Destiny 2 ya está disponible en PC, PS4 y Xbox One. El título de Activision y Bungie se ha visto envuelto en problemas que han enfadado repetidas veces a la comunidad de jugadores. Sin embargo, parece que hay una buena razón para que el juego experimente errores: Destiny 2 sufrió problemas de desarrollo durante su producción.
Cambio de directores y tiempo limitado
En una nueva entrega de Destiny Tracker, Jason Schreier de Kotaku pudo dar cuenta de que el periodo de creación del juego no fue, precisamente, un camino de rosas.
"Hubo un director anterior que dirigía el juego antes de que Luke Smith, quien es el actual director, se hiciera cargo. Entonces, ese tipo fue puesto a un lado, y Luke Smith accedió al puesto", señaló.
Además, mientras que el primer Destiny contó con cinco años de desarrollo "contando la preproducción", Destiny 2 tuvo un marco de tiempo mucho más reducido, unos 16 meses después de salir de su fase de reinicio en 2014, cuando se produjo el cambio de dirección.
En este sentido, Schreier hizo notar que muchas piezas de contenido planificado del juego terminando siendo descartadas, incluido el regreso de ciertos personajes y la posibilidad de explorar ciertos planetas. En consecuencia, el equipo se centró más en crear nuevos contenidos para el juego desde cero, en lugar de mejorar las mecánicas que ya existían.
La acción de Destiny 2
Destiny 2 está disponible tanto en PS4 y Xbox One como en PC. En esta segunda entrega, los jugadores se trasladarán a la caída de la última ciudad ante las fuerzas invasoras dirigidas por Ghaul, el comandante de la Legión Roja. Os recordamos que la dificultad Prestigio para la incursión Leviathan estará disponible el 18 de octubre.
Desde Vandal le dedicamos un análisis que podéis leer en el siguiente enlace, así como una guía que también os invitamos a consultar.