del sistema NASA’s Jet Propulsion Laboratory’s Sentry, ha querido calmar a la población con un mensaje que resta importancia a ese meteorito: "Este objeto no es particularmente preocupante".
El 23 DW tiene diámetro de diámetro de 49 metros y pasaría, aproximadamente a 1.828.086 kilómetros de nuestro planeta. En principio no tendría que haber ningún cambio de planes con respecto a esto, pero al ser un meteorito que tardará tanto tiempo en cruzarse con nosotros, es posible que pueda haber riesgo de cambios, de ahí que la NASA lo comunique una vez detectado. En cualquier caso, veremos cómo y dónde estamos en 2046, porque habrá llovido bastante.