Suicide Squad: Kill the Justice League fue uno de los platos fuertes del State of Play que tuvo lugar el jueves por la noche. Rocksteady Studios, creadores de la saga Batman Arkham, anunciaron este título junto a Warner Bros. Games en 2020, aunque no ha sido hasta ahora que hemos podido ver un gameplay extendido para entender con más claridad cómo será su jugabilidad y hasta qué punto se explotarán las características de cada uno de los cuatro integrantes que conforman este pintoresco Escuadrón Suicida.
Antes de repasar todas las novedades que los responsables del proyecto han compartido, incluyendo información importante sobre cómo funcionará su pase de batalla y su enfoque de videojuego como servicio, os recordamos que se pondrá a la venta el próximo 26 de mayo para PlayStation 5, Xbox Series X/S y ordenadores a través de Steam y Epic Games Store.
Un vistazo profundo a la jugabilidad del escuadrón
En términos generales, Suicide Squad se puede describir como un frenético shooter en tercera persona que cuenta con la posibilidad de jugar en solitario -con los villanos controlados por la inteligencia artificial- y en cooperativo con hasta cuatro jugadores cuya historia transcurre en un mundo abierto repleto de misiones con variados recados y que tiene pequeñas pinceladas de RPG. El gameplay de seis minutos mostrado ayer se centra, sobre todo, en sacar a relucir las habilidades especiales de cada uno de los cuatro personajes jugables, que permiten acercamientos muy diferentes a la hora de encarar los combates.
Como Harley Quinn, los jugadores pueden lanzarse desde las azoteas de los edificios y balancearse con mucho estilo y velocidad mediante un gancho que permite saltar de una plataforma a otra. Este artilugio no solo sirve para alcanzar nuevas zonas en los niveles, sino también para engancharnos a los enemigos e impulsarnos para arremeter contra ellos con una potente patada que los envía al otro barrio. Para defenderse de sus contrincantes, la conocida princesa payasa del crimen puede disparar con una pequeña pistola o asestar golpes mortales con su fiel bate, mientras que es capaz de esquivar las balas enemigas haciendo piruetas, volteretas y otro tipo de movimientos aprovechando sus dotes atléticas.
Por otro lado, Capitán Boomerang es capaz desplazarse a grandes velocidades e incluso correr por las paredes rodeando de un aura púrpura de manera muy parecida a cómo lo hacía Delsin Rowe en inFamous: Second Son. Este supervillano también puede usar un guantelete para mantenerse suspendido en el aire y teletransportarse a una velocidad de vértigo para sorprender a sus enemigos y acribillarlos en un abrir y cerrar de ojos alternando entre diferentes armas como escopetas o subfusiles. Boomerang también puede deslizarse por el suelo, así como usar una técnica especial que le permite saltar de un enemigo a otro siempre y cuando se encuentre dentro de un área de su mismo color.
Salta a la vista que Rey Tiburón es el "tanque" del grupo al poseer las armas más destructivas y una fuerza bruta con la que asesta golpes devastadores a todo aquel que se interpone en su camino. El tiburón antropomórfico carga una ametralladora multicañón para hacer volar por los aires tanques y hordas enteras de adversarios, aunque no tiene ningún reparo en usar sus puños si es preciso ni en pegar grandes botes cargados de furia con los que se hace una bola para impactar fuertemente contra el suelo. Finalmente, Deadshot es el personaje que más artilugios usa en combate, entre los que destaca un jetpack con el que puede propulsarse contra helicópteros, además de volar y mantenerse a flote en el aire para aprovechar las distancias y su posición ventajosa con el objetivo de despachar a sus contrincantes con un rifle de francotirador, aunque también cuenta con una ametralladora y granadas de mano.
Cooperar y combinar las capacidades únicas de movimiento, así como las habilidades de cada villano en el arte del combate a distancia y cuerpo a cuerpo, es vital para cumplir las misiones con éxito y salvar la ciudad de Metrópolis de Brainiac. Suicide Squad tiene un gran énfasis en los tiroteos endiabladamente rápidos y en los que apenas pisamos el suelo, ofreciendo la posibilidad de impulsarnos en el aire y de dar varios saltos seguidos para mantener el vuelo durante más tiempo. Si a esto le sumamos el tono gamberro que nos transmite por las interacciones entre los personajes, el lenguaje soez y la estética repleta de colores chillones, nos damos cuenta de que estamos ante una propuesta radicalmente opuesta a la que ofrecía Batman Arkham.
Transcurre en el mismo universo que Batman Arkham
Suicide Squad: Kill the Justice League ha sido definido por sus responsables como una "extensión del Arkhamverso que cuenta la historia desde el punto de vista del villano", por lo que su trama se desarrolla en el mismo mundo que los juegos de Batman Arkham. Concretamente, el título tiene lugar cinco años después del final de Batman: Arkham Knight y el principal atractivo que ofrece es que, como ya hemos comentado, experimentar este universo desde la perspectiva de la contraparte de los superhéroes.
Casi todos los superhéroes de La Liga de la Justicia, entre los que se incluyen Superman, Flash, Batman y Linterna Verde, han sido capturados y sometidos bajo el control mental de Brainiac para que acaten sus órdenes sin rechistar y le ayuden a convertir la Tierra en un nuevo planeta Colu. Ante esta peliaguda situación límite para el planeta Tierra, Amanda Waller cree que la única manera de resolver el embolado es recurrir a algunos de los mayores villanos, quienes cree que son la única esperanza para hacer frente al invasor alienígena y así salvar Metrópolis. La premisa apunta maneras y tienen una oportunidad de oro para ofrecer un producto que haga las delicias de los amantes de DC.
