Uno de los capítulos más destacados de Los Simpson es aquel en que los productores de Rasca y Pica deciden que hace falta un personaje nuevo, uno fresco, descarado, joven, cool, arrollador... para que se convierta en el favorito del público y centro de atención. La "solución" es Poochie, un perro insoportable que acaba durando un capítulo.
De forma irónica, Poochie ha acabado formando parte de la cultura actual al representar a esos personajes diseñados para ser símbolos de una marca pero que no consiguieron cuajar y acabaron sumergiéndose en las arenas movedizas del olvido. El fenómeno de los juegos de plataformas protagonizados por mascotas que se pretendía fuesen la insignia de una empresa llegó a su auge en los años 90 (aunque se extendió en el tiempo, con varios ejemplos bien entrados los años 2000), y afectaba no sólo a la televisión -y mucho, toda serie que se preciase tenía que tener su personaje atrevido, juvenil y con personalidad arrebatadora-.
En los videojuegos Mario iba asociado a Nintendo, Mega Man a Capcom, Donkey Kong a Rare y Sonic se convertiría en el símbolo de Sega (tras algún que otro traspiés, como veremos). Numerosas empresas se dieron cuenta de la ventaja de tener un símbolo tan representativo. Quien más, quien menos, los estudios se pusieron manos a la obra para encontrar su gallina de los huevos de oro. Algunos lo encontraron, al menos durante un tiempo, como Sony con Crash Bandicoot, personaje que en los últimos tiempos muchos jugadores piden incansablemente que vuelva, algo que podría ocurrir más tarde o más temprano, pero lo que no está olvidado ni mucho menos. El camino quedó regado de mascotas abandonadas en la cuneta, y hoy vamos a recordar algunas de ellas.
Aero the Acro-Bat
Aero the Acro-Bat fue el primer juego de Iguana Entertainment, en 1993. Salió para Super Nintendo y Mega Drive publicado por Sunsoft, quien lo adoptó como mascota. Aero es un murciélago con jersey y antifaz rojo y pantalones verdes que vive y trabaja en un circo. En la pantalla inicial se ponía gafas de sol y hacía un moonwalker.
El enemigo es un payaso que se ha hecho con el circo y al que quiere derrotar el murciélago en un plataformas 2D típico de scroll lateral, en el que avanzas por cada nivel utilizando trampolines, monociclos y cañones circenses mientras esquiva o elimina distintos enemigos. Aero tiene doble salto, rueda y es capaz de realizar pequeños vuelos. Tuvo una secuela un año después para las mismas consolas, Aero the Acro-Bat 2.
Aero vivió en la época de los 16 bits, y fue recuperado en 2002 para GameBoy Advance y en 2010 para la Consola virtual de Wii. Curiosamente contó con un spin-off, Zero the Kamikaze Squirrel, también desarrollado por Iguana Entertainment y protagonizado por una ardilla ninja, que salió para Mega Drive y Super Nintendo en 1994.
Blinx: The Time Sweeper
Blinx, de corazón noventero aunque naciera en los dos mil, es un gato que trabaja en la Fábrica de Tiempo, en la que se crea y distribuye el tiempo que fluye por el universo. Cuando surge algún problema, los encargados de arreglarlo son los barrenderos del tiempo, y esa labor es la que desempeña Blinx. Una banda malvada roba el tiempo en una dimensión y el valiente protagonista desobedece las órdenes de dejar a los habitantes (y a la princesa) abandonados a su suerte, de forma que va eliminado los enemigos de cada zona armado con su Time Sweeper (aspiradora del tiempo), siempre bajo la presión del reloj.
Con su aspiradora, Blinx recoge los cristales del tiempo, la basura e incluso puede trepar por lianas o agarrarse a techos y paredes. Si inviertes su funcionamiento puedes disparar a los enemigos. Una de las mejores características era controlar el tiempo ralentizándolo o retrocediendo en él.
