Era uno de los grandes problemas a los que se enfrentaba Blizzard con Overwatch: la toxicidad de sus jugadores y el comportamiento abusivo de sus usuarios en la comunidad. A comienzos del pasado enero, se comenzaron a implementar una serie de medidas para evitar este tipo de conductas, y ahora es Jeff Kaplan, máximo responsable del videojuego multijugador, el que comunica que han tenido más éxito del imaginable.
El mes pasado los jugadores tóxicos descendieron hasta un 30%
Si bien no hay datos correspondientes al continente europeo, Kaplan ha confirmado que el número de partidas competitivas con comportamientos tóxicos y abusos a través de chat y similares, ha descendido hasta un 26.4% en Norteamérica y un 16.4% en Corea del Sur.
Como dato adicional, Blizzard confirma un descenso de un 28.8% de los jugadores más problemáticos y abusones en el territorio norteamericano, así como bajada similar del 16.4% en Corea.
Se trata de una marca conseguida tras las últimas medidas tomadas el mes pasado, con una nueva estructura en el juego que favorecía la cohesión de los equipos y sus jugadores en Overwatch y su política de inclusión y respeto hacia los usuarios. "Estamos realmente orgullosos de los esfuerzos que ha hecho nuestra comunidad para hacer de Overwatch un mejor lugar para jugar. ¡Gracias a todos!", comunicaba Kaplan.
Pese al éxito y la mejora, Blizzard no se quedará ahí. La idea de la empresa es seguir mejorando el entorno online, implementando curiosas medidas e invitando a los jugadores a que sean parte de la solución y no del problema.
Overwatch está disponible en Xbox One, PS4 y PC.