Los juegos de carreras futuristas han tenido, hasta nuestros días, una larga trayectoria (que ya tratamos en Vandal Online en un reportaje especial) y su nómina es mucho más extensa de lo que podría pensarse en un principio, si bien es cierto que en estos últimos años hay dos nombres que han brillado siempre con luz propia: F-Zero y WipeOut.
Muchos recordaréis cómo el original WipeOut para PlayStation aterrizó allá por 1995 en la todavía novata consola de Sony, reavivando la pasión por este subgénero de los juegos de velocidad. En los años siguientes recibimos dos entregas más y una adaptación para Nintendo 64 en 1998, justo antes de que Psygnosis se convirtiese en un estudio interno de Sony. Pero después de las tercera entrega para PSOne hubo una pequeña pausa, hasta la llegada de WipeOut Fusion ya para la actual PlayStation 2, un juego que, sin embargo, recibió críticas no del todo positivas. Ahora, pasados otros tres años, la saga se prepara para esta nueva entrada que pondrá a prueba los circuitos de PSP.
Esperábamos su regreso para la consola que inaugura este camino en el mundo portátil para Sony desde que en el E3 2004 hizo una brevísima aparición en forma de vídeo, aunque luego no se ha desvelado prácticamente nada hasta los últimos meses. Es durante este tiempo cuando hemos empezado a conocer datos sobre el juego, como el hecho de que soportará multijugador para hasta 8 personas y la posibilidad de descargar en el futuro más circuitos, naves, música y otros elementos: eso sí, de momento, está previsto que estas descargas de contenido extra sean gratuitas y están siendo programadas paralelamente al juego, tratándose con casi total seguridad de una estrategia para prolongar la vida del juego ofreciendo estos incentivos de manera periódica a los compradores. En cualquier caso, esperamos que si se continúa con este plan de ofrecer descargas, sean, como se ha indicado, de modo gratuito.
WipeOut Pure no se trata de una conversión de una entrega antigua, o un "remix" con cuatro bobadas: es una versión completamente nueva que nos va a ofrecer 12 circuitos inéditos, además de 4 clásicos rescatados de entregas anteriores (concretamente, uno por cabeza). Estos circuitos serán recorridos a toda velocidad por naves totalmente rediseñadas, aunque algunas de ellas con nombres y un aspecto que nos recordarán a algunos modelos ya conocidos por los seguidores de esta saga. Por supuesto, todo el sistema de armas ha sido rediseñado, conservando algunas de las más queridas por los programadores, modificando otras y añadiendo un puñado de nuevas posibilidades que, esperamos, den muchísimo juego a la hora de centrarnos en las partidas en grupo.
Además, ahora las armas tendrán una nueva función, pues serán el único modo de recuperar la energía perdida de nuestra nave: cuando recojamos un arma podremos escoger entre usarla ofensivamente o absorber su energía. Asimismo, se rescata el Zone Mode que hizo su aparición en WipeOut Fusion (la entrega de PS2) aunque esta vez contará con mapas propios que servirán para aprovechar al máximo las posibilidades de juego. Pero pese a este modo de juego, WipeOut Pure será más bien un regreso a la esencia más pura de las primeras entregas, centrando los circuitos más en la velocidad que en los entramados imposibles y haciendo que las naves no estén "pegadas" al suelo, abandonando de este modo una tendencia que se había implantado en los dos últimos videojuegos.
Según Studio Liverpool, las naves han sido creadas de una manera mucho más equilibrada, o lo que es lo mismo, mejorando muchísimo la balanza de puntos a favor y puntos en contra de los bólidos, de manera que ninguna nave sea superior a otra y, sin embargo, ninguna sea imposible de controlar satisfactoriamente en algún circuito. Además, si en algún momento pensamos que un circuito es imposible de abordar con una nave, un amigo siempre podrá pasarnos sus puntuaciones de manera que podamos compararlas y ver, también, cómo se desenvolvió en ese circuito gracias al ya clásico sistema de la nave fantasma: un modelo semitransparente e intangible que podremos ver mientras nosotros corremos y que reproduce exactamente lo que hizo el jugador, de manera que podamos ver nuestros errores o, en este caso, cómo deberíamos hacerlo.
Lo mostrado hasta ahora no puede sino llenarnos de esperanza: el juego tiene una sensación de velocidad logradísima, muy impactante, así como una línea de dibujo del horizonte bastante alejada... eso sí, en lo referente a la texturización no parece, de momento, tan ambicioso como otros títulos para PSP aunque se ha mantenido el estilo visual tan característico, por lo que el resultado global no parece que vaya a desmerecer en absoluto. Además, los escenarios mostrados son muy diferentes entre sí, lo que garantiza una variedad más allá de poner una curva aquí o allá, y eso siempre es de agradecer. Naturalmente, los más espectaculares son los que se desarrollan en entornos urbanos, mostrando la arquitectura futurista en los márgenes del circuito, aunque no por ello es menos sorprendente correr en un circuito copado de túneles angostos o bajo el agua, siempre a toda velocidad, y con un buen número de naves a nuestro alrededor.
WipeOut Pure se perfila, de este modo, como una de las grandes apuestas en el género de la velocidad para PSP (y no son pocas). A las puertas de su desembarco en el mercado estadounidense (acompañará a la consola en su lanzamiento) tan sólo falta ver cómo se depuran los últimos detalles y esperar que a los europeos nos llegue pronto la posibilidad de disfrutarlo en todo su esplendor.