Juegos de Estrategia para Xbox One

The Settlers, desarrollado por Ubisoft Blue Byte, permite explorar, colonizar y conquistar islas desconocidas en un mundo de fantasía medieval. Obligados a abandonar su tierra natal tras un devastador cataclismo de origen desconocido, los Colonos navegan hacia lo desconocido con la esperanza de encontrar un nuevo hogar. No solo se enfrentarán a incontables desafíos, sino que también se toparán con un antiguo misterio que cambiará sus vidas para siempre.

Legend of Keepers: Career of a Dungeon Manager es un roguelite de estrategia desarrollado por Goblinz Studio para PlayStation 4, PlayStation 5, Xbox One, Nintendo Switch y PC. Un juego de estrategia tipo roguelite y de gestión de mazmorras que nos pone en la piel de los malos, en el que tenemos que contratar a monstruos y gestionar las trampas para machacar a los héroes que se adentran en nuestra mazmorra.

Age of Empires 4 es la cuarta parte de la veterana saga de estrategia en tiempo real, Age of Empires. Bajo la dirección de Microsoft y con el desarrollo a cargo de Relic Entertainment y el nuevo estudio World’s Edge, se trata de una secuela que pretende recoger conceptos clásicos de los títulos anteriores y presentar nuevas ideas bajo un espectacular apartado gráfico en 3D que nos llevará a la Edad Media.

Age of Empires II: Definitive Edition es una remasterización de Age of Empires 2 con bastantes novedades que celebra, 20 años después, el lanzamiento de este querido y recordado juego de estrategia. Una de las principales novedades de la Definitive Edition son los gráficos, adaptado a pantallas de resolución 4K, y la renovación de su banda sonora. Es una puesta a punto para disfrutar en hardware moderno este título de AoE.

Weedcraft Inc de Vile Monarch y publicado por Devolver Digital es un juego de estrategia y simulación como tantos otros, pero con un giro sorprendente y único: el cultivo y venta de la marihuana en Estados Unidos, un tema que está de plena actualidad y posee muchas aristas. Precisamente eso es lo que analiza el juego: todas sus implicaciones en la política, cultura, ocio y por supuesto, la economía.