Análisis de Dragon Ball Z: Shin Budokai 2 (PSP)
Por medio de diálogos entre héroes y villanos, vamos avanzando a lo largo de varios capítulos, en los que, como es de esperar, habrá giros en la trama que irá presentando a enemigos con la intención de crear combates, y en ocasiones, se recurrirá a argucias para enfrentarnos contra personajes del lado de los protagonistas. Mencionar, aunque ovbio, que el juego sobreentiende que el jugador conoce todo el trasfondo de los luchadores y los principales personajes históricos (Buu, Célula, Freezer, Broly…); el neófito en el mundo de Toriyama perderá buena parte del carisma que los luchadores han acumulado en estos últimos años.
En definitiva, aunque a nivel argumental Another Road solo aporta una trama alternativa (con los enredos clásicos de esta saga), consigue ser un modo para un jugador bastante interesante y con muchas horas de juego, gracias a los incentivos que nos ofrecerá, como veremos más adelante.
Una de ellas la encontramos en la defensa de ciudades a través de un mapa 3D en el que observaremos a los enemigos atacando dichas localizaciones. Nuestro objetivo, que irá variando, consistirá normalmente en derrotar a cierto personaje y evitar grandes daños en las poblaciones. De nosotros dependerá combatir con enemigos opcionales (que ayudarán a causar destrozos) y conseguir potenciadores y dinero o terminar de forma rápida con la misión derrotando al objetivo, en uno o varios combates. En este mundo 3D, podremos recuperar energía y restaurar la de las ciudades situándonos cerca de ellas, pero también debemos ser conscientes de que los rivales recuperan la suya al causar daños.
Los combates en sí mantienen apuestan por una mezcla de poderosos ataques y combos físicos con los clásicos ataques mágicos. Con un sistema de lucha que claramente apuesta por los reflejos, gracias a la enorme velocidad del título (tanto a ras de suelo como volando), no se dejará de lado cierto factor de estrategia que encontramos en el uso de la novedosa "carga de aura", que aumentará nuestros parámetros y permitirá movimientos especiales más devastadores, y en ciertos personajes, la recuperación de vitalidad.
La sencillez de movimientos hace que los combates sean accesibles desde un primer momento, si necesidad de memorizar los combos (en una lista accesible pausando el juego). Dos botones para golpes a corta distancia, uno para defenderse y otro para los ataques de energía bastan para realizar multitud de movimientos inspirados claramente en la serie de animación, incluyendo los clásicos "kame hame ha".
Una de las novedades la encontraremos en la posibilidad de potenciar aquellos aspectos del personaje que deseemos, de una forma similar a un juego de rol. Disponemos de un tablero de 9 casillas en los que colocar una serie de mejoras (en forma de cartas) para multitud de aspectos, desde la vitalidad, a la resistencia, ataque, velocidad, etc… ventajas que conseguiremos luchando y que ayudarán a personalizar a los luchadores según nuestro sistema de combate, primando aquello que nos interesa.
Entre el plantel de personajes, encontramos ciertos fichajes respecto a la primera parte, como Trunks del futuro, Gohan del futuro, Bardok, Dabrua, Babidi, Buu en varias versiones o Goku en 4ª transformación, además de los clásicos Piccolo, Krillin, Cooler y Vegeta, hasta un total de 24 luchadores. Como es de esperar, también encontraremos estados Super Guerrero en algunos de ellos.
De manera alternativa a Another Road, encontramos varios modos (además del imprescindible versus ad-hoc) para un jugador, como el arcade (cuyo mayor aliciente será conseguir de forma rápida los potenciadotes de habilidades), un detallado modo entrenamiento (similar a los vistos en la saga Tekken) y Z Trial, con pequeños retos para los combates.
Como conclusión global, tenemos que Dragon Ball Z: Shin Budokai Another Road, ofrecer bastantes atractivos para un jugador, un detalle muy a tener en cuenta en este tipo de juegos, dado que no siempre encontraremos contrincante humano contra el que jugar.
Los colores son vivos, y las texturas del escenario no tienen gran detalle, algo que puede ser perdonado gracias a esta estética tipo dibujo animado que busca en todo momento. Los paisajes están claramente inspirados en momentos vistos a lo largo de la serie, desde terrenos rocosos en el planeta Namek o la Tierra, a la una ciudad derruida. Quizá pequen de cierta repetición (por todos son conocidos los entornos característicos de montañas de la mayoría de escenarios). Se echa en falta cierta interactividad con elementos del paisaje, ya que todos dan sensación de cierto vacío, similar al que producían las primeras entregas de Tekken (si bien en Another Road si hay escenarios con estructuras tridimensionales). El único detalle reseñable se encuentra en una marca que producirán en el terreno algunas caídas (por un tiempo).
Uno de los elementos más llamativos lo encontraremos en los ataques especiales, toda una explosión pirotécnica que bombardeará la pantalla. Realizados con toda la energía de ki al completo, estos movimientos rescatan los ataques especiales más característicos de cada luchador, y poseen efectos de transparencias dignas de mención. Artísticamente el juego goza de la misma belleza a la que estamos acostumbrados en entregas para sistemas de sobremesa.
La mejora visual más importantes la encontramos en la cámara, que en esta ocasión si será variable de entre 15 posiciones que rotarán desde una vista parcialmente trasera a una completamente lateral, similar a la que podríamos encontrar en un juego de lucha 2D. Este cambio puede hacer perder espectacularidad pero permite anticiparnos mejor a los ataques rivales y controlar más fácilmente las distancias.
Another Road es un juego que cumple sobradamente en su apartado técnico con lo esperado en su paso por PSP. El mayor defecto lo encontramos en la conservadora puesta en escena del juego, similar a su anterior título de la portátil, con apenas ligeros retoques en destellos y movimientos especiales, pero ningún salto revolucionario. Agradecemos que no se comprometa la estabilidad del motor gráfico por la inclusión de más carga poligonal (por ejemplo, en escenarios), pero en el último año Tekken 5 Dark Resurrection demostró que exprimiendo las herramientas actuales se puede subir el listón técnico.
La ambientación de los combates sigue los cánones marcados por la saga, con muchos temas extraídos de otros títulos anteriores y algún tema nuevo. Las voces podrán ser seleccionadas en dos idiomas, inglés y japonés, algo que agradecerán sin duda los seguidores de la serie. Los sonidos de golpes y demás artificios de energía aparentemente han sido rescatados de anteriores entregas, puesto que no encontramos ninguna diferencia.
Por el contrario, todos aquellos usuarios que no pudieron disfrutar de Shin Budokai en su momento encontrarán en Another Road un juego llamativo, que ofrece diversión sencilla sin grandes complicaciones en combates rápidos donde los reflejos cobran vital importancia. Incluye suficientes alicientes y modos para un jugador que mantendrán el título vivo durante muchas horas para conseguir desbloquear todos los potenciadores y extras, sin olvidar que estamos ante un juego de lucha que cobra verdadero sentido en el modo versus.
Esperamos que en futuras secuelas Namco Bandai ofrezca algo más que una simple actualización de la plantilla de personajes, ya que la única queja de Another Road se encuentra en la pérdida del factor sorpresa; por lo demás, estamos ante un buen juego recomendable para seguidores de la saga y la lucha en general.