Este año Sony optó por una presentación en el E3 2018 diferente a lo habitual, más centrada en cuatro grandes juegos exclusivos -The Last of Us Part II, Spider-Man, Ghost of Tsushima, Death Stranding- intercalados por tráilers de otros juegos -Resident Evil 2 Remake, NiOh 2, etc.-. No todos los espectadores quedaron encantados con este formato, especialmente los que siguieron la retransmisión online.
Simon Rutter, jefe de operaciones de Sony Europe, ha comentado las reacciones en The Guardian. Rutter admite conocer las decepciones y que la respuesta fue variada: "La gente realmente disfrutó los juegos y apreciaron la calidad de lo que mostramos".
"También hubo reconocimiento a lo que intentábamos hacer con la construcción del evento" en referencia a la decoración temática de algunos juegos, "con algunas críticas al ritmo y la logística. Durante los últimos tres años, hemos intentado añadir algo de drama y teatralidad en el evento para que sea más que una simple presentación. Intentamos evocar el espíritu de esos juegos". En pasadas ediciones las conferencias comenzaron con conciertos, como el de God of War o Uncharted: El legado perdido.
Criticas por ausencia de novedades
Rutter responde a aquellos que aseguran que no se enseñó nada "nuevo", aunque hay una gran cantidad de juegos que todavía están por llegar: "Alguna cobertura de este año ha sido un poco crítica con la ausencia de novedades, probablemente consecuencia de los anuncios de la gente cuando están en fases tempranas de la producción".
"En parte tiene que ver con el miedo a las filtraciones, no poder presentar el juego en la manera en que quiere su creador. Pero el deseo de nuevos anuncios se enfrenta con la realidad de los tiempos de producción: cuánto se tarda en lanzar un juego".
