Coincidiendo con el estreno de la tercera película de Bourne, El Ultimátum de Bourne, Vivendi Universal Games anunció hace unas semanas que estaba trabajando en un juego basado en las aventuras del agente secreto de los libros y las películas, donde lo interpreta Matt Damon. Tuvimos ocasión de acceder a una presentación del juego a puerta cerrada, donde pudimos ver cómo será esta aventura para PlayStation 3 y Xbox 360 que nos lleva a los tiempos de agente secreto de Bourne, antes de la primera película –de que perdiese la memoria-, contando también con misiones y saltos en el tiempo hacia la época de las películas.
El juego ha sido una de las más gratas sorpresas de esta Games Convention. Cuando nos esperábamos una adaptación del cine –o los libros- a consola sin demasiadas características especiales, La Conspiración Bourne resulta un juego de acción muy llamativo que combinará dinámicas de sigilo y exploración, al estilo de Splinter Cell, con acción frenética y cinemática. Aparte de contar con un buen repertorio de movimientos estándar, Bourne tendrá a su disposición un ataque especial cinemática llamado "Takedown", y abundarán las secuencias cinemáticas donde tendremos que pulsar el botón correcto en el momento adecuado.
En la demo mostrada nos enseñaron un nivel en el que Bourne tenía que escapar de unos soldados por un tejado, enfrentándose con varios de ellos, pudiendo así descubrir los rudimentos del combate. Éste tiene sus movimientos estándar, como decíamos antes, pero también una gran cantidad de acciones especiales dependiendo del contexto o de la situación. A la hora de enfrentarnos a un enemigo siempre tendremos un golpe inicial con el que dejarlos desprevenidos, un combo que se muestra de forma cinemática –es una tónica en el juego, y de hecho los desarrolladores nos dijeron que el objetivo era que pareciese una película-, y luego comenzará el combate en sí.
Aquí es donde entra el juego un elemento novedoso que es la existencia de "Takedowns", movimientos cinemáticos donde Bourne podrá acabar con un enemigo aprovechando sus debilidades, generalmente parando primero un golpe y noqueándolo rápidamente después, todo a gran velocidad, tal y como sucede en las películas. Hay un medidor de "energía Takedown", por llamarlo de alguna manera, que nos indica a cuántos enemigos podemos derrotar al mismo tiempo, con un máximo de tres. Una vez activado este modo especial, veremos una secuencia cinemática donde se nos pedirá pulsar un botón concreto en cierto momento para que todo salga bien.
Los resultados de estos Takedowns son espectaculares, pues dependen del tipo de enemigo y del contexto que se encuentre, ofreciendo una gran variedad. En la demostración pudimos ver una docena larga de combinaciones diferentes, algunas de ellas dependiendo del tipo de golpe que hayamos parado, de la posición del enemigo con respecto a nosotros, o de los elementos del escenario que nos rodeen. Si estamos cerca de la pared, quizás lo noqueemos estampándolo contra ella, o si estamos cerca de una barandilla quizás Bourne haga que el enemigo se la "coma". Esto fue descrito por los desarrolladores como "weaponizar" (convertir en arma) el escenario.
Aparte de combate cuerpo a cuerpo, en el juego también habrá tiroteos, contando con un sistema de cobertura bastante estándar que nos permitirá utilizar los objetos del escenario para evitar ser alcanzados por los enemigos, y usar partes explosivas del escenario para acabar con ellos. Aquí, de nuevo, entran en escena los Takedowns, permitiéndonos hacer "shooting takedowns", donde en una secuencia cinemática veremos cómo Bourne acaba con los enemigos con un solo disparo, algunas veces realmente violento, en la cabeza y, de nuevo, aprovechando el escenario. Si un enemigo está cerca de un coche, Bourne logrará impactar en el depósito de gasolina y el enemigo saldrá por los aires.
La demo terminaba con el encuentro contra un durísimo jefe final, al que teníamos que hacer frente con todos nuestros recursos, usando numerosos Takedowns contra él –los resistía bien-, y pudiendo él también contrarrestar nuestros movimientos. A nivel gráfico, el juego lucía bastante bien, aunque todavía queda trabajo por hacer. Mención merece el efecto del agua, cuando llueve, sobre el traje de Bourne; veremos cómo las gotas se deslizan por su superficie. Estará en las tiendas en el año 2008 y, según pudimos ver, Matt Damon no prestará su imagen –o al menos no por el momento-, siendo la cara de Bourne bastante estándar y aparentemente no definitiva.
