Análisis de SEGA 3D Classics Collection (Nintendo 3DS)

Hace unos años que SEGA, junto al estudio japonés M2, está recuperando juegos de su enorme catálogo para Nintendo 3DS. Concretamente, todo empezó a finales de 2012 cuando rehicieron Space Harrier para la portátil de Nintendo, y hasta la fecha han aparecido 16 juegos, y está planeada ya la tercera recopilación. Pero aquí en Europa, aunque nos han llegado casi todas las entregas en digital, ahora nos ha llegado esta segunda recopilación en formato físico, y casi tenemos que decir gracias, porque la primera es de suponer que a estas alturas no aparecerá nunca, y la tercera, suponemos que dependerá de una serie de factores que no controlamos.

Con todo, hay que decir que estamos de enhorabuena por poder disfrutar de una recopilación de la que ya hemos hablado de algunos juegos, a los que hemos otorgado en algunas ocasiones notas realmente excelentes.

Y es que no hablamos de conversiones normales, de emulación plana como se puede encontrar en consolas virtuales y otros inventos similares, sino que hablamos de recreación histórica, en la que se intentan llevar las sensaciones originales a la versión de la portátil de Nintendo, y en muchas ocasiones se cuenta incluso con mejoras en todos los ámbitos, desde la puesta en escena como en nuevos modos, personajes u otros extras.

Tenemos una decena de juegos a disfrutar en esta ocasión, con una variedad de mecánicas notable. Por un lado hay dos juegos de disparos con cámara en tercera persona y efecto en tres dimensiones, por otro lado un juego de carreras, un beat ‘em up de scroll lateral, un juego de plataformas, un juego de puzles, un juego de laberintos, y finalmente una recopilación de la mejor saga de cute’m up de la historia.

Empezaremos con esta parte final, porque es interesante recordar que la saga Fantasy Zone cumple 30 años, y que en esta entrega está incluido el inicio (en versión de Master System) y el final (tanto en formato de la 8 bits de SEGA como la versión que ya analizamos en su momento aquí). De lo último sólo podemos decir que sigue siendo uno de los mejores matamarcianos para los amantes del género de los últimos tiempos, mientras que las versiones de Master System quedan sorprendentemente bien usando el efecto 3D, aunque quedan muy por debajo de la otra versión a todos los niveles, si exceptuamos el sonido, el cual usa el chip FM que no llegó a aparecer en Occidente.

El otro juego de Master System del pack, Maze Walker (conocido en Europa hace unos cuantos años como Maze Hunter 3D) es un título que si bien es poco generoso en su propuesta jugable, fue un perfecto ejemplo de cómo hacer un juego que aproveche las gafas de tres dimensiones de la consola de 8 bits de SEGA. Como la conversión se realiza a Nintendo 3DS, es la oportunidad perfecta de dejarse sorprender con un sencillo juego de laberintos donde, armados con un palo y una buena cantidad de ítems, nuestro protagonista se enfrenta a enemigos y trampas que puede superar gracias a un salto que nos permite ver el efecto 3D en todo su esplendor. En su momento el efecto era realmente espectacular, pero en una época donde ya tenemos la realidad virtual a un precio razonable, no sorprende tanto.

Respecto a los juegos de Mega Drive, tenemos una de cal y otra de arena. El lado negativo, por así decirlo, está encarnado en Altered Beast, que por alguna razón (concretamente, porque ha vendido bien en la consola virtual de Wii, y porque es más fácil de usar el efecto 3D) se ha decidido convertir la versión de Mega Drive en lugar de la recreativa. El juego en sí, a pesar de tener sus fans, está bastante alejado de lo que se considera hoy en día un buen juego, pero sigue teniendo sus momentos, como el inicio del juego o el hecho de convertirse en varios monstruos (y ahora además tiene un sistema llamado "Random form" que puede hacer más divertidas las partidas).

La conversión de Sonic, en cambio, es posiblemente la versión definitiva, mejor aún que las creadas por Chris Whitehead para diferentes dispositivos. Por un lado el efecto 3D está realmente conseguido, y por otro lado se puede usar el movimiento de rodar en el suelo. Sonic, a diferencia de Altered Beast, se juega fantásticamente a día de hoy, y es una verdadera lección en usabilidad, diseño de niveles, y curva de dificultad. Un juego de plataformas que marcó una época, y que sigue siendo referente 25 años después.

Sobre los juegos de recreativa, tenemos tres juegos que usan el sistema "Super Scaler" para darnos una impresión conseguida (especialmente con el efecto de Nintendo 3DS) de tres dimensiones, y un entretenido juego de puzles. Sorprende que Puyo Puyo 2 haya llegado directamente en japonés, pero se sigue jugando igual de bien. Para quien no lo conozca, es un juego de puzles donde tenemos que juntar cuatro piezas del mismo color y así poder vaciar la pantalla, tirándole un poco de "piezas basuras" al rival, de manera que si somos capaces de realizar combinaciones mayores la cantidad de "piezas basura" será mucho mayor, y podremos derrotar al rival con más facilidad. Al principio cuesta algo hacerse con la mecánica, porque los rivales no lo ponen nada fácil, pero una vez caes en sus redes es muy difícil salir de ahí.

Galaxy Force II es, posiblemente, el juego que mejor uso hace de las capacidades de Nintendo 3DS de todas las conversiones de SEGA, y uno de los juegos, en general, que más sorprende de todo el catálogo de esta consola por ello mismo. En esencia es un matamarcianos de visión trasera donde manejamos una nave a lo largo de varios escenarios, pero la sensación de atravesar un río de lava en la segunda pantalla, por poner un ejemplo, es fascinante, y más si pensamos que el original es de 1989.

Algo parecido pasa con Thunder Blade, un juego que si bien es algo complicado de jugar a día de hoy, como comentamos en su análisis, tiene un efecto en tres dimensiones fantástico, y además incluye bastantes novedades respecto al original.

Finalmente, el que posiblemente sea el juego más interesante para el que haya acumulado vía digital todos los juegos anteriores: Power Drift. Si bien en Japón ha aparecido en descarga digital (y con 12 personajes más de clásicos de SEGA), esta es la primera oportunidad que tenemos para disfrutar de uno de los arcades de carreras más sorprendentes de SEGA, pues no se conforma con un efecto tridimensional tradicional, sino que también emplea diferentes alturas en la carrera. Es algo caótico, pero muy divertido, y complementa muy bien este pack.

Es innegable que al no aparecer los clásicos de la primera entrega de 3D Collection (recordemos, juegos como After Burner 2, Out Run, Space Harrier, el primer Fantasy Zone, Streets of Rage, Shinobi III o Ecco the Dolphin) ésta parezca una recopilación de segundos platos, pero tiene mucho más valor en sí mismo de lo que cuesta (no llega a 30 euros de salida). Mezcla monumentos jugables como Sonic, Puyo Puyo 2 o la versión 3DS de Fantasy Zone con verdaderos documentos históricos como Thunder Blade, Maze Hunter 3D o Power Drift. Salvo que no os interese nada la historia de los videojuegos, es una recopilación imprescindible.

Este análisis se ha realizado con una copia comercial que nos ha proporcionado la distribuidora del juego en España, Koch Media.