Análisis de Monster Hunter 4 Ultimate (Nintendo 3DS)
"¡No olvides hacer pausas de vez en cuando! Ya conoces el dicho: quien caza pasito a pasito, caza lo que no está escrito", con este mensaje, Capcom nos da la bienvenida a Monster Hunter 4 Ultimate, advirtiéndonos de que estamos a punto de sumergirnos en una experiencia de juego tan profunda y adictiva capaz de conseguir que las horas se sientan como meros minutos. Algo de lo que damos buena fe.
¡Corre! ¡Salta! ¡Trepa! ¡Monta!
Para los que nunca hayáis tenido la ocasión de probar las bondades de esta saga, decir que estamos ante un juego de acción y rol en el que nuestro objetivo será derrotar temibles monstruos para conseguir materiales con los que fabricarnos armas y armaduras que, a su vez, nos permitan vencer a criaturas cada vez más fuertes. Esta es la base en torno a la cual gira toda la serie: hacernos más poderosos para poder afrontar retos mayores.
Lo interesante es que todas y cada una de las bestias a las que tendremos que dar caza a lo largo de la aventura son totalmente únicas, obligándonos a aprendernos sus comportamientos, patrones de ataque, debilidades y características. Como podéis suponer, esto añade una enorme y muy agradecida variedad a los enfrentamientos, aunque si hay algo que nos ha gustado especialmente es la sensación de progreso que transmite cada batalla.
Conseguir todos los materiales para fabricarnos la armadura de un monstruo concreto es algo que nos obligará a derrotar a esa criatura muchas veces (y si tenéis mala suerte pueden ser bastantes), pero cada vez que lo matemos, notaremos cómo vamos mejorando contra él, hasta el punto de ser capaces de esquivar casi todos sus ataques y de poner fin a sus vidas en la mitad de tiempo que al principio, por lo que no solo sentiremos cómo nuestro personaje se va haciendo más fuerte con el nuevo equipo que le iremos consiguiendo, sino que nosotros, como jugadores, también mejoraremos, algo que queda aquí mucho más patente que en casi cualquier otro juego del mercado actual.
Ya que hablamos de monstruos, decir que tenemos más de 80 tipos distintos de seres a los que dar caza. La mayoría de ellos son totalmente nuevos, muy originales, carismáticos e imponentes, aunque también regresan un buen número de bestias clásicas. Mucho ojo, porque estas últimas ahora cuentan con nuevos movimientos y ataques, por lo que las batallas contra ellas no serán exactamente igual que antaño.
En esencia, el sistema de combate sigue siendo el mismo de siempre, con dos botones para atacar, otro para activar la habilidad especial de cada arma y una barra de energía que limitará el tiempo que podemos correr, las veces que podemos esquivar y el uso de determinadas técnicas (aunque esta se regenera rápidamente). Aunque aquí también entra en juego un nuevo factor: el escenario.
Nuestros cazadores tienen más movilidad en esta entrega que en cualquiera de las anteriores (y ojo, porque esto también se aplica a nuestros enemigos), por lo que ahora podremos escalar y trepar casi por cualquier muro, saltar pequeños obstáculos sin que nos ralenticen y movernos con mucha fluidez por los mapeados. Esto se ha traducido en unos mapas más verticales, interactivos, con elementos que pueden destruirse y con varios pisos de altura que hacen de los enfrentamientos algo más estratégico, ya que tendremos que adaptarnos a las condiciones de cada terreno para sacarles provecho.
De hecho, ahora se ha incluido un nuevo movimiento que nos permitirá subirnos encima de los monstruos. Para ejecutarlo, simplemente tendremos que conseguir acertar un ataque en salto para que comience un sencillo minijuego que si lo superamos con éxito nos permitirá destrozar el lomo de la bestia y aturdirla durante unos segundos, por lo que os podéis hacer una buena idea de lo útil que llega a ser.
La otra gran novedad la tenemos en el virus de la cólera, una epidemia que se ha propagado por el mundo del juego y que provoca que las criaturas se comporten de forma mucho más agresiva e incansable, lo que consigue darle una nueva vuelta de tuerca a las batallas normales para que sean bastante más desafiantes y frenéticas. Además, si un monstruo está infectado podrá contagiarnos con sus ataques, momento en el que tendremos que pasar a la ofensiva con todo lo que tengamos antes de que el virus incube y nos baje dramáticamente la defensa. Si conseguís dar los suficientes golpes antes de que esto pase, la afinidad con vuestras armas mejorará, lo que os hará más poderosos (e inmunes a la infección)durante un breve periodo de tiempo.
