En 2006 Volition llenó un hueco presente en los primeros años de la pasada generación de consolas: la ausencia de un Grand Theft Auto. Saints Row era un título mucho más modesto que las superproducciones de Rockstar, pero tanto ese juego como su secuela consiguieron satisfacer a esos jugadores que buscaban historias de pandilleros y mundos donde sembrar el caos. Pero cuando tocó lanzar un tercer juego, GTA 4 ya estaba en las estanterías de los jugadores; para un estudio mediano era imposible competir cara a cara con los blockbuster de los hermanos Houser. Apostaron por una fórmula que se demostró exitosa: dejar de lado las tramas relativamente serias para centrarse al máximo en lo absurdo, la locura y la diversión sin miramientos. El próximo 22 de mayo llega a PS4, Xbox One y PC Saints Row The Third Remastered, una revisión (muy) a fondo del juego donde podíamos luchar armados con un dildo morado gigante.
Para quien llegue de nuevas a la saga, decir que la trama continúa lo narrado en los dos primeros juegos, pero distanciándose totalmente de ellos, tanto en desarrollo como en tono. Si aquellos eran juegos de bandas callejeras y gánsteres, aquí todo tiene un tono cómico y gamberro.
Los Santos, el grupo delictivo que protagoniza la serie, ha entrado de lleno en la rueda del capitalismo, convirtiéndose en una marca que aparece en zapatillas, bebidas energéticas y hasta muñecos. Pero su dominación se ve amenazado por El Sindicato, otra organización criminal que controla Steelport, la ciudad repleta de neones y rascacielos a la que viajarán los Saints para librarse de ellos.
Eso llevará a los jugadores a cumplir un gran número de misiones que tienen como denominador común las explosiones, lo cafre, la locura y el humor absurdo: en una misión puedes estar derrotando a soldados con armas futuristas y en la siguiente haciendo frente a oleadas de zombis, para minutos después tener que conducir un coche con cuidado porque llevas a un tigre de copiloto, y al rato, participar en un combate de lucha libre o en un contrarreloj de matar a peatones con un coche armado con lanzallamas. Nada de esto ha cambiado en esta nueva versión, que ha dejado inmaculados los contenidos originales añadiendo los 30 contenidos adicionales de pago que se lanzaron en su día y las tres expansiones de historia.
Una remasterización que apunta a 4K y 30fps en consolas intergenacionales
Pero con tan solo ver una imagen estática de esta remasterización es fácil apreciar que han cambiado muchas cosas, algo que "fue un desafío", según nos explicaron representantes de Koch Media en el evento de presentación online al que puso asistir este medio. El trabajo realizado por Sparesoft (un estudio que aparece en los créditos de Anthem, Assassin's Creed Odyssey, The Outer Worlds y muchísimos otros) ha supuesto cambiar, remodelar y/o mejorar más de 4000 assets e introducir nuevas tecnologías a un título que tiene ya nueve años a sus espaldas y que ahora se moverá a 4K y 30fps (en consolas intergeneracionales).
Saints Row The Third Remastered utiliza un nuevo motor de iluminación global que se ha aplicado a todas las horas del ciclo día/noche. Los reflejos sobre el capó de los coches y los charcos de agua, los destellos cegadores al mirar hacia el sol, la oclusión ambiental y la calidad de las sombras se parecen más a la de los juegos de la presente generación de consolas que a un título de hace casi una década. El desenfoque o motion blur se deja notar cuando avanzamos a cientos de kilómetros por hora contra una masa de peatones, y sobre todo cuando pilotamos un jet sobre unos edificios con muchísimos más detalles, un horizonte ampliado y un cielo totalmente remodelado, que utiliza la mayor paleta de colores ofrecida por el HDR (que estará disponible en PC, PS4, PS4 Pro, Xbox One S y Xbox One X). También hay mejoras en los efectos especiales hechos desde cero, mejores efectos volumétricos, nuevos shaders, mayor densidad de árboles y hierbas y otros tantísimos detalles que llevaría varias páginas enumerarlos al completo.
Personajes rehechos de arriba abajo y más caos
De lo que no podemos dejar de hablar es de las mejoras y cambios en las texturas. Todos los personajes principales se han rehecho de arriba abajo, en ocasiones cambiando su estilo visual. Los personajes secundarios, como los miembros del Sindicato, también se han remodelado conservando su estilo artístico. Con los vehículos y las armas han hecho lo mismo: todas se han mejorado, y algunas se han recreado. Incluso veremos con más detalle a todos los viandantes con los que nos crucemos – o que atropellemos.
Pero hay un cambio que afectará de manera decisiva a la jugabilidad. Como decíamos, Saints Row es una saga que no solo permite, sino que promueve generar el caos en su ciudad. La potencia extra de las consolas de la actual generación ha permitido aumentar mucho el tráfico de coches y peatones en las calles, lo que en la práctica se resumía en un pequeño vídeo que nos mostraron, donde un corte en una carretera ocasionado por el jugador generaba un enorme accidente que implicaba a varias decenas de vehículos.
A pesar de todas las mejoras, en el gameplay que nos mostraron se apreciaba algo de popping (árboles y personajes que aparecían en el horizonte repentinamente) que ya estaba presente en el juego original; y aunque se han añadido nuevas técnicas de antialiasing, se siguen viendo texturas vibrantes en la distancia, sobre todo cuando vamos a toda velocidad. En la demostración incluso apareció un curioso bug: tras derribar un semáforo en una persecución, un enemigo que perseguía al jugador se tropezó con él, y en lugar de caerse, arrastraba el poste por el suelo conforme corría. Eso sí, han asegurado que habrá un parche día uno para solucionar múltiples problemas, y que también están trabajando en una actualización posterior para arreglar errores con "35 cabezas" de peatones que se comportan de manera errática.
El 22 de mayo en PS4, Xbox One y PC
El 22 de mayo podremos comprobar de primera mano el trabajo de remasterización realizado y, sobre todo, si Saints Row The Third Remastered soporta el paso del tiempo: en la última década los mundos abiertos son probablemente el género que más ha avanzado, añadiendo mecánicas basadas en sistemas del mundo y ampliando la variedad y alcance de esos universos virtuales. Está por ver si la locura, la absurdez y el pegar sopapos con un dildo morado gigante permiten obviar esa evolución.
Hemos escrito estas impresiones tras asistir a una presentación por videoconferencia a la que fuimos invitados por Koch Media.