En las últimas semanas estamos siguiendo nuevos rumores acerca del hipotético Resident Evil 8, la octava entrega de la saga de survival horror de Capcom. Tras el éxito de la séptima parte, que decidió apostar por la primera persona, la nueva secuela de la licencia, pese a estar en un estado de desarrollo relativamente preliminar, sigue avanzando tras varios retrasos y rediseños. Ahora, siguiendo con los rumores de hace unos días, parece que se vuelven a escuchar y leer ciertos ingredientes y componentes sobre la ambientación, los enemigos y las novedades de un videojuego que podría llegar en uno o dos años.
¿Castillos? ¿Licántropos? ¿Zombis? ¿Nieve? ¿Acción?
El rumor nos emplaza, de nuevo, a un título que llegará a la nueva generación de consola y que según los planes de Capcom llegaría a finales de 2021 o 2022, un hecho que ya viene siendo una constante en las distintas filtraciones. La empresa japonesa habría rehecho el trabajo varias veces, desechando ambientaciones e incluso localizaciones tropicales y exóticas, siendo el paraje helado y rural, aparentemente enmarcado en la Europa del Este, el decidido para la octava entrega.
El videojuego de terror y acción tendrá dos grandes localizaciones o sets de juego, siguiendo una estructura similar a la de Resident Evil 4, y contando con Ethan Winters como gran protagonista -el héroe de la séptima parte-. Por un lado, hablaríamos de un pequeño poblado y sus alrededores, y luego, más avanzado en la aventura, nos encontraríamos con un castillo en la fase final del videojuego. El tamaño, informan, sería algo menor al de la cuarta entrega pero Capcom estaría cómoda con la mezcla de elementos clásicos y nuevos de la saga en estos momentos.
Curiosamente, esta filtración remarca la ambientación medieval, tanto del entorno como de los enemigos, que será la seña identidad de esta secuela que, parece ser, podría abandonar el número '8' en su título. Capcom estaría arriesgando mucho en algunos frentes, y no sabrían si jugar con la nomenclatura tal y como hicieron con la séptima entrega. Vuelve a destacarse en la aparición de una serie de enemigos con forma de bruja, sobrenaturales, capaces de desaparecer y aparecer a placer, un aspecto que cuadra con ciertas ideas que se desecharon del primer concepto de Resident Evil 4 o 3.5, un título que quiso asustarnos de otra manera. Siguiendo con los enemigos, si bien hay zombis clásicos, y se vuelve a hacer hincapié en los hombres lobo o criaturas con este aspecto brutal y animalesco, Capcom habría decidido incluir a no muertos que llevarían armaduras de caballero, escudos o espadas, obligándonos a combatir de una manera distinta a la saga.
Habrá más acción, más sustos y menos exploración, una fórmula en la que Capcom ha fondeado de forma plácida tras el éxito del contenido descargable Not a Hero de la séptima entrega. De hecho, el desarrollo y la dirección ha estado en la cuerda floja durante meses, con un director que abandonó el proyecto, y que según se dice, fue unos de los productores ejecutivos más reputados de la compañía. El nuevo podría ser Hiroki Katō, director de Code: Veronica o incluso se especula con algunos responsables de los spin-off Survivor, Tomoshi Sadamoto y Hiroyuki Kai. Por último, y como se dejó caer hace unos días en el anterior rumor, Chris Redfield regresará a la saga, aunque con un giro especial y como personaje de apoyo del protagonista, pese a que de momento no se han desvelado más detalles. Lo que sí sabemos es que Resident Evil 3 Remake y Resident Evil: Resistance llegarán el 3 de abril a las actuales consolas.