En cuanto a las armas, se han mantenido las mismas de siempre, aunque también se han añadido dos tipos nuevos: el Glaive insecto y el Hacha cargada. La primera se ha convertido en una de nuestras nuevas favoritas, ya que nos permite dar grandes saltos con los que montarnos encima de los enemigos, así como enviar un insecto para extraer fluidos de los monstruos para potenciarnos. Es bastante complicado de dominar, pero os aseguramos que una vez que le pilléis el truco difícilmente querréis cambiar. Por otra parte, el Hacha cargada tiene dos modos diferentes, una de espada y otra de hacha, aunque para usar esta última forma tendremos que rellenar una barra de energía en modo espada. Se trata de un arma poderosa y muy ofensiva con la que resulta más o menos fácil hacerse a su mecánica.
Eso sí, todas las armas del juego requieren de un largo proceso de aprendizaje para dominarlas, ya que cuentan con un buen número de combos, técnicas y mecánicas únicas que variarán considerablemente nuestro estilo de juego según la que utilicemos, definiendo incluso nuestro rol en la batalla.
En cuanto a los modos de juego, decir que esta vez la historia para un jugador está más cuidada que nunca, con unos tutoriales mucho mejor integrados y desarrollados que reducen ligeramente la alta barrera de entrada que tiene la saga para los nuevos jugadores. El argumento no es ninguna maravilla y nos llevará a completar una cacería tras otra hasta dar con el origen del virus de la cólera, aunque tiene momentazos realmente buenos y muy épicos. Además, tenemos tanto la campaña de Monster Hunter 4 como la de Monster Hunter 4 Ultimate (esta última con misiones de alto rango y un guion totalmente nuevo), por lo que aquí encontraréis horas y horas de juego para disfrutar en solitario.
Un detalle que nos ha gustado mucho es que ahora existen varias ciudades, por lo que viajaremos por todo el mundo y nuestra base de operaciones no se limitará a un único lugar, lo que nos permitirá conocer un poco mejor a los habitantes de este universo mientras vamos solucionando todos sus problemas.
Otro añadido importante y de los más acertados lo tenemos en las "Expediciones", un nuevo tipo de misión con mapas generados aleatoriamente en los que, por norma general, nunca sabremos qué monstruos nos llegaremos a encontrar. Además, para darles más interés, en estas expediciones podremos encontrar unas "reliquias", o lo que es lo mismo, piezas de equipo con estadísticas aleatorias, y las recompensas que obtendremos al terminar serán igual de satisfactorias que las de las misiones normales, aunque mucho ojo, porque los enemigos pueden escapar si no acabamos con ellos a tiempo.
Pero aquí no acaba la cosa, ya que después de cumplir una de estas aventuras podemos ser recompensados con una "Misión del gremio", que vienen a ser una mezcla entre una Expedición y una misión normal, con la peculiaridad de que cada vez que la completemos subirá de nivel, o lo que es lo mismo, nos dará mejores recompensas las próximas veces que la superemos. Y lo que es más, podremos tener registradas hasta diez misiones y compartirlas con el resto de usuarios a través de StreetPass.
También se ha añadido una nueva tienda que nos permitirá intercambiar materiales por los de otros monstruos que no han sido incluidos en el juego, lo que nos dará la oportunidad de hacernos al menos con su equipo. Además, esta también la podremos usar como la antigua granja para multiplicar nuestros objetos entre misión y misión. El resto de comercios siguen siendo los habituales: la herrería para crear equipo, la forja de adornos y las tiendas de objetos.
Para facilitarnos las cosas cuando juguemos solos, tenemos que destacar que el título nos permite llevar con nosotros hasta dos felynes a la batalla. Estos pueden tener una gran cantidad de roles y habilidades diferentes, subirán de nivel de forma independiente y según la combinación que escojamos tendrán una técnica definitiva u otra. A nosotros nos ha ido especialmente bien con dos felynes curanderos, ya que nos han ahorrado muchos objetos curativos y nos han librado de más de un apuro, aunque, tal y como decimos, