Análisis de Tourist Trophy (PS2)

Polyphony digital apuesta por las motos en este nuevo título de velocidad. ¿Conseguirá seguir la estela de Gran Turismo?.
·
Actualizado: 21:31 17/8/2020
GRÁFICOS
9.1
SONIDO
8.4
NOTA
8.7
DIVERSIÓN
8.7
JUGABILIDAD
9
Análisis de versión PS2.
Competencia bienvenida
En los últimos años hemos visto como Namco, y su franquicia Moto GP, ha conseguido el monopolio absoluto del género de motos. ¿La razón? La calidad del juego de la compañía japonesa y la extraña inhibición de antiguos desarrolladores de este tipo de títulos. Esto último es extraño, habiendo franquicias con cierto pedigrí como MotorBike o Motocross Madness que podían resultar alternativas interesantes. En la actualidad esta situación parece que está cambiando, y así Polyphony Digital ha desarrollado este título como una muestra de la portabilidad del motor de Gran Turismo a otros géneros.

La idea de Tourist Trophy surgió con la incorporación de Takamasa Shichisawa a Polyphony Digital a finales de los 90. Ferviente admirador de las motos, propuso al estudio en el que recién se incorporaba la creación de un simulador basado en éstas. Aparcada esta idea por largo tiempo, fue a finales del 2005 cuando le dejaron desarrollar en un tiempo límite de diez meses un juego de motos usando el motor de Gran Turismo. Con esta premisa podríamos pensar en un fracaso o al menos un juego defectuoso. Craso error: Tourist Trophy es de las simulaciones más perfectas que se han realizado sobre motos.

Diferencia de simulación
Con más de 120 motos (la mayoría japonesas), Tourist Trophy es el primer juego de este género en haber realizado una diferencia clara entre ellas. Ya no es cuestión de rapidez o manejo; ahora cada moto trae una posición determinada del piloto. Esto es, la diferencia de conducción es amplísima, y permite (incluso) determinar la posición y peso del piloto en ésta. Aparte, el detalle en estas motos es especialmente minucioso, siendo todas diferentes, incluso en los efectos sonoros. Luego, hay otros detalles interesantes como las animaciones del piloto a la hora del cambio de marchas, la inclinación y demás que, aunque un tanto superfluos en la jugabilidad, resultan un buen añadido visual.

Esta diferencia podría ser inútil si Polyphony no hubiera conseguido una buena simulación, cosa que, afortunadamente, no ha sido así. El motor físico de impactos y la forma en que se controlan las motos es de lejos la más realista que hemos visto en juego alguno. No sólo son diferentes, sino que detectan perfectamente la inclinación, llevándote al golpe si tocas con la rodilla el circuito de la pista. El problema es que las caídas tienen como colofón una vuelta a la moto al estilo de lo que se veía en los juegos Arcade al estilo de hace 10 años (OutRun). No hay una animación de golpe integrada en el contexto, como en MotoGP, lo que da un aire irreal y crea una sensación falsa en el juego. Esto es una pena, puesto que los choques y la detección de la inclinación suelen ser más acertados que en Moto GP, donde las caídas por rozar la acera prácticamente no existían.

PUBLICIDAD

Así, una simulación que apunta maneras de líder, a falta de ver lo que hacen con la entrega 360 de MotoGP, se queda a medio gas por estos fallos de integración.

A más méritos más motos
El modo para un jugador se compone de Arcade y el émulo del célebre modo GT: Tourist Trophy. Del primero podemos sacar competiciones en carreras rápidas en una diversión eficiente. Estas carreras están limitadas a cuatro motos, lo que resulta extraño en un juego que pretende ser un referente en el género.

El segundo modo es el verdadero corazón del juego. Se diferencia sólo del modo GT en que las motos se obtienen gracias a competiciones contra la máquina y victorias en carreras específicas. No existe, por tanto, el dinero. Al mismo tiempo, para acceder a éstas deberás superar varios pruebas de conducción al estilo de lo visto en anteriores juegos de Polyphony. Las carreras están estructuradas tanto en carnés como en tipos de motocicleta. No son tan difíciles, una vez hecho con el control, y permiten una evolución escalonada del conductor de las más sencillas a las más complicadas.

Con más de 32 pistas (entre ellas el circuito de Cheste, en Valencia) se presenta como un título bastante largo. Quizá la pena es que muchas de estas pistas no son circuitos de motor en sí, sino adaptaciones de los tramos vistos en GT 4. De ahí que en ocasiones algunas curvas no se adapten bien a la conducción de una moto de alta cilindrada.

La personalización de pilotos y motos es bastante alta, para jolgorio de aquellos aficionados al Tuning. Frenos, aceleración y giro pueden ser compensados en las motocicletas más descompensadas con la modificación, algo que reduce la dificultad con las primeras motos de competición.

