Análisis de Breach (PC, Xbox 360)
Inaugurando el género de acción dentro de la plataforma Xbox Live Arcade en este prometedor año 2011 tenemos por fin para descargar por 1200 puntos Breach, un prometedor shooter exclusivamente online, que llevamos esperando desde el pasado verano.
Breach está desarrollado por Atomic Games, un estudio americano que, aunque no es muy conocido, lleva ya más de 20 años en este mundillo y, por ejemplo, son los creadores desde sus inicios de una saga de juegos de estrategia para PC llamada "Close Combat" que ha conseguido muy buenas críticas, llegando a ser distribuida por Microsoft.
Durante los dos últimos años han sido noticia varias veces por desarrollar un videojuego muy polémico llamado "Six days in Fallujah", que de momento se ha quedado sin publicarse al retirarse Konami, que iba a ser su distribuidora.
Recordemos que la sangrienta invasión de esa ciudad iraquí por las tropas de EEUU en el año 2004 sigue siendo uno de los episodios más polémicos de esa trágica guerra por el supuesto uso de armamento químico, entre otras razones.
Volviendo a nuestras consolas, Breach viene a competir en un género, el de los FPS, que ha estado tremendamente concurrido en este pasado 2010 y que ya tiene unos cuantos títulos asegurados para este año 2011, como el esperadísimo y seguro exitazo, Crysis 2, el nuevo Battlefield 3, el más que nunca interrogante nuevo Call of Duty o el eterno Duke Nukem Forever, por increíble que parezca.
Exclusivamente online
Breach, que lógicamente al tratarse de un juego descargable no busca competir directamente con ellos sino simplemente buscar su huequecito, es un juego completamente online y de hecho no existe ningún modo de entrenamiento ni guerra contra bots, no arrancando ni siquiera el juego si estamos sin conexión.
Tampoco tenemos argumento ni nada parecido. Simplemente, dos bandos de sobra conocidos, los Black Ops, grupo de operaciones especiales de la CIA, y los Op-For, terroristas islámicos, se enfrentan en equipos de como mucho 8 jugadores a diversos modos de juegos en cinco espectaculares mapas, uno de ellos nocturno, de un tamaño mediano, todo ello basado en la época actual.
Escenarios muy conseguidos y además destructibles
Los escenarios son uno de los pilares de este tipo de juegos y hay que reconocer que en este caso están diseñados con esmero, repletos de posibilidades, con múltiples caminos, atajos, diversas alturas, ametralladoras fijas, edificios e instalaciones. Si además añadimos que muchas de sus estructuras son destruibles, gracias sobre todo a unos bazookas que encontraremos por el escenario, nos encontramos con unos escenarios que van cambiando según va pasando la batalla y con nuevas formas, no muy ortodoxas, pero sí muy eficaces, de eliminar enemigos.
Aparte de la cantidad de puntos de experiencia que obtenemos, es indescriptible la sensación de volar un puente colgante o una casa cuando están repletos de enemigos. Otro detalle novedoso a tener en cuenta es que, al cubrirnos tras un obstáculo, la cámara pasa a ser en tercera persona teniendo un control total de la mira con los dos sticks, hasta que probablemente un enemigo nos haga saltar por los aires con un bazooka.
Modos de juego y clases
Los modos de juego son también muy conocidos por todos. Infiltración es similar al conocido captura la bandera, pero con más puntos de control que las tres habituales banderas. Recuperación consiste en recoger bombas químicas señaladas en el mapa y llevarlas a unos contenedores de seguridad. Combate a muerte es de sobra conocido por todos, al igual que el último, superviviente por equipos. Además, en todos ellos podremos elegir en modo hardcore que elimina casi por completo la mirilla y reduce nuestra salud.
En escolta al convoy, el único realmente novedoso, tendremos que ir repeliendo o atacando, según el bando en el que estemos, una serie de vehículos que tienen que recorrer el escenario. Los defensores podrán usar las torretas de los vehículos, pero tendrán que ir volando los obstáculos del camino.
También tendremos las habituales clases de soldado que serán en este caso: fusilero, artillero, francotirador y apoyo, que lleva escopetas como arma predeterminada y reconocimiento, pero esta bloqueada en un principio. En este juego no podremos crearnos distintas clases, sino que únicamente podremos editar los valores de la clase por defecto. Es decir, dentro de la clase fusilero podremos personalizar el arma, los artilugios y los incentivos, pero no crear dos clases fusilero con distintas armas.
Las armas son en su mayoría ya conocidas de otros juegos y hoy en día la M4, ACR, M60 M240 o MP5, pocos secretos virtuales tienen ya para nosotros. Podremos personalizarlas con distintos artilugios como miras o cargador de escopeta, pero siempre a base de gastar los créditos que iremos ganando en las partidas.
Incentivos y artilugios
Además del arma, podremos seleccionar un "incentivo" en cada clase con el que personalizar todavía más nuestro soldado. Los hay, digamos, normales o conocidos, como más fuerza o resistencia, otros curiosos como una cabeza más dura para evitar esos molestos disparos de francotiradores, e incluso uno denominado "vendetta" que nos marcará durante unos segundos en el mapa al último enemigo que haya acabado con nosotros.
Otra de las pocas novedades que añade el juego es la posibilidad de equiparnos con un artilugio por cada clase. En este apartado encontraremos, por ejemplo, chalecos de blindaje, bombas lapa, botiquín, sensores de movimiento, mejoras en el oido, visión por infrarrojos, o un sistema de detección de francotiradores que se basa en los reflejos que emiten sus miras. Pese a que alguno pueda parecer ciencia-ficción, los desarrolladores afirman que están basados en prototipos reales de la CIA que se usan ya, o se usarán en un futuro muy próximo. Para acceder a ellos, además de tener créditos suficientes, tendremos que haber conseguido el rango de soldado exigido para cada uno.
La mecánica del juego, el movimiento y la rapidez recuerda más a la saga Battlefield con limitaciones que a los Call of Duty en cuanto a realismo, y es que los movimientos son lentos y pausados, como corresponde a soldados cargados hasta arriba de armamento, y no tan frenéticos como en la saga de Activision.
Técnicamente Breach simplemente cumple, sin grandes estridencias como por otra parte esperamos para un juego únicamente descargable. Sus gráficos, texturas, movimientos y efectos especiales son correctos, pero están muy lejos de los mejores y más espectaculares juegos de este concurrido genero. Esta sencillez se compensa, como hemos comentado, con un diseño muy acertado y completo de los escenarios.
El éxito y la viabilidad de este juego vendrá dado sobre todo según el número de jugadores que lo vayan jugando, aspecto este que no hemos podido comprobar. Durante estos días de prueba que hemos tenido antes de su lanzamiento definitivo, previsto para el 26 de Enero, siempre hemos tenido disponibles un par de partidas creadas por los propios desarrolladores en las cuales enfrentarnos con ellos, con victorias suyas casi siempre.
Conclusión
A la hora de resumir y valorar un juego como Breach es cuando te das cuenta que realmente es muy difícil ser justo.
En el aspecto positivo hay que comentar que realmente es un buen multijugador online con pocos pero interesantes mapas, variadas opciones de personalización, unos cuantos artilugios e incentivos muy curiosos, y un número de modos de juegos suficiente con los que entretenerse por un precio bastante ajustado de salida, 1200 Microsoft Points.
Como aspecto negativo nos quedamos con la agridulce sensación de estar jugando a un "Battlefield" en pequeñito, que aporta pocas novedades y con el interrogante de saber a qué número de jugadores interesará, ya que será este el factor que decidirá la vida útil del mismo.