Los dos plataformas de Blinx que desarrolló Artoon salieron para Xbox, Blinx: The Time Sweeper en 2002 y Blinx: Masters of Time and Space en 2004. Publicado por Microsoft Game Studios, fue un claro intento de mascota para la primera Xbox, consola con la que Microsoft debutaba en el mundillo de los videojuegos, en el que parecía que toda compañía debía tener un personaje carismático que la representara. Como de tantos otros, nunca más se supo de este personaje.
Bonk
Es una de las mascotas que más éxito tuvo y más longeva. Era el símbolo no oficial de la consola Turbografx (llamada PC Engine en Japón y TurboGrafx-16 en EE.UU.) de NEC. En ella salieron tres juegos de este troglodita, aunque también llegó a otras plataformas. Según el distribuidor, Hudson Soft, Bonk se creó en principio como un personaje llamado PC Genjin para la revista PC Engine. Ahora los derechos pertenecen a Konami, que compró a Hudson.
El primer juego, en 1989, fue Bonk's Adventure, un plataformas 2D desarrollado por Red Company y Atlus que tuvo también versiones en NES, Amiga y, años después, en GameCube, PlayStation 2 e incluso llegó a la consola virtual de Wii en 2006. En él, Bonk debe rescatar a la princesa Za, que ha sido raptada por el "tiranosauriesco" Rey Drool.
Bonk ataca a dinosaurios y otros enemigos prehistóricos utilizando literalmente su cabezota; de hecho, su nombre describe en inglés la acción de dar un cabezazo. Además, se ayuda de los dientes para trepar muros y come carne para aumentar sus habilidades y hasta ser invulnerable temporalmente. El toque humorístico que tenían sus movimientos es quizá una de las claves de su éxito.
Lo último que supimos de este joven de las cavernas es Bonk: Brink of Extinction, que iba a salir como juego descargable en Wii, Xbox 360 y PS3 y se canceló tras el terremoto que asoló Japón en 2011. En Japón ha habido algún lanzamiento más para móviles.
Bubsy the Bobcat
Su primer juego, el plataformas 2D Bubsy in Claws Encounters of the Furred Kind, tuvo una acogida bastante buena y se llegó a decir que era "el nuevo Sonic". Bubsy el gato montés nació en 1993 y fue el intento de Accolade de conseguir una mascota. El primer juego fue para Super Nintendo y Mega Drive; cuenta como unos alienígenas, los woolies, han robado todas las bolas de lana del mundo, incluida la gran colección que tenía Bubsy, y este intenta recuperarlos. Tiene características de las dos mascotas más conocidas de los videojuegos: va rápido como Sonic, machaca con pisotón a los enemigos como Mario, y además puede planear, pero tiene como característica propia que sufre daño si se cae de gran altura.
El segundo juego, Bubsy 2 salió un año después para las mismas plataformas, pero ya no tuvo la misma acogida, y un nuevo título poco después salió para Jaguar. Después salieron otros juegos para Game Boy y PC (una versión del primer juego).
Pero al igual que muchas estrellas del cine mudo desaparecieron con la llegada del sonoro porque sus voces no eran adecuadas, la llegada de Bubsy a PSX con su primer juego 3D fue su final, un verdadero desastre, recordado por muchos como uno de los peores juegos de la primera PlayStation. Estaba ambientado en el planeta de los Woolies, pero no logró hacer frente a Super Mario 64 y Crash Bandicoot. Accolade quebró y cerró y ahí terminó la historia de Bubsy.
Bug!
Con un principio que recuerda a los de Super Mario, Bug -una estrella de cine- firma una película en la que la araña Queen Cadavra secuestra a sus amigos y su novia y debe rescatarlos. Realtime Associates fue el encargado de programar uno de los primeros juegos de plataforma en 3D (unas 3D bastante primitivas) para Saturn, allá por 1995. Bean Software se encargó de llevarlo un año más tarde a Windows 3.x y Windows 95.
Bug acaba con los enemigos saltando sobre ellos y clavándoles el aguijón, y tiene la capacidad de andar sobre superficies verticales e incluso boca abajo. Hay dos power ups, uno que da a Bug un ataque eléctrico y otro que le permite atacar a distancia escupiendo veneno.
Su jugabilidad 3D (aunque el jugador se mueve siempre por pasillos y únicamente hay sensación de profundidad cuando se acerca o se aleja de la cámara, con lo que es casi un 2.5 D) tuvo bastante que ver con su popularidad, y tuvo incluso una secuela, Bug Too!, que salió en 1996 desarrollada por Realtie Associates, repleta de parodias de películas. En ella puedes jugar como Bug o como sus compañeros Super Fly y Maggot Dog.
Chameleon Twist
Hace poco hemos tratado en la sección Retro el caso Chameleon Twist, un plataformas 3D creado en 1997 por Japan System Suply y publicado por SunSoft.
Aunque el aspecto del juego es infantil, el control es especialmente difícil. Davy es un camaleón que ve un conejo blanco que va con prisa; lo persigue y se adentra en la vasija donde ha desaparecido el conejo. Allí se convierte en un animal antropomorfo que puede atrapar a los enemigos con su larga lengua y lanzarlos contra otros rivales o crear plataformas.
Es un juego diferente, que supone un reto y original. Su éxito llevó a desarrollar una continuación, Chameleon Twist 2, en la que la lengua se utiliza para llegar a plataformas a diferentes niveles y que tiene un control más preciso.
Chuck Rock
Este plataformas 2D protagonizado por un troglodita pasó hace años por nuestra sección Retro. Chuck está viendo la tele con una cerveza cuando es secuestrada su novia, así que cubre su desnudez con unos setos y corre a salvarla luchando contra todo tipo de criaturas de la edad de piedra. Con un estilo colorido, el juego derrocha humor, desde las delirantes portadas y el vocabulario de Chuck ("Unga Bunga" es lo más expresivo que dice), hasta sus ataques a base de barrigazos y patadas. También puede recoger piedras de todos los tamaños para protegerse de ataques aéreos o saltar a plataformas más altas.
Desarrollado por Core Design (los creadores de Tomb Raider) y distribuido por Virgin Interactive, Chuck Rock salió para Atari ST y Amiga en 1991, pero sus buenas ventas facilitaron que se portase a Commodore 44, Mega Drive, Mega CD, Master System, Game Gear, Super Nintendo y Game Boy. Tuvo hasta una secuela, Chuck Rock II: Son of Chuck, en el que el retoño del troglodita protagonista del primer juego debe buscar a su padre armado con un garrote. No tuvo el mismo éxito que el título original. Algo similar sucedió con el spin off BC Racers, un juego de carreras.
Conker
Este es quizás uno de los casos más curiosos de este reportaje, ya que Conker, una simpática y cándida ardilla armada con un tirachinas, nació como una mascota más, con el objetivo de ser un juego para todos los públicos. Primero llegó en 1999 a Game Boy Color con Conker's Pocket Tales, y luego estaba destinado a llegar a Nintendo 64 con Conker’s Quest, una historia que podéis conocer más en detalle en nuestro Lo que pudo ser que dedicamos a este juego.
En un sorprendente giro de los acontecimientos, Rare decidió convertir a esta mascota en un ardilla alcohólica y malhablada, con un juego solo para adultos, y así nació el genial Conker´s Bad Fur Day para Nintendo 64 en 2001, que volvimos a ver en una versión mejorada con Conker: Live and Reloaded en 2005 para Xbox. Son juegos que se desmarcan del carácter infantil de la mayoría de los plataformas con mascota y fue a por un público más adulto, con violencia visual, sexo, tacos y humor que incluye la parodia de algunas películas de la época y llega a ser escatológico.
