El asesino más sigiloso de la historia se esconde en tu PSP
PSP vive quizá el mejor año desde su lanzamiento gracias a los numerosos títulos anunciados a corto y medo plazo, tanto nuevos como de sagas arraigadas. Uno de los anuncios más importantes es la aparición, por primera vez en PSP, de la franquicia Assassin´s Creed, que ya había visitado el mundo de las portátiles con un juego para Nintendo DS con Assassin's Creed: Altair's Chronicles en 2008, además de una versión bidimensional para móviles. Sus creadores tienen la intención de establecer las aventuras de los antecesores de Desmond como una gran saga al nivel de Prince of Persia, y este mismo año será lanzado Assassin´s Creed II para PC, PlayStation 3 y Xbox 360, en esta ocasión con Ezio Auditore como protagonista, en pleno Renacimiento italiano.
Pero, centrándonos en Assassin´s Creed: Bloodlines, Ubisoft ha decidido no dar carpetazo a la historia del primer juego. En él, de manera resumida, se contaba cómo Desmond, un simple camarero, es secuestrado en el año 2012, un futuro cercano que lo envuelve en un experimento científico que utiliza su memoria genética para descubrir el pasado de sus antecesores, en concreto un personaje clave, Altair.
Tras un final completamente abierto que daba la posibilidad clara de nuevas entregas, la desarrolladora tenía la opción, como ha hecho en la secuela oficial, de optar por un nuevo descendiente y de esta manera ubicar la aventura en un lugar completamente original; o por el contrario, seguir con el carismático Altair en la apasionante historia situada en Tierra Santa. Es esta última historia la que se encargará de cubrir Bloodlines.
En Assassin´s Creed Bloodlines, Altair decide continuar su lucha contra los templarios y dar caza a los que se han asentado en Chipre, abandonando por tanto las tres ciudades conocidas en el primer juego –Jerusalén, Damasco y Acre-. Armand Bouchart, nuevo líder de los templarios, decide llevar a su ejército de Tierra Santa a esta nueva localización tras la muerte de Roberto de Sable, y nuestro encapuchado asesino, dispuesto a acabar con ellos y sus ansias de poder, irá tras ellos a esta activa zona del siglo XII. Sin embargo, la ocupación de los templarios no es bien recibida en Chipre y Altair ayudará, y será ayudado, por la resistencia de la ciudad, sometida bajo la presión de la recién llegada orden militar cristiana, con el objetivo de eliminar a los principales cabecillas de los invasores.
Sin Al Mualim como su mentor, el Altair de Bloodlines ha evolucionado, crecido mentalmente, respecto al primero que conocimos y ahora crea su propio destino, es más desconfiado y curioso. De forma complementaria, contará el enlace perdido entre lo contado en Assassin´s Creed y su secuela, una información que podría ser imprescindible para entender la trama de la saga de una manera global, enlazando a Desmond, Altair y Ezio y el misterio del códex..
Assassin´s Creed sorprendió a la comunidad de jugadores en 2007 gracias a su increíble ambientación –más meritoria si cabe al contar con un mundo abierto- y la detallada recreación de unas ciudades vivas en constante movimiento. El juego no estuvo exento de polémica, pues el sistema de misiones, algo escaso en variedad –parcialmente subsanado en la versión PC-, no fue del gusto de todos, algo que los desarrolladores aseguran será corregido en Assassin´s Creed 2 y Bloodlines. El juego en PSP contará con ocho nuevos tipos de misiones –un número más elevado que el original- que prometen dar más variedad a los momentos de exploración de las ciudades antes de decidir el asalto al villano de turno, que terminará con su muerte y dará comienzo una nueva misión.
