Devolver Digital es una editora que ha ganado popularidad y reputación durante la presente generación de consolas gracias a la publicación de títulos rompedores como Hotline Miami, Minit y The Red Strings Club. Sin embargo, les preocupa que los numerosos servicios de suscripción tengan un efecto Netflix: que sus propuestas acaben enterradas en unos catálogos cada vez más amplios.
Graeme Struthers, cofundador de Devolver, ha confesado en una entrevista con GameSpot que "el mundo de las suscripciones es preocupante". "Estamos activos en esas áreas, así que no podemos quedarnos en los márgenes y tan solo quejarnos de esas cosas. Game Pass, PlayStation Plus y Apple Arcade, son cosas en las que estamos participando", añade.
La editora tiene juegos como Bleak Sword y Cricket Through the Ages en Apple Arcade; Minit y Ruiner en Xbox Game Pass; y han regalado títulos como Not a Hero y Hotline Miami en PlayStation Plus. Es decir, varios de sus juegos están disponibles en estos servicios e incluso se han estrenado directamente en ellos.
"Te preguntas si esto va a dirigir a una situación en la que haya tanto contenido que te sientas desbordado.
Eso es lo que nos mantiene despiertos por las noches", dice el directivo, antes de añadir: "Eso y Donald Trump, y Boris Johnson".
Los datos de Xbox Game Pass dicen otra cosa
Devolver no es la primera editora en mostrar preocupación con estos servicios, cuyo reparto de ingresos a las editoras y desarrolladores no son públicos, aunque Paradox Interactive dijo que no se gana mucho dinero en ellas. Sin embargo, Microsoft publicó datos internos de Xbox Game Pass que muestran un escenario menos apocalíptico.
Los suscriptores de Xbox Game Pass juegan un 40% más, según Agostino Simonetta, responsable del programa ID@Xbox, dirigido a apoyar a desarrolladores independientes. El ejecutivo aseguraba que esos jugadores están probando más títulos que antes que no aparecen en el catálogo de Game Pass.
Además, una encuesta interna mostraba que un 91% de los suscriptores habían jugado un título que no probarían si no estuviera en Xbox Game Pass, y un 30% de los jugadores están accediendo a géneros que no eran comunes en sus hábitos de juego antes de suscribirse al servicio de Microsoft.
