Más de diez años
En 1995 se lanzó un título que fue decisivo en la implantación del formato CD-ROM: Myst. No salió de la nada; del 93 al 95 había tenido lugar el auge de los juegos conformados por videos, en el sentido de mezclar secuencias reales o animadas con una limitada jugabilidad. Si bien la mayoría de estos juegos en el resto de géneros fue un fracaso (los polígonos eran más versátiles), en las aventuras gráficas – donde la velocidad no era tan importante – se hicieron fuertes sobre todo gracias Seventh Guest y Myst. Pero ¿Qué tipo de aventura gráfica era Myst? He aquí el cambio: Cyan Worlds – desarrolladores de Myst – establecieron lo que sería el patrón de la aventura en primera persona.
Las antiguas aventuras de Lucas o Sierra, dialécticas, más basadas en el acertijo que en el puzzle abstracto, dieron paso a los entornos misteriosos, sin apenas personajes y en los cuales el jugador debe abrirse paso gracias a su astucia. Myst es el paradigma, el inicio de todo esto, y el modelo que usarían compañías como Cryo para realizar su negocio.
Nadie en ningún lugar
Myst era la palabra que el protagonista leyó en un antiguo libro. Al finalizarlo, quedó hipnotizó con las descripciones de una isla fantástica, con los más extraños artilugios y fuera de cualquier tipo de civilización conocida. Nada más acabar con el libro, el protagonista se verá transportado a un mundo de ensueño. He aquí el inicio: perdido en una isla cualquiera, situado en un puerto y oyendo la brisa marina. Relajante sí, pero ¿Cómo salir de este fantástico mundo?
El clásico inicio "brusco" de las aventuras en primera persona tiene en Myst su referente original. ¿Qué hago? ¿Dónde voy? Son las preguntas que asaltarán la cabeza del jugador con este críptico inicio. Como los jugadores de Myst avezados saben, deberás explorar minuciosamente la isla, interpretando los legajos desperdigados y resolviendo mil y un puzzles de diseño original.
Este inicio dará pie al verdadero nudo del juego, que no es otro que las distintas edades que puedes visitar. Usando referencias antiguas (edad mecánica, edad de piedra, edad selenítica, etc.) aquí estarán los puzzles más difíciles, y que precisamente por eso aportarán una mayor duración al desarrollo del juego original.
Nueva edad
La principal novedad de Myst en PSP respecto a su edición original es una nueva edad ubicada en un mundo de hielo llamado Rime. Está traída directamente de la versión en tiempo real de Myst, realMyst, que usaba polígonos en lugar de video.
Nos ubica en un mundo helado donde hay un observatorio, lo que llevará a los socorridos puzzles, los cuales estarán relacionados con las torres aledañas a éste. Interesante añadido, se completa con un "cómo se hizo" de la versión PSP y la música remasterizada de realMyst. Éstas son las novedades más importantes de Myst para PSP, que aunque tampoco son tales, aportan novedad para aquellos que no tuvieran la oportunidad de jugar a realMyst.
Prueba y error
Este primer Myst no debió sólo su éxito a sus gráficos de video o al formato CD-ROM. Tiene una importancia capital la calidad de los puzzles, que aunque siendo crípticos resultaban originales y superaban con mucho lo visto en el género por aquella época. De la calidad de éstos sólo queda ver el escaso éxito que tuvieron los imitadores de Myst, ya que ninguno de ellos alcanzó la justa medida entre dificultad e interés del juego original (con la excepción, claro está, de las secuelas de Myst realizadas por la propia Cyan)
Estos puzzles, desde las célebres ruinas selenitas a los puntos activos perdidos, ponen en liza la capacidad del jugador, ya que no están jamás explicados o desarrollados por personajes externos. Esto es, es el propio jugador el que debe buscar la lógica de los sistemas de puzzles, para lo cual sólo contará con la ayuda de crípticos legajos de los antiguos que vivieron es estos mundos desolados. Esto llevará a un sistema de prueba y error que puede cargar bastante; pero es bien cierto que por su originalidad e imaginación estos puzzles distan mucho de las palancas habituales, y con un poco que imaginación podremos lograr su solución.
Apartado audiovisual
Fondos prerenderizados unidos por secuencias de video. Esta es la definición más exacta del motor de Myst, que cuenta ya con una década a sus espaldas. No es, claro, una odisea visual y usa bastante poco de la potencia tridimensional de PSP. Todo nos lleva a que el juego parezca antiguo, ya que los fondos prerenderizados son escenas muy poco lúcidas, realizadas con las tecnologías de hace años.
Si bien el diseño de producción es competente - como en todos los juegos de Cyan, por otra parte - , se ha optado equivocadamente por usar un formato de menos color (256 colores) para la pantalla de PSP, lo que hace que todos y cada uno de los fondos tengan unos degradados bastante pobres. Se puede argumentar que era así el original; pero la realidad es que una reedición de Myst para PC (Myst Masterpiece edition) ya incluía estos fondos con color real, con lo cual realmente no hay excusa. Estos fondos de 256 colores están unidos por las secuencias de video del original, que han sido adaptadas también un poco defectuosamente, pixelándose bastante en muchas situaciones.
Mejor parada queda la música, que no ha perdido nada de calidad en esta adaptación a PSP. Los mismos efectos y la brillante música ambiental siguen intactos, incluyendo la célebre introducción narrada.
Adaptación a la interfaz
El juego original usaba exclusivamente el ratón para su uso. Su adaptación a PSP es, claro, el stick analógico, que realiza el movimiento del cursor de manera precisa aunque un tanto dispersa en depende que puzzles. Esto es, en los puzzles que requiere más precisión el stick analógico no da la talla, aunque con un poco de habilidad podremos pasarlo. Por último, el cursor debería haberse hecho interactivo y no permanecer igual todo el tiempo, lo que hace complicada la detección de objetos y pistas esenciales para acabar la aventura.
Conclusión
Myst es una de las pocas aventuras gráficas que va a ver PSP, y sólo por ello ya supone un acontecimiento. Aunque a casi todos los "aventureros" no les hará mucha gracia revisitar otra vez Myst, lo cierto es que de cara a las nuevas generaciones PSP se establece como un soporte inmejorable para la inmersiva experiencia de juego. Experiencia de juego que, dicho sea de paso, podría haber sido mejor con contenidos exclusivos para el juego aparte de la nueva edad. Aparte, el juego queda deslucido por una adaptación visual poco ambiciosa, y los videos pixelados. Por lo demás, la obstinada calidad del título se sobrepone a estos errores, y ofrece una experiencia de juego poco común en la consola de Sony. Sólo por eso, y partiendo de que muchos jugadores no probaron el original, Myst merece un vistazo.