El productor Zach Mumbach ha comentado algo del ambicioso juego de Star Wars, nombre clave Project Ragtag, que Electronic Arts canceló hace algún tiempo. Era una aventura desarrollada por Visceral Games (Dead Space) dirigida por Amy Hennig, inspirada en la serie Uncharted -de la que ella fue creadora- en el mundo de George Lucas. El estudio tenía varias secuencias casi terminadas que los fans aún no han visto, y que se podrían filtrar en un futuro, como secuencias con un AT-ST que habría emocionado a los fans.
"Este momento con el AT-ST era realmente bueno", dice Mumbach en MinnMaxShow. "Estabas caminando a pie y el AT-ST -la máquina de combate bípeda- te intentaba dar caza, pero eras más ágil, pasabas por callejones, rodabas y chocabas, usaba toda la destrucción del motor Frostbite... Podrías haber dicho 'oh, esto es como Star Wars Uncharted'".
El problema es que estuvo en desarrollo durante dos años y había presión de EA para tener el juego terminado. Mumbach cree que con Hennig en el equipo, podrían haber hecho el mejor juego de Star Wars jamás creado y posiblemente un competidor para los premios Juego del año.
EA cerró Visceral Games tras la cancelación
Con el cierre de Visceral Games su equipo se dispersó por otros estudios, algunos de EA, otros están en Crystal Dynamics (Marvel's Avengers), Mumbach dejó EA para unirse a la desarrolladora independiente The Wandering Band que trabaja en Airborne Kingdom y Hennig ahora se encuentra en la división interactiva de Skydance Media.
Desde entonces hemos visto Star Wars Jedi: Fallen Order, una aventura de Respawn Entertainment que cosechó una buena recepción y que tendría una secuela en marcha, y este año llega Star Wars: Squadrons, un juego más pequeño centrado en los combates espaciales con naves. En junio EA se comprometió a duplicar sus esfuerzos con Star Wars: "Disney sigue estando muy comprometida con la IP y con el canon, y continúa creando nuevo contenido", en referencia a las series de Disney+ y las futuras películas.