El equipo de trabajadores de Eugen Systems, el estudio francés que lanzó en 2017 el juego Steel Division: Normandy 44, ha dado a conocer que llevan un mes en huelga tras continuados impagos.
Félix Habert, representante de los trabajadores, ha sido uno de los afectados por los impagos de los dueños de la empresa. Unos veinte trabajadores iniciaron hace un mes una huelga para denunciar su situación y ahora han decidido darla a conocer.
"Como resultado de la negativa a pagarnos lo que marca la ley, y la evidente falta de consideración por el valor de nuestro trabajo, hemos llegado a la conclusión de que, para hacernos oír, no había más opción que ir a la huelga", comunicaron los trabajadores a la empresa el pasado 15 de febrero a través de su sindicato, Le Syndicat des Travailleurs et Travailleuses du Jeu Vidéo.
La huelga se convocó tras 15 meses de negociación
La convocatoria de la huelga llegó tras el rechazo de la empresa a pagar a los trabajadores las nóminas atrasadas tras 15 meses de negociaciones.
El sindicato francés de trabajadores de la industria del videojuego es muy reciente: se fundó el pasado otoño como resultado de la necesidad de los empleados del sector de conseguir representación sindical que defienda sus intereses en una industria con alta temporalidad, muchas horas extra que no suelen pagarse y otros abusos hacia el trabajador.
El plan de acción sindical ha considerado que ha llegado el momento de difundir su situación y darla a conocer a través de los medios, así como iniciar nuevas consultas legales con abogados especializados en derecho laboral. También quieren que su situación tenga respuesta política en Francia.
Denuncian impagos e incumplimiento de leyes laborales
Y es que, si bien el marco legal europeo protege más a los trabajadores que en sistemas como el estadounidense (donde muchos estados no tienen ninguna regulación de mínimos en las condiciones laborales), la situación en la industria del videojuego no siempre es la más conveniente para conciliación familiar o estabilidad laboral.
La ley en Francia reconoce a los trabajadores del sector tecnológico el derecho a descansar del trabajo (no están obligados a responder a correos electrónicos fuera del horario laboral, por ejemplo), se fijan escalas salariales y compensaciones mínimas por horas extra.
Entre las reclamaciones está el incumplimiento de varias de estas regulaciones laborales y la falta de pagos a la seguridad social y los planes de pensiones de trabajadores, algo obligatorio para todas las empresas en Francia.
El estudio, por su parte, ha alegado que las reivindicaciones son imprecisas y "no serias", escudándose en ello para rechazar la negociación con los trabajadores, lo que ha llevado en última instancia a esta huelga en defensa del cumplimiento de la legislación vigente y el impago a los trabajadores.