Apartado audiovisual
De casta le viene al galgo: Tourist Trophy utiliza el motor de GT 4 a la perfección. Aún con las limitaciones expresadas antes (cuatro corredores, extraño sistema de golpes) el control de las motos no es una simple adaptación de Gran Turismo, y tanto la velocidad como la física resultan diferentes. Se nota que todo el trabajo invertido ha sido en convertir este motor de manera precisa al mundo de las motocicletas. Los escenarios conservan así todas las virtudes habituales como un altísimo número de polígonos, ausencia de dentado (tara habitual de Moto GP), y cierta nitidez en los entornos. A ello se añade las motos, compuestas de más polígonos que GT 4 y con unos pilotos magníficamente animados.

El apartado sonoro se reduce esta vez a los efectos, que han sido retocados en las versiones PAL y NTSC aumentando su variedad. Ahora cada moto suena y se siente diferente a la hora de acelerar, algo que los aficionados sin duda agradecerán. La música es puramente circunstancial, y no tiene una banda sonora tan sólida como la de Gran Turismo. La única excepción es la magnífica melodía que acompaña la introducción del juego.

Comienzo de algo grande
Un análisis superficial de este juego puede dar pie a opiniones tácitas desenfocadas. Esto es, los choques o ciertas limitaciones dan al juego un toque artificioso que puede confundir a quién lo juegue. Pasado un tiempo y cogido el concepto, se diluye al ver las grandes virtudes de la simulación (superior a Moto GP en muchos aspectos) y las diferentes y amplias posibilidades de edición tanto de pilotos como de motocicletas.

La conducción es una de las más realistas que hemos visto, y las motos tienen por fin la sensación de tener un peso real en la pista. Esto se demuestra en el control, que es exigente sin resultar absurdo. Así, hay un método para tomar las curvas de manera precisa y sin necesidad de realizar giros bastante pronunciados con la palanca analógica. Este, basado en una combinación de aceleración y freno, es mucho más realista que los extraños giros que uno debe hacer en otros juegos. Sólo por esto último Tourist Trophy merece ser visto como el inicio de algo grande.

Conclusión
Polyphony ha realizado casi un milagro a lanzar este competente simulador motociclista con apenas diez meses de desarrollo. Con obvias taras, sus aciertos son no obstante mucho más numerosos y permiten ver el que podría ser el inicio de una competencia necesaria en el demasiado monopolizado mercado de los juegos de motos. Esperemos que Polyphony no abandone esta saga por GT, y que al menos pueda dar el visto bueno a una secuela que corrija todos los defectos de este título. Y, si es posible, con un modo a través de Internet.

Últimos análisis

Another Crab's Treasure - Análisis
Another Crab's Treasure - Análisis
Análisis
2024-04-25 08:54:00
Un 'soulslike' protagonizado por un cangrejo ermitaño es la sorprendente propuesta de Aggro Crab, que firma con Another Crab's Treasure una divertidísima y fresca segunda obra tras Going Under.
Stellar Blade - Análisis
Stellar Blade - Análisis
Análisis
2024-04-24 16:02:00
El nuevo juego de Shift Up en exclusiva para PS5 se destapa como una buena aunque irregular aventura de acción repleta de imperfecciones.
Turbo Kid - Análisis
Turbo Kid - Análisis
Análisis
2024-04-23 09:28:33
Turbo Kid te propone ser Samus Aran en bicicleta en el posapocalípsis. Una secuela en forma de videojuego a la película de culto, impecable en ejecución y puro carisma.
Tales of Kenzera: ZAU - Análisis
Tales of Kenzera: ZAU - Análisis
Análisis
2024-04-22 16:00:00
La muerte de su padre lleva a Zau a una aventura por un mundo de mitología africana para devolverlo a la vida: no faltan los saltos, los combates y la narrativa constante.
TopSpin 2K25 - Análisis
TopSpin 2K25 - Análisis
Análisis
2024-04-22 14:02:00
La mítica saga de tenis vuelve a las pistas con una base jugable muy buena, y aunque queda mucho trabajo por hacer, se posiciona como la mejor opción para los fans de este deporte.
Eiyuden Chronicle: Hundred Heroes - Análisis
Eiyuden Chronicle: Hundred Heroes - Análisis
Análisis
2024-04-21 17:20:00
El sucesor de Suikoden encantará a los fans de los JRPG clásicos y a cualquiera interesado en una divertida aventura con mucho que descubrir.
Género/s: Motos / Velocidad
PEGI +3
Plataformas:
PS2

Ficha técnica de la versión PS2

ANÁLISIS
8.7
  • Fecha de lanzamiento: Mayo 2006
  • Desarrollo: Polyphony
  • Producción: Sony
  • Distribución: Sony
  • Precio: 59.99 €
  • Jugadores: 1-2
  • Formato: 1 DVD
  • Textos: Español
  • Voces: -
  • Online: No
COMUNIDAD
7.84

Tourist Trophy para PlayStation 2

28 votos
Flecha subir