Call of Duty: Warzone ya no es lo que era. La secuela del querido battle royale de Activision, a pesar de hacer esfuerzos por intentar diferenciarse de su predecesor, ha fracasado en el intento de ofrecer una experiencia diferente a sus jugadores habituales. La primera temporada de la secuela de Warzone no fue demasiado bien en cuanto a actividad y pérdida de usuarios. El gulag 2vs2, el mapa de Al Mazrah, la eliminación del modo Resurgimiento, el nuevo sistema de loot y el funcionamiento de la tienda no terminaron de convencer a la comunidad. Raven Software ha tomado el mando, de nuevo, de este multijugador free-to-play para enderezarlo, y la temporada 2 es el ejemplo de ello.
El estudio que brindó una larga y saludable vida al primer Warzone (dejando a un lado la abundancia de hackers por falta de un sistema anticheat) ha dado un importante giro de timón con la publicación de la nueva temporada. Entre los cambios más destacados, encontramos la eliminación del sistema de loot de la primera temporada, el regreso al gulag 1vs1 y la implementación del modo Resurgimiento a través del mapa de Ashika Island. La respuesta de la comunidad a estas implementaciones han sido positivas, pero por lo que sea Call of Duty: Warzone 2.0 continúa sin hacer ni la mitad de ruido que la anterior entrega. Los cambios establecidos son muy positivos, pero, ¿han sido suficientes para resucitar el juego?
Ashika Island es la gran novedad de la temporada 2: Vuelve el ritmo arcade de Call of Duty al battle royale
Yendo directos al grano. Sí, Ashika Island y el modo Resurgimiento son ahora un verdadero reclamo para parte de la comunidad de jugadores del primer Warzone que abandonó el juego ante la inmensidad de Al Mazrah. La incorporación de un mapa más pequeño significa que la esencia arcade de Call of Duty vuelve a estar sobre la mesa. El frentismo es plato principal en este nuevo escenario que encantará a los más veteranos por incluir parte de algunos mapas clásicos, como Castillo de Call of Duty: World at War. El escenario en sí es bastante llano con pocas zonas elevadas y abundancia de edificios (es muy Verdansk en ese sentido), lo que hace que los equipos estén en constante movimiento saltando de una zona a otra para buscar loot y arrasar a los enemigos.
Ashika Island es extremadamente sencillo, con un par de vueltas podemos conocernos el mapa de memoria, lo que acelera el proceso de familiarización con sus diferentes zonas e invita a continuar jugando. En otras palabras, es fácil de memorizar y eso hace que no sea frustrante visitar áreas nuevas o explorar un poco fuera de las áreas de aterrizaje habituales.
Hay camperos, como en cualquier mapa o modo de Call of Duty, pero en su mayoría Raven Software ha ofrecido las herramientas suficientes como para combatirlos: hay muchas opciones para escalar por las partes exteriores de los edificios para colarnos en busca de jugadores que estén escondidos, favoreciendo así el ritmo de las partidas. Y el "nuevo" sistema de loot favorece el ir rápido de un sitio a otro.
La tienda, por el contrario, no acompaña en ese intento de volver a lo arcade de la saga, puesto que su funcionamiento sigue siendo el mismo. ¿Qué queremos decir con eso? Que los UAV siguen siendo limitados y por tanto no podemos ir corriendo a lo bestia por el mapa. Ni por este, ni por Al Mazrah. Vamos un poco a ciegas y eso hace que, a veces, el ritmo decaiga un poco. Pero en general es un escenario que no tiene nada que envidiar a otros como Fortune's Keep o Isla del Renacer. Los enfrentamientos son constantes, rápidos y el tiempo de reaparición es como los tiempos de carga de PS5 y Xbox Series X/S: ni te enteras y ya estás otra vez vuelta al ruedo.
La temporada 2 opta por retroceder en el tiempo y eliminar la "involución" de algunos apartados
En líneas generales se tacharon a la mayoría de las novedades de Warzone 2, en su lanzamiento, como una involución de la primera entrega. Raven Software ha cortado por lo sano y como os comentábamos al inicio ha hecho que Warzone 2 se asemeje más a la anterior entrega. Por lo que el loot que encontramos en cajas cae al suelo, igual que el de los cadáveres de los enemigos. El gulag es más justo y ahora las placas se pueden equipar rápidamente. Esta última característica puede parecer una tontería, pero no lo es en absoluto. Poder equiparse la armadura mientras nos movemos buscando cobertura hace que el juego se torne más veloz. Raven Software ha eliminado ese realismo de la primera temporada que tanto gustó a algunos.
Si algo funciona, es mejor no tocarlo, o por lo menos eso dice la mayoría. Sin embargo, Activision siempre ha trasteado con la saga de Call of Duty tanto como ha querido. Eso ha provocado que algunas entregas salgan bien y que otras sean un desastre absoluto. Con Warzone, no obstante, la compañía no puede permitirse eso, dado que el battle royale es el camino que conecta las diferentes entregas de la saga de ahora en adelante, y si no es jugado por la comunidad entonces las ventas podrían caer en picado. De igual forma que los números de jugadores activos. Estos ajustes sirven para mostrar que se escucha a la comunidad, y aunque la primera temporada de Warzone no estuvo nada mal (porque ofrecía algo diferente) el público quiere más de lo mismo, y eso es lo que ha conseguido.
Las novedades de la temporada 2 de Warzone 2 no son novedades per sé, sino un regreso a lo que ya teníamos. La fórmula del primer Warzone era casi perfecta. La comunidad estaba muy a gusto con mapas como Verdansk, Fortune's Keep e Isla del Renacer, y tampoco había queja con el movimiento del personaje, ni la tienda, ni el sistema de loot. Para ahorrarse problemas, Raven Software ha echado marcha atrás. El resultado, en líneas generales, funciona, pero se siente raro. Warzone 2 ha perdido parte de su esencia y ahora, sí que sí, parece que estemos ante una actualización del primer Warzone más que frente a un juego independiente. Básicamente porque son dos juegos extremadamente parecidos: mismas armas (con diferente nombre), mismo sistema de loot, mismos modos...
Todo ello sin duda ayudará a que los habituales del anterior Warzone retomen su interés por el battle royale de Activision. Empero, es un paso atrás en lo que respecta a crear una nueva entrega que tenga su propia esencia. Sí, somos conscientes de que cada Call of Duty tiene prácticamente los mismos esquemas que el anterior, con algunas novedades. La única diferencia es que aquí no hay novedades. Lo que se consideraba así ha terminado siendo una involución para la comunidad y se ha regresado a lo anterior. La temporada 2 tiene todos los ingredientes para funcionar, de eso estamos seguros. Ahora solo falta que los números acompañen.
Podéis consultar nuestra guía para no perderos nada de Call of Duty: Warzone 2.