El género de los rpgs japoneses no ha tenido una gran presencia esta generación, pues aunque ha habido propuestas interesantes, su número no ha sido tan elevado como en la anterior generación. Por eso cuando se anuncia un nuevo juego del género, los aficionados tienen motivos para estar de enhorabuena. Uno de los próximos títulos que van a aparecer es este que nos ocupa Resonance of Fate, desarrollado por los chicos de Tri-Ace y que nos trae espectacularidad y estrategia a partes iguales.
La historia nos mete de lleno en un futuro lejano en el que la Tierra ha sido asolada por la contaminación, hasta el punto en el que la humanidad no puede sobreviivr por si sola en el planeta. Para salir adelante, los hombres han creado unas máquinas purificadoras que se encargan de mantener limpio el aire y el agua, por lo que toda la vida se reúne en torno a ellos. Pero como el terreno que limpia no es demasiado amplio, las ciudades se construyen en forma de torres en las que los niveles superiores (más limpios) pertenecen a las clases altas y las inferiores a las bajas.
En este mundo viven nuestros tres protagonistas, situados en el nivel medio de una de estas ciudades. Todo parece ir bien hasta que un buen día descubren que hay un secreto detrás de las máquinas purificadoras, ya que parecen controlar de alguna forma el futuro de sus habitantes. Pero descubrir la verdad no será tan fácil, y pronto descubrirán que hay mucho más detrás.
Tres mejor que uno
A la hora de jugar podremos llevar a cualquiera de los tres personajes, dos chicos y una chica, entre los que podremos cambiar en cualquier momento para que se vean en la pantalla mientras lo movemos. En la partida que jugamos, comenzábamos en la base de los personajes, donde podremos consultar el bestiario o cambiarnos de ropa (hablaremos de este punto más adelante). En los primeros minutos recorrimos la ciudad y vimos tiendas (en las que además de comprar objetos podremos crear otros nuevos a partir de materiales o descomponer otros para conseguir materiales), boutiques para adquirir ropa y accesorios o un lugar donde consultar los trabajillos ofertados por los habitantes de la urbe. Esto último alargará mucho el juego, ya que estas misiones secundarias serán bastante numerosas. Para acceder a ellos deberemos consultar el tablón de anuncios, en el que además de darnos cierta información del trabajo, nos indicarán quien nos la dará, debiéndole buscarle para comenzarla.
A la hora de cumplir estas misiones o para avanzar en la historia, deberemos enfrentarnos al mapa del mundo, que será bastante diferente a lo visto en otros juegos del género. El mapa que veamos nos mostrará el nivel de la torre en la que nos encontramos (aunque podemos alejar la cámara y echar una vista más general de la torre) que se dividirá en una serie de casillas en forma hexagonal que ocultarán el escenario. Para abrirlas y descubrir que hay debajo, deberemos usar una serie de casillas con distintas formas (y colores) que se irán agotando según las usemos. La idea es elegir la forma que mejor se adapte al pedazo de mapa que queremos descubrir y usarlo. Al descubrir una nueva área podremos encontrar tesoros de forma automática o nuevas localizaciones. Una vez abierto el mapa todo lo que queramos (podremos usar tantas piezas como queramos mientras no se nos acaben), moveremos un puntero por todo el mapa hasta que demos con la casilla a la que queramos ir. Mientras recorremos la pantalla con el puntero pueden aparecer monstruos, por lo que entraremos un combate aleatorio. Al principio esta forma de movernos por el mapa resulta un poco chocante y confusa, aunque pronto le cogeremos el truco. Sin embargo está por ver si resultan tan divertidos como el de otros juegos.
A la hora de los combates, como decimos, en el mapa serán de forma aleatoria (no así en las mazmorras) y una vez dentro de ellos, la lucha será bastante estratégica. Los combates serán por turnos, aunque tendremos la opción de movernos libremente por el escenario y atacar a nuestros enemigos. Esto será una forma de luchar, moviéndonos con la palanca analógica mientras que atacamos con el botón A. Pero si esta forma de atacar funciona, la mayoría de las veces acabaremos usando los movimientos del héroe, que gastarán un punto de una barra que se irá llenando según atacamos a los enemigos. Una vez tengamos alguna lágrima disponible, pulsamos X y entonces el tiempo se parará, apareciendo una línea que indicará la trayectoria que va a tomar nuestro personaje. Si volvemos a dar a X, el personaje comenzará a correr sobre la trayectoria marcada, momento en el que podremos pulsar A para disparar (un disparo por cada pulsación mientras tengamos balas) o X para saltar, algo que hará que veamos escenas realmente espectaculares. Y es que este sistema hace que veamos escenas similares a las que nos ofrecen películas como Matrix, sin que por ello se pierda la estrategia
Unas batallas con muchas posibilidades
A la hora de luchar, también tendrán mucha importancia las armas que usemos, y es que según su tipo harán daño normal o superficial. Del primero no hace falta explicar nada, pero el segundo es bastante particular. Cuando usemos un arma de este tipo, por ejemplo una ametralladora, causaremos un daño temporal que se representará por una barra de color azul. Si en ese momento disparamos con otra arma que haga daño normal, quitaremos de golpe toda la barra azul, pero si tardamos mucho, el enemigo irá recuperando poco a poco la vida. Otros aspectos a tener en cuenta serán paredes o partes del escenario tras los que nos podremos cubrir (aunque si reciben mucho daño se destruirán) o ataques aéreos que hacen más daño del normal. Y es que aunque esto es la base del combate, hay muchos más elementos que afectan, como la posición y la distancia a la que estemos respecto al enemigo o la situación de nuestros compañeros, pues podremos hacer ataques conjuntos realmente poderosos y vistosos. Sin duda el juego promete ofrecernos unos combates muy interesantes que parecen que tendrán bastante profundidad según avancemos en el juego.
Si en el mapa los encuentros son aleatorios, cuando entremos en una mazmorra podremos ver a los enemigos y así poder esquivarlos. La mecánica de estas mazmorras será la misma que en los combates, sólo que en lugar de encontrarnos en un área cerrada, nos encontraremos con varias zonas unidas entre sí entre las que podremos avanzar. No vimos demasiado las mazmorras, por lo que no pudimos apreciar si este sistema será todo lo interesante que nos gustaría o acabarán resultando monótonas.
Pero si su mapa o su sistema de batalla son bastante originales respecto a otros juegos del género, hay otro elemento que lo diferencia respecto a la mayoría de los juegos de rol japoneses (no así de los occidentales) y es el hecho de poder cambiar la ropa, accesorios y aspecto de los protagonistas. A lo largo del juego iremos consiguiendo nuevos artículos con los que vestir a nuestros personajes, pudiendo almacenar las combinaciones que más nos gusten. No sólo podremos cambiar la ropa, sino también su pelo o sus ojos, por lo que podremos tener a nuestro personaje ideal.
Estética con personalidad
En el apartado gráfico nos encontramos con una estética steampunk muy interesante y vistosa que le queda realmente bien al juego. Los escenarios son bonitos, aunque sólo pudimos ver el comienzo del juego, por lo que tampoco había gran variedad. Los personajes se veían muy bien, especialmente los protagonistas, aunque sus expresiones faciales no estaban tan logradas como nos hubiera gustado. El resto del apartado se veía bien, aunque en ciertos momentos, especialmente en la ciudad, los gráficos se veían algo borrosos, lo que desmerecía algo el resultado general, aunque sin llegar a ser un problema grave.
Lo que hemos probado de este Resonance of Fate nos ha gustado bastante. Con una historia bastante interesante y una estética muy atractiva, el juego trae además unos combates bastante originales que prometen ser bastante estratégicos e ir ganando complejidad con el tiempo. Es cierto que cuando salga se las verá cara con cara con uno de los grandes lanzamientos del año, Final Fantasy XIII, pero eso no es motivo para que nos olvidemos de este interesantísimo juego, que además llegará traducido al castellano.