Análisis de Guitar Hero Live (PS4, iPhone, Xbox One, Xbox 360, PS3, Wii U)

Tras largo tiempo, y después de un mercado saturado de juegos musicales, 2015 se ha convertido en el año de la vuelta: en el año de la reconciliación con nuestros periféricos en forma de guitarras, baterías y micrófonos; en el año del regreso a los escenarios. Hace unas semanas, Rock Band 4 demostró que el tiempo entre su última entrega y su más reciente secuela había servido para mucho, renovando ligeramente sus bases jugables, y prometiendo unas bases tan estables y sólidas, como reclamadas y veneradas por sus fieles.
Ahora llega a nosotros Guitar Hero Live, una nueva entrega de la serie de títulos de Activision. Guitar Hero Live es, a simple vista, un juego algo más rompedor y fresco que Rock Band 4. Busca concienzudamente desquitarse de intentos anteriores, renovando su mecánica jugable de manera profunda, ofreciendo una presentación y una estética distinta, y recuperando el sentimiento novedoso que hizo que en su momento, este género encajara tan bien entre los usuarios.
Una nueva guitarra y un nuevo tipo de control: blanco y el negro
Hasta la fecha, todos los juegos musicales se habían regido por unos patrones básicos más o menos inalterables. Sí, todas las entregas y secuelas de Guitar Hero o Rock Bandofrecían ciertas novedades o ajustes en su planteamiento, pero las bases y las mecánicas principales eran un terreno sagrado imposible de desmontar ni profanar -si se nos permite la expresión-.¿Cómo replantear una jugabilidad tan encorsetada y férrea en su diseño? Desde Harmonix se arriesgaron -dentro de unos límites-, y en Rock Band 4 tenemos solos y los momentos free style, pero, ¿se puede ir más allá?

Guitar Hero Live trasciende un poco más en los avances realizados por su más directo competidor y desde FreeStyle Games, desarrolladora de esta entrega, se han lanzado a deshacerse sin temor de uno los tótems jugables y visuales del género musical desde sus inicios: los colores y las teclas de colores. Guitar Hero Live estrena un nuevo diseño de guitarra, robusta, sólida y muy agradable al tacto, que apuesta por el color negro glossy, manteniendo los botones Hero Power y demás estándares de la saga, pero añadiendo por el camino nuevas teclas en el traste del periférico y cambiando nuestra forma de concebir lo que hasta la fecha, era un juego inalterable.
Guitar Hero Live usa una nueva combinación de botones en el traste de la guitarra, que aprovecha los graves y los agudos, para ofrecernos una presentación de seis botones negros superiores y blancos inferiores, respectivamente. De esta forma, los habituales rojo, verde, azul o naranja desaparecen, y son sustituidos por notas blancas y negras que caerán en la pantalla esperando su correcta pulsación. Este cambio de tonalidad y colorimetría, aunque puede parecer nimio o superficial a priori, acaba cambiando de manera radical el control de nuestra guitarra, obligándonos a pasar por una nueva curva de dificultad.

La introducción de estos nuevos seis botones por parte de FreeStyle Games consigue que nos sintamos ante algo distinto, muy fresco, y sobre todo, desafiante. Si llevamos jugando durante años a las entregas de Guitar Hero, nos costará un poco adecuarnos y adaptarnos al sistema y al rediseñado código de colores, sobre todo conforme vayamos tocando canciones más complejas o adentrándonos en los modos de dificultad más altos. Eso sí, no os preocupéis. Pese a que el cambio es profundo, básicamente hablamos de la misma forma de toque y pulsación. Es decir, nuestra barra de toque y de trémolo seguirán intactas y funcionando de la misma manera, así como volverán a aparecer las combinaciones dobles -denominadas cejillas, en esta ocasión en blanco y negro- y triples de un mismo color, desciendo por los habituales carriles. Y sí, los rasgueos siguen presentes.

Últimos análisis de PS4, iPhone, Xbox One, Xbox 360, PS3 y Wii U





