Análisis My Hero One's Justice 2, lucha entre superhéroes (PS4, Xbox One, Switch, PC)

Son muchos los juegos basados en mangas y anime que siguen intentando conseguir el éxito de críticas y ventas de los Naruto creados por Cyberconnect2 con su misma fórmula, la lucha 3D que prima espectacularidad sobre la técnica. A decir verdad ninguno de los clones se ha acercado a los Naruto Shippuden –Dragon Ball busca sus propios estilos, incluso la lucha 2D o el rol, y One Piece se enfoca más a las aventuras o acción masiva-, ni siquiera con plantillas de ensueño como la que proponía JUMP Force; hace escasas semanas analizamos One Punch Man: A Hero Nobody Knows, que corrió la misma suerte: interesante para fans pero no tanto para el jugador más general.

Sin embargo, pese a que la licencia de My Hero Academia está muy lejos de compararse a los citados nombres, ha logrado recibir en algo menos de dos años una secuela con My Hero One's Justice 2. Pocas novedades que contar en el juego de este año, que vuelve a estar desarrollado por Byking con la tecnología de Unreal Engine. El trasfondo nos habla de un mundo en el que la mayoría de la población tiene dones y son poderosos, superhéroes o supervillanos. El primer My Hero One's Justice tampoco profundizaba mucho en su historia y se disfrutaba más conociendo la obra de Kohei Horikoshi, y con la secuela tenemos tres cuartos de lo mismo: va dirigido a quienes ya son fans de Izuku Midoriya. De lo contrario, encontraremos un modesto juego de acción con los puntos fuertes y débiles de estas producciones que da por sentado que conoces de antemano a los personajes. Los textos están traducidos al español y las voces llegan en japonés.

Superhéroes vs supervillanos

Los desarrolladores no se han calentado mucho la cabeza y My Hero One's Justice 2 se apoya en la base del original: lucha en arenas 3D con bastante libertad de movimiento para marcar distancias con el enemigo cuando interese. Un control sencillo que no requiere muchos botones para encadenar combos, ataques característicos según la habilidad de cada uno, y el uso de personajes de apoyo que dan un poco más de estrategia, ayudan a sorprender al rival o completan un combo. Al igual que en el primero, rápidamente empezarás a dominar la base y machacar botones, algo que funciona sin problemas en las primeras fases de su modo historia –salpicado de diálogos mediante viñetas- pero no tanto para otros modos como el arcade o el online.

La plantilla de 41 personajes –uno de pago- ofrece jugadores de todo tipo: unos rápidos, otros más lentos pero de golpes contundentes, orientados al cuerpo a cuerpo o a algún tipo de proyectil. Las arenas son de tamaño medio, suficiente para jugar al ratón y el gato cuando sea necesario, pero tampoco zonas tan grandes donde sea imposible alcanzar a un rival que huye para perder tiempo. A nosotros nos han gustado más los ágiles, dan mucho juego y es un lujo moverse con rapidez por el aire e incluso convirtiendo las paredes en suelo. Realmente el número de jugadores –con incorporaciones como Minoru Mineta, Overhaul, Twice, Mr Compress, Tamaki Amajiki y más- es el gran punto a destacar del juego, que por lo demás es prácticamente una expansión que pule la jugabilidad un poco.

Una vez más, la chispa de su sistema de combate es el medidor Plus Ultra, que se carga con combos y bloqueando ataques. Hay tres niveles para acumular que activan nuevos ataques devastadores que pueden cambiar el rumbo de un combate que se daba perdido, y la gracia está en decidir si utilizar movimientos Plus Ultra 1 o esperar a un ataque conjunto Plus Ultra 3 que reduce aproximadamente un 70% de la vitalidad del enemigo. My Hero One's Justice 2 es entretenido y tiene mimbres para hacer uso de contraataques o ataques imposibles de detener, pero al ser tan caótico, muchas veces la victoria no la gana el usuario más técnico. ¿Engancha? Sí, pero no va orientado al jugón del género, y tampoco podemos esperar una plantilla excesivamente equilibrada. Pasarás un buen rato si te lo tomas como un pasatiempo donde algunos personajes poseen golpes que casi te garantizan la victoria.

En cuanto a los modos, tenemos la historia que se puede ver desde el punto de vista de los héroes y los villanos, hasta el final del arco Shie Hassaikai; son combates de una ronda así que tampoco es especialmente emocionante. El modo misiones consiste en una serie de combates, y la salud no se recupera con cada encuentro; también podremos reclutar más personajes y obtener más recompensas. El modo arcade es una serie de combates que dependen del personaje elegido y activan algunos diálgos especiales –no le dedicaremos tanto tiempo como a las misiones, pero vale como calentamiento para practicar-. En barra libre escogemos el número de jugadores -ahora se permiten combates 2v2- y reglas, tenemos el juego en red, entrenamiento, personalización del aspecto con más de 1800 objetos, trajes y accesorios, y la galería. Nada fuera de lo normal, pero con el mínimo que se lo podría pedir para uno o varios jugadores.

Espectáculo de anime interactivo

Hay que reconocer que, estando varios escalones por detrás en el músculo gráfico de los Naruto, sí resulta muy espectacular, y sin ir muy lejos bastante más que One Punch Man: A Hero Nobody Knows. Los personajes están bien animados, las secuencias de ataques Plus Ultra impactan y es un juego que tiene mucho en cuenta los destrozos del entorno, lógico por la fuerza de los contendientes. Como sucedía en el primero, no se trata sólo de meras grietas en el suelo: se rompen columnas, decoración y en algunos casos puedes derribar la pared y ampliar un poco la zona de combate.

La única lástima es que el detalle de muchos escenarios es bastante flojo, con texturas de la pasada generación, y esto no resulta tan impactante como podría, pero sí, logra dar la sensación de personajes increíblemente fuertes que destruyen todo a su paso. La cámara también parece que funciona algo mejor en espacios cerrados, aunque todavía tenderá a complicar un poco más la acción cuando se encuentre con paredes –con destrozos y rivales rápidos, a veces es difícil ver a nuestro personaje-.

Conclusiones

My Hero One's Justice 2 se siente como una revisión de su predecesor, el más y algo mejor de lo que hablamos en nuestras impresiones. Por una parte era esperado y no es una mala noticia desde el momento en que la base engancha y es superior a otros juegos licenciados de anime. En cambio, los jugadores del original encontrarán pocas novedades como para lanzarse a la secuela, a no ser que realmente disfrutasen de aquel y quieran una experiencia similar con el doble de personajes. Como juego de acción –más que de lucha- cumple sobradamente, pero no va a convencer a los detractores.

Hemos realizado este análisis en PS4 Pro con un código que nos ha proporcionado Bandai Namco.