Relic Entertainment saltó a la fama en el año 1999 con el lanzamiento de Homeworld para PC, un juego de estrategia en tiempo real ambientado en el espacio y que de inmediato se convirtió en uno de los clásicos del género. Tras éste llegó su secuela, que mantenía las bases jugables del original ofreciendo al jugador la posibilidad de seguir disfrutando de increíbles batallas espaciales, y pronto otro éxito: Warhammer 40.000: Dawn of War con su correspondiente expansión. En todos estos títulos destacaba el gran trabajo artístico realizado por los desarrolladores, con una ambientación magnífica, un motor gráfico impresionante, y un sistema de juego fácil de conocer, pero difícil de dominar.
Ahora, dejando a un lado la ciencia ficción, este exitoso estudio se ha propuesto revolucionar el género de la estrategia en tiempo real creando un título ambientado en el conflicto bélico más retratado, la Segunda Guerra Mundial, trabajando sobre todo en el comportamiento de nuestros aliados y enemigos para que le experiencia de juego sea lo más real y espectacular posible.
Veamos en qué consistirá Company of Heroes.
De este modo, si queremos entrenar a soldados de infantería primero necesitaremos munición y mano de obra, lo que nos obligará a explorar el escenario en busca de los puestos que ofrecerán estos recursos; pero además, también se encontrará el combustible como uno de los suministros más importantes, ya que los vehículos necesitarán tanto mano de obra, como munición y fuel. Por último, en Company of Heroes también nos encontremos con un árbol de habilidades que se encontrará dividido en tres vías. Dependiendo de las habilidades que mejoremos, iremos adquiriendo mejoras para la artillería, por ejemplo, o nuevas unidades como tropas paracaidistas, aviones de reconocimiento, etc.
Otro punto interesante en esta producción de THQ lo encontraremos en la importancia que se le dará al componente táctico en las batallas. Como ya ocurriera en Warhammer 40.000, cada una de nuestras unidades contará con una serie de ventajas y desventajas que tendremos que conocer a la perfección para realizar ataques efectivos sobre las posiciones enemigas. De este modo, lógicamente, un grupo de soldados de infantería no podrán lanzarse a combatir alegremente contra los enemigos si estos van equipados con lanzallamas, puesto que no tardarían ni unos segundos en caer calcinados por las llamas. Y lo mismo ocurrirá en los combates contra los blindados: de nada servirá que tengamos un gran número de soldados de infantería si delante se encuentra un Panzer alemán repleto de munición.
Será por tanto necesario combinar sabiamente los distintos tipos de unidades con las que contaremos para vencer al enemigo, teniendo en cuenta además el entorno, que jugará un papel fundamental en el desarrollo de las batallas. Y es que, de nuevo siguiendo con las similitudes de su anterior trabajo, en Company of Heroes no será lo mismo combatir a ras de suelo, que hacerlo en un cráter originado por una explosión, dentro de un edificio, o detrás de una barricada. Nuestras unidades, que irán desde los ingenieros (construyen edificios y plantan minas) a soldados rasos e infantería pesada, pasando por los vehículos y la artillería, podrán utilizar prácticamente cualquier rincón del escenario para guarecerse de los disparos enemigos. Sin embargo, no siempre será recomendable esconderse en el interior de un edificio.
En Company of Heroes, a diferencia de lo visto hasta el momento en el género, nos encontraremos con unos entornos que sufrirán las inclemencias de la guerra: si cae una bomba sobre el suelo veremos como surge un gran cráter que no desaparecerá, sino que se convertirá en una especie de trinchera para todo aquel que se meta en su interior. Del mismo modo, si nuestros tanques o la aviación lanzan las bombas sobre un edificio, éste se irá derrumbando poco a poco, viendo como los bombazos abren boquetes en las paredes desde los cuales, si todavía hay gente en su interior, los soldados dispararán. También, si reventamos un tanque, los restos de su coraza quedarán esparcidos por el campo de batalla, y los más grandes podrán ser usados como parapeto para la infantería.
En definitiva, la gran mayoría de elementos del entorno podrán ser modificados por el jugador, no resultando ser un mero añadido estético, sino que como decimos, variará nuestro comportamiento en el campo de batalla. Así pues, si vemos que unos enemigos se han atrincherado en un edificio y no disponemos de tanques, podemos lanzar a nuestros soldados equipados con lanzallamas para que incendien el edificio e incineren a sus habitantes sin que éstos tengan la menor posibilidad de escapar, lanzar granadas, o enviar a un ingeniero para que plante explosivos con los que demoler el edificio. También, si lo preferimos, podemos ordenar un bombardeo aéreo, o reventar un puente a bombazos con nuestros morteros. Todas estas acciones al final repercutirán en nuestra propia partida, por lo que los desarrolladores aseguran que nunca nos encontraremos con dos batallas iguales en el mismo escenario bélico: si en una usábamos los edificios como escudos, y en la siguiente son reventados nada más comenzar, esa táctica ya no serviría, por ejemplo.
La inteligencia artificial será otra de las virtudes ee esta creación de Relic, según afirman los desarrolladores. Y es que, a diferencia de lo visto en la mayoría de títulos de estrategia, en Company of Heroes nuestras unidades y los enemigos actuarán de una manera tremendamente realista, no buscando convertirse en héroes, sino que se centrarán únicamente en sobrevivir. De este modo, nosotros, mientras edificamos nuestra base de operaciones y descuidamos un poco a nuestras tropas, podemos observar como las mismas se encargan de buscar cobertura, de evitar ponerse en la línea de fuego de los rivales, mientras intentan eliminar a todos los enemigos que se crucen en su camino, siempre, eso sí, evitando salir detrás de ellos porque no sería nada realista. Por lo tanto, el que el juego esté dotado de una inteligencia artificial fantástica no significará que nuestros soldados vayan a resolvernos los problemas. Nosotros seguiremos siendo el general que los comandará en el campo de batalla, mientras las tropas se encargan de sobrevivir a una guerra de la mejor forma posible.
Por último cabe destacar que Company of Heroes contará con el ya clásico modo multijugador que permitirá que hasta ocho jugadores se enfrenten a muerte a través de Internet. Este hecho, unido a la ya impresionante propuesta jugable que nos propone Relic Entertainment, convierte a Company of Heroes en uno de los títulos de estrategia más interesantes de lo que queda de año. Está por ver si el componente táctico es un elemento importante dentro del propio desarrollo de la acción, y si las batallas serán tan rejugables y distintas según afirman los desarrolladores. Pero por antecedentes, podemos estar seguros de que Company of Heroes no decepcionará a nadie.