Star Wars: Los Últimos Jedi parece que no sólo causó división de opiniones entre los fans. En el propio set de rodaje, Mark Hamill y Rian Johnson "estaban fundamentalmente en desacuerdo", según el propio Hamill, con lo que le sucede a Skywalker en la película. Algo que quedó patente después de que Hamill diera su opinión al respecto en su cuenta de Twitter.
Cuidado con los posibles spoilers
"Me sorprendió la complejidad [de Los Últimos Jedi], porque era muy desafiante el rango de emociones, cada color de la paleta", explicaba Hamill durante una sesión de preguntas y respuestas en los BAFTA. "El mío resultó ser el color más oscuro".
"Eso fue parte del desafío con el personaje de Luke", agregaba Johnson. "Sentí que no podía tenerlo en la isla porque era un cobarde o se estaba rindiendo. Tenía que haber una razón activa para estar allí".
El motivo por el que Luke está en la isla, seguía diciendo el director, es porque cree que los Jedi son "un obstáculo para la galaxia".
"Sabe que sus amigos están sufriendo, y él ha tomado la decisión de hacer algo más doloroso y difícil para él, que es apartarse del conflicto".
A continuación, Hamill continuaba con su punto de vista:
"Siempre y cuando podía expresar mis reservas acerca de Luke lo hacía, porque no puedes evitar sentir, en cierta medida, esa pertenencia como ‘Luko no diría eso’ o ‘Luke no haría esto’, explicaba el actor. "Mi trabajo consistió en eliminar lo que Mark Hamill quería y poner todo mi esfuerzo para adaptarme a la visión de Rian".
Finalmente, concluía que si Rian estaba feliz con el resultado, él sería feliz igualmente.
"Así que si he tenido éxito de alguna manera, es por Rian. Y, si he fallado, también es por Rian", señalaba Hamill, lo que provocó las risas en el panel. "Mira, un Jedi nunca se responsabiliza".