Las críticas fueron muy buenas, pero no así las ventas, entre otras razones, porque Nintendo 64 estaba ya llegando al final de su ciclo, y porque el juego tuvo graves problemas de distribución, sin ir más lejos no llegó de manera oficial a nuestro país, España.
Es quizá la única mascota que podamos quitar en breve de este artículo, porque en su versión macarra no está olvidada, ya que está a punto de ser rescatada con Rare Replay, la recopilación de juegos de Rare, que incluirá la versión de Nintendo 64. De hecho, Microsoft parece dispuesta a recuperar a la ardilla y ya hace unos meses incluyó en Project Spark el Conker Creation pack dentro de los episodios Conker´s Big Reunion con contenidos del personaje, y Phil Spencer, jefe de Xbox, afirmó en marzo que no se descarta que Conker pueda volver con juego propio.
Cool Spot
El advergaming no es un invento de nuestros días, ya en 1993 David Perry (Aladdin, Earthworm Jim, MDK) se encargó de demostrarlo con Cool Spot, un juego patrocinado por 7 Up, que desarrolló Virgin Games y salió en Super Nintendo, Mega Drive, Master System, Game Gear, Amiga, Game Boy y DOS.
El protagonista era el punto rojo que aparece en la marca de bebida. Cool Spot puede saltar y atacar burbujas de soda en cualquier dirección mientras avanza contra el reloj.
No fue el único juego protagonizado por Cool Spot, como bien se pudo ver en nuestra sección Retro, que dedicamos en Vandal a Cool Spot; antes había salido un juego tipo Reversi y en el soso plataformas Spot: The Cool Adventure.
Tuvo incluso una secuela, Spot Goes to Hollywood, ambientada en distintas películas y con un espíritu 3D aunque una perspectiva isométrica incómoda en un plataformas, que salió para Mega Drive, Saturn y PSX entre 1995 y 1997. Podemos destacar de esta saga, entre otras cosas, las pegadizas composiciones de Tommy Tallarico, más conocido actualmente por sus conciertos de videojuegos Video Games Live.
Croc
Los británicos Argonaut Software firman las aventuras de Croc, un cocodrilo antropomorfo vegetariano. En 1997 salió el primer juego, Croc: The Legend of Gobbos (para PSX, Saturn, Windows y Game Boy Color), y Croc 2 los hizo dos años después, primero para PSX y después para PC, ya con la obra maestra Super Mario 64 en la calle, un juego que cambió el género de los plataformas 3D para siempre, y que influenció claramente a esta secuela. En móviles han salido tres juegos: Croc Mobile: Jungle Rumble, Croc Mobile: Volcanic Panic! y Croc Mobile Pinball.
Croc es un cocodrilo encontrado de recién nacido por los gobbos, unos seres peludos que lo criaron. Cuando la vida de estas pequeñas criaturas se ve en peligro por la invasión del Barón Dante, Croc recorre el mundo para irlos rescatando. En su aventura puede romper objetos con un pisotón, bucear y golpear con la cola.
Muchos tenemos un un grato recuerdo de este personaje, que es un claro ejemplo de cómo los plataformas tridimensionales sin pretensiones, que te hacían pasar un gran rato, han desaparecido prácticamente del mundo de los videojuegos.
Fido Dido
Cool Spot no es la única incursión de 7 Up en los videojuegos. Casi más famoso que el punto rojo fue Fido Dido, un personaje que la empresa de bebidas utilizó para promocionarse durante toda la década de los 90. Estaba en todo tipo de mercadotecnia, y los videojuegos no fueron una excepción.
En 1993 los japoneses Kaneko crearon un juego para Mega Drive y Super Nintendo que cayó rápido en el olvido porque no tenía nada que lo hiciera merecedor de ser recordado. En 2004 el personaje hizo una tímida reaparición, pero ya no se acercó a los videojuegos. En 2011 la marca de bebida dijo adiós definitivamente a Fido Dido, un personaje que ejemplifica como pocos la entrañable estética noventera.
Gex
Un gecko protagoniza esta serie de plataformas 2D de Crystal Dynamics para Midway que nace con Gex en 1994 para PC, PSX, N64 y Game Boy Color. Gex vive en Hawái sin mayores preocupaciones; su padre trabaja en la NASA y él organiza fiestas y toca el ukelele. Pero un día su padre muere en una misión espacial y Gex se refugia ante el televisor. Su familia, preocupada, le prohíbe sentarse ante la pequeña pantalla, y él se va para vivir sol dedicándose a ver la caja tonta de la que un día surge el malvado Rez y secuestra al Gecko como parte de su plan para dominar el mundo. Gex deberá escapar y neutralizar a Rez.
Este telón de fondo posibilita que los escenarios sean más imaginativos, con mundos basados en Indiana Jones o películas de terror; cada uno de ellos tiene sus propias mecánicas y aspecto, todo rociado con humor. Para superar cada nivel hay que encontrar un mando a distancia.
Gex 3D: Enter the Gecko fue la secuela, que pasa a estar en 3D y repite enemigo principal y los mundos que representan canales de televisión. Gex realiza un ataque de látigo de la cola, sobra la que puede saltar, da patada de Kárate y utiliza la lengua. También puede trepar por ciertas superficies y bucear. Este segundo juego salió en N64,PSX y Game Boy Color. Finalmente llegó Gex 3: Deep Cover Gecko, para las mismas plataformas, y esta vez acompañado de una protagonista de carne y hueso, la chicha PlayBoy Marliece Andrada, un movimiento de marketing que no le sirvió para convertirse en un éxito, a pesar de ser un buen juego.
James Pond
Millennium y el distribuidor Electronic Arts pusieron de nombre completo James Pond: Underwater Agent a esta apuesta por convertir a un pez en mascota en Amiga y Mega Drive. El protagonista es un pez espía contratado por el servicio secreto británico que lucha contra el Dr. Quizá (Dr. Maybe), quien intenta llenar el mar de residuos tóxicos.
Pond se mueve por toda la pantalla a su antojo y hasta puede saltar fuera del agua. Ataca lanzando burbujas de agua, y es una simpática y blanca parodia del famoso agente británico 007.
Tuvo dos secuelas: James Pond 2: Codename Robocod (en el que el pez debe recuperar los juguetes robados a Santa Claus para los niños del mundo ayudado de un traje robótico que le da superfuerza y agilidad) y James Pond 3: Operation Starfish. En 2013 hubo un intento de recuperar al espía submarino con financiación en Kickstarter, pero el proyecto fracasó al no conseguir su objetivo de financiación.
Mr. Nutz
El protagonista de Mr. Nutz es una ardilla de un rojo anaranjado que lleva deportivas, guantes y gorra. Empezó a saltar en 2D en 1993, primero para Super Nintendo y después en Megadrive y Game Boy. En Amiga tuvo otro juego: Mr. Nutz: Hoppin' Mad. Además de saltar y nadar, Mr. Nutz dispara al enemigo avellanas, lo golpea con su frondosa cola o salta sobre él. Su objetivo es luchar contra las ansias del yeti de congelar el colorido mundo en el que vive. Mr. Nutz recorrerá medio mundo, desde las tuberías de una casa hasta un peligroso volcán, para derrotar al hombre de las nieves.
El desarrollo y la distribución corrieron a cargo de Ocean; fue uno de los primeros plataformas para Super Nintendo y con buena nota; especialmente se alabaron el apartado técnico, el diseño artístico, la música y el control, pero las ventas no llegaron a ser suficientes como para sacar nuevos títulos
Rascal
Combina las aventuras en el tiempo con los plataformas 3D mientras cuenta como el joven Callum "Rascal" Clockwise intenta rescatar a su padre secuestrado, un científico, de las garras de Chronon, quien está utilizando al profesor Clockwise para viajar en el tiempo. Armado con una pistola de burbujas Rascal viaja por seis mundos distintos en los que debe montar relojes de arena para volver a casa.
