Análisis de Rhythm Paradise (NDS)

Lo cierto es que Rhythm Paradise es un título muy continuista, pese a los lógicos cambios derivados del paso de una plataforma a otra, pero es algo que no sería justo tener en cuenta, pues el primero no tuvo distribución en nuestra región. Lo que hay que hacer en este título es pinchar o arrastrar el lápiz táctil por la pantalla al ritmo de la música usando las pistas visuales y sonoras que nos enseñarán qué hacer y cuándo. Ahí reside su principal similitud con los Wario Ware: el jugador debe usar su intuición en combinación con las pistas que da el juego para ejecutar la acción apropiada en el momento apropiado. Esto se mantiene en sus 24 minijuegos que, por cierto, son completamente diferentes entre sí.
Los minijuegos propuestos no son musicales necesariamente en cuanto a ambientación, pues hay situaciones como hacer fotos de una carrera, jugar al ping pong, y, en definitiva, situaciones estrambóticas que, insistimos, huyen de ambientaciones musicales o serias. Esto le proporciona gran variedad, y ha vuelto a dar libertad creativa a los desarrolladores, que no se han cortado nada a la hora de diseñar la estética ni las situaciones del juego: están tan locos como han mostrado en toda la saga Wario Ware.
Del mismo modo, se ha contado con una banda sonora compuesta por completo para la ocasión. Esto puede ser negativo para quienes prefieran temas extraídos de grupos musicales de renombre, pero la calidad sonora es buena y la música es animada, y responde específicamente a los requisitos jugables tan característicos de un concepto como el de Rhythm Paradise. Las voces de la música no es que sean una maravilla… bueno, más bien las letras de las canciones, que son más onomatopéyicas que otra cosa, aunque son sólo unas poquitas las que cuentan con voz, pues la inmensa mayoría son instrumentales por completo. En cualquier caso, lo importante es que la música no sólo suena bien, sino que, al ser hecha expresamente para el juego, responde a todas las necesidades jugables, que es lo que nos interesa.
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