Bloodlines puede ser un título menor en cuanto a peso narrativo dentro de la saga, pero sus aspiraciones son tan altas como las de la secuela, y mantendrá las características que forman parte del sello de Assassin´s Creed, como la libertad de acciones y el combate cuerpo a cuerpo, que adapta las animaciones según el tipo de ataque y la posición de los enemigos. Esta facilidad innata de Altair de escalar prácticamente cualquier superficie, que Ubisoft denomina Free runing ha sido trasladada a la pequeña portátil de una manera asombrosa y, al igual que en las consolas domésticas, en la práctica supone que las paredes y torres de la ciudad dejan de ser un muro infranqueable; probablemente, cualquier tejado o lugar que alcance tu vista, podrá ser coronado.
La desarrolladora promete trasladar todas las acciones de las versiones "mayores" con un Altair capaz de saltar, balancearse y luchar de una manera fluida, natural. PSP cuenta con buenas conversiones de la trilogía de Prince of Persia de la pasada generación –que en cierta forma comparten algunas similitudes con Assassin´s Creed-, pero no cabe duda que la amplitud de este mundo es mucho más complejo y ambicioso que otros juegos vistos en la portátil; el horizonte es quizás el más extenso de cuantos juegos han aparecido en PSP, con una suavidad de movimiento envidiable.
Las ciudades de Bloodlines reducen su número respecto al primer juego, de tres a dos: Limassol y Kyrenia, ambas en Chipre. La primera, situada al sur de Chipre, tuvo una gran importancia en el comercio del Mediterráneo y, tal y como cuenta el juego, llegó a estar sometida a los caballeros templarios, que impusieron impuestos desorbitados para recuperar la inversión que había supuesto la compra de Chipre a Ricardo Corazón de León. Kyrenia, al norte de la isla, destaca por ser el centro administrativo y comercial de la zona, motivos por los que la seguridad los cuatro castillos se fortificaron, las murallas rodearon a la ciudad y se creó una defensa ante cualquier ataque.
La cuidada ambientación se asemeja en color a Assassin´s Creed, y aunque la arquitectura es algo diferente debido a la nueva localización, continúa ofreciendo variedad de escenarios como cabría esperar: puertos comerciales, fortalezas, zonas interiores, callejones y toda una ciudad conectada por los tejados. Todo apunta a que estamos ante uno de los grandes portentos técnicos de PSP, y con el cuidado aspecto artístico que caracteriza a la saga.
El pequeño vistazo que hemos podido dar al juego demuestra que estamos ante una gran superproducción para la pequeña de Sony. Es cierto que el número de habitantes neutrales parece haber sido reducido drásticamente –nos referimos al populacho realizando tareas cotidianas-, pero el modelado y animación del protagonista y los secundarios es más que sobresaliente. Altair mantiene el abanico de movimientos para afrontar cada situación casi tan ilimitada como la imaginación del jugador. La técnica de "movimiento dinámico" asegura una animación fluida según la situación.
Una de las gratas sorpresas para los poseedores de PSP y PlayStation 3, al margen de disfrutar por completo de la trama y entender mejor el nexo entre Assassin´s Creed y su secuela, es desbloquear algunos extras en ambos sistemas. Estas ventajas consisten en mejoras de vida y una espada secreta. Además estarán accesibles todas las armas especiales –seis- en Assassin´s Creed II, y las monedas de los templarios y tesoros podrán intercambiarse entre Bloodlines y ACII. Una manera de recompensar a los compradores de las dos versiones, que aún pocos juegos explotan –recordamos Resistance 2 y Retribution, y los próximos Gran Turismo 5 y GT PSP-.
En 2009 Ubisoft llevará una de sus franquicias más potentes a la portátil, que demostrará que su hardware aún tiene mucho que decir, y de la nueva avalancha del catálogo que se avecina Assassin´s Creed Bloodlines es uno de los juegos que a priori se coloca en el pelotón de cabeza. Previsto para finales de año, en fechas cercanas a las esperadas versiones de Assassin´s Creed II para domésticas y PC, se lanzará también en un pack limitado con la consola, una película en UMD y una Memory Stick de 2 Gb.