Aquellos que quieran conocer algo más de contexto sobre la historia y los personajes antes de adentrarse de lleno en Suicide Squad están de enhorabuena, ya que se ha confirmado que se lanzará al mercado un cómic precuela bautizado como Suicide Squad: Kill Arkham Asylum que ahonda en cómo se formó esta Task Force X. Se trata de una serie mensual limitada de cinco números que se pondrá a la venta el 30 de mayo y estará disponible en las principales tiendas de cómics y plataformas digitales. Rocksteady ha confirmado que, como incentivo de compra, cada número impreso incluirá un código canjeable en el videojuego.
Sobre la ciudad de Metrópolis y la personalización
Al ser un mundo abierto, Suicide Squad permite a los jugadores campar a sus anchas en una versión de Metrópolis que ha sido recreada con una enorme atención al detalle y fidelidad, por lo que podemos esperar multitud de localizaciones icónicas que será posible recorrer tanto a pie como montados en vehículos de lo más locos. La ciudad alberga múltiples puntos de interés en los que el Escuadrón Suicida podrá completar misiones y conocer a "un montón de personajes y villanos distintos". Se ha hecho especial hincapié en los contrastes estéticos y arquitectónicos que existen entre Gotham y Metrópolis, recalcando que esta última es mucho más "majestuosa, limpia y funcional".
La personalización de cada uno de los villanos con nuevos elementos cosméticos, armas y habilidades es uno de los puntos más importantes del videojuego. El Pingüino actúa como un comerciante y fabricante al que podemos acudir para mejorar y comprar armas, que se dividen en seis categorías (fusiles de asalto, subfusiles, rifles de francotirador, escopetas, ametralladoras y pistolas), aunque también hay otras singulares como las de LexCorp, AmerTek o DPGC, mientras que Hack ayuda al escuadrón a mejorar sus nanobombas y el Juguetero a potenciar sus equipos. Dotar a nuestros personajes de equipamiento más poderoso permite aumentar su nivel de poder para que estos sean más eficaces en las luchas y puedan enfrentarse a misiones más complicadas.
Los conjuntos de equipo son unos atuendos temáticos de diferentes villanos que permiten a los cuatro personajes jugables adoptar temporalmente la "esencia de un villano". Asimismo, insisten en que tendremos libertad total a la hora de vestir al equipo como queramos ya que la vestimenta no afectará a las estadísticas.
Un juego como servicio con conexión permanente
Justo después de la presentación del nuevo gameplay, parte del equipo de Rocksteady hizo acto de presencia en un documental entre bastidores llamado Fuera del Asilo Arkham para confirmar lo que muchos se temían: Suicide Squad es un videojuego como servicio, por lo que el modo campaña principal solo será el comienzo de una historia que promete ampliarse con posteriores actualizaciones gratuitas que añadirán misiones, armas y personajes jugables. ¿Es esta una decisión correcta? Desde luego, la idea no ha acabado de entusiasmar a los fans de DC ya que estamos hablando de un modelo de negocio bastante controvertido por cómo se ha gestionado en otros títulos como Marvel's Avengers, aunque está por ver de qué manera se aplicará en este caso.
Por lo pronto, una imposición que no ha agradado demasiado a juzgar por los comentarios que podemos leer en redes sociales es la obligatoriedad de estar conectados a internet incluso si jugamos solos, aunque es importante destacar algunos matices. Para jugar a Suicide Squad en solitario en PS5 y Xbox Series X/S no será necesario ser miembro de PlayStation Plus o Xbox Live Gold, aunque lógicamente estos servicios sí que se tendrán que pagar para disfrutar del modo cooperativo en línea. La buena noticia es que habrá juego cruzado entre plataformas, aunque como sospechábamos no incluirá un modo cooperativo local.
En lo que se refiere al pase de batalla, Rocksteady asegura que este servirá para obtener nuevos cosméticos, trajes, emotes y una diversidad de objetos para personalizar a los personajes jugables que no tendrán un efecto palpable a nivel jugable. El pase tendrá niveles gratuitos para todos los jugadores, además de niveles premium para aquellos que quieran comprar ciertos elementos más exclusivos dentro del juego de manera totalmente opcional. Por cierto, el juego no incluirá las polémicas cajas de botín o lootboxes.
¿Estará a la altura de lo que se espera del estudio?
El listón de Rocksteady no puede estar más alto tras el encomiable trabajo realizado en la trilogía de Batman Arkham. Por desgracia, Suicide Squad: Kill the Justice League ha generado casi de manera unánime un sentimiento de indiferencia por su jugabilidad aparentemente genérica, repetitiva y, en pocas palabras, poco imaginativa y con nada que no hayamos visto ya en multitud de títulos parecidos. Creemos que su mayor acierto reside en marcar distancias con la serie protagonizada por el murciélago protector de Gotham para dar paso a una historia con un aura más desvergonzada y un tono mucho más desenfadado. La dinámica del grupo de villanos, que promete ofrecer situaciones desternillantes, así como los distintivos estilos de juego que ofrecen, son otras de sus mejores bazas. Es por estos aspectos, además de la trayectoria de la desarrolladora y su buen hacer en el pasado, que queremos depositar un voto de confianza al proyecto a pesar de que no podemos evitar mantenernos escépticos.