Rascal fue obra de Psygnosis y Traveller's Tales para PSX en 1998. Su terrible cámara, un control impreciso y un protagonista sin personalidad lo convierten en un excelente ejemplo de Poochie. Como a él, ni la gorra al revés ni las gafas le dieron carisma. Tampoco ayudó el hecho de que saliera después de Super Mario 64 y Crash Bandicoot.
Por suerte este traspiés no impidió a los británicos Traveller's Tales seguir haciendo buenos juegos de plataformas, y actualmente con el nombre de TT Games y bajo el paraguas de Warner Bros. Interactive, nos ofrecen los geniales juegos de LEGO.
Ristar
Fugaz fue el paso de esta mascota por los videojuegos, pero ha quedado reflejado hace un tiempo en nuestra sección Retro, donde os contamos que fue un gran juego. Esta estrella antropomórfica nació en 1995 para ser una nueva mascota de Sega, tras Alex Kidd y Sonic. De hecho, el propio Sonic Team se encargó de cuidar los gráficos y la banda sonora.
Ristar: The Shooting Star está protagonizado por una valiente estrella que se convierte en el único que puede salvar al sistema solar. Su padre, un héroe legendario, ha sido apresado por el pirata espacial Greedy, que quiere apoderarse de todo el sistema solar y obligar a los planetas a obedecerle. El planeta Flora pide ayuda entonces al entusiasta aunque inexperto Ristar para que restablezca la paz en el universo.
El personaje es carismático y tiene una jugabilidad muy especial: lanza los brazos y agarra lo que esté ante él. Puedes lanzar sus brazos en cualquier dirección combinando la cruceta con el botón, cogiendo enemigos y lanzándolos. También puede abrir cofres, y agarrar objetos o a la pared. Activando unas pequeñas palancas puede girar a toda velocidad y usar la fuerza centrífuga para elevarte usando la fuerza de las estrellas, aunque es complicado controlar al personaje en estos momentos.
Ristar salió originalmente para Mega Drive y Game Gear (esta versión contaba incluso con algún nivel propio), y después se ha incluido en diversas compilaciones, la Consola virtual y en Steam. Un claro ejemplo de que ni ser un buen juego te asegura el éxito.
Rocky Rodent
Este extraño roedor similar a un demonio de Tasmania es quizás uno de los juegos más desconocidos de este reportaje, y de los más momentos. Sólo salió una entrega, en 1993, para Super Nintendo, desarrollado por Irem, un juego que en Japón se conoció como Nitropunks: Mightheads y en el resto del mundo Rocky Rodent.
Rocky está en un restaurante y, sin querer, se come el sobre con dinero destinado a la protección de la mafia. La hija del dueño es secuestrada y Rocky decide salvarla con la promesa de comer todo lo que quiera. En los niveles hay cajas que le dan a Rocky distintos peinados con pelucas o tintes que le confieren habilidades.
Más allá del "poochismo", un juego que era una peculiar mezcla entre Sonic y Super Mario Bros. Hay decenas de plataformas como este que ya nadie recuerda, y por eso hemos querido rescatar alguno como ejemplo.
Tak
Aunque con este juego nos salimos bastante de los 90, hemos querido ponerlo como ejemplo de que algunos siguieron intentado crear mascotas mucho más allá de la moda noventera. Programado por Avalanche Software y distribuido por THQ, Tak and the Power of Juju salió en 2004 para PS2, GameCube y GBA. Le siguieron Tak 2: The Staff of Dreams (PS2, GCN, Xbox, GBA) en 2005 y Tak: The Great Juju Challenge (PS2, GCN, Xbox, GBA y NDS) en 2006. Fue uno de los primeros casos en que se preparó a la vez una serie de televisión -de Nickelodeon- y un videojuego, aunque ninguno de los dos tuvieron demasiado éxito ni duraron demasiado.
El protagonista es un joven aprendiz de chamán del pueblo Pupanunu, para el que la magia y los dioses son el pan nuestro de cada día. Tak se ve envuelto en una profecía y debe recuperar las piedras de la luna.
Tak puede atacar, pero lo que le diferencia de otros juegos es que los animales le ayudan de distintas maneras. Por ejemplo, los rinocerontes elimina obstáculos de su camino, los monos lanzan cocos y las ovejas pueden activar un ascensor. En su camino son muy útiles objetos como el sonajero de los espíritus, el bastón o la cerbatana.
Titus the Fox
La desarrolladora y distribuidora francesa Titus Interactive es quizás la empresa que más empeño puso en identificarse con una mascota; tanto que le puso su nombre y la convirtió en parte de su logo. Titus the Fox es un zorro que quiere rescatar a su novia, Suzy, en un plataformas en 2D nada sencillo que se lanzó en 1992. Los enemigos son variados, desde perros y matones a esqueletos o avispas.
El juego había salido un año antes en Francia con el nombre Lagaf': Les Aventures de Moktar – Vol 1: La Zoubida y lo cambió para la versión internacional por Titus the Fox: To Marrakech and Back. Ataca al enemigo lanzándole objetos o atrapando a otros enemigos y lanzándolos como proyectiles. Salió para Amstrad CPC, Amiga, Atari, PC-Dos, Game Boy y Game Boy Color.
Vexx
En los últimos coletazos de las mascotas encontramos al humanoide Vexx, que salió para PS2, Xbox y GameCube en 2003. Acclaim (ahora Throwback Entertainment) realizó una apuesta por la entonces tendencia generalizada de plataformas 3D. En España, estamos además ante el primer doblaje con personajes conocidos por entonces: Fele Martínez, Álex Angulo y Alaska. En Vexx el joven protagonista y su abuelo son explotados por unos invasores y el joven consigue unas garras, los guantes de guerra de Astari, que le permitirán salvar a su pueblo y vengar la muerte de su abuelo.
Además del doble salto y el de longitud, Vexx puede escalar y colgarse de los bordes y con sus garras golpea y puede hasta realizar combos que rellenan una barra de energía que le da habilidades especiales cuando se llena. No cuajó pese a tener un buen diseño de niveles y que los escenarios eran muy grandes.
Zool
Quizás sea la mascota más loca de todas las de este reportaje. Se trata de un gremlin ninja alienígena procedente de otra dimensión creado en 1993 por el estudio Ninja Graphics con la intención de ser la mascota de Amiga. En Zool el protagonista recorre los niveles buscando objetos tan dispares como discos, zanahorias o dulces, en función de la temática de cada mundo (hay incluso un nivel patrocinado por Chupa Chups) o minijuego, de los que hay unos cuantos. Los jefes finales son igual de raros, desde un martillo neumático a una abeja gigantesca que dispara caramelos.
Zool saltaba y era capaz de trepar por algunas plataformas o de crear un clon. Las críticas no fueron malas, pero fracasó en su intención de convencer al público como mascota. Aunque salió para Amiga, después fue portado a casi todas las plataformas de esos años, desde Super Nintendo a Master System.
Tan solo una pequeña muestra
Seguro que nos hemos dejado en el tintero muchas otras mascotas olvidadas de los 90, así que os animamos a que las recordéis en los comentarios, o que nos digáis de cuáles guardáis un gran recuerdo, por los motivos que sean. Muchos de estos juegos nos acompañaron en nuestra infancia y nos hicieron pasar grandes ratos, cuando no éramos tan exigentes, y todo esto de los parches, los DLC, los juegos medio acabados o que unos "simpáticos" hackers puedan tirar la red de una compañía y fastidiarte una tarde de juego, era una utopía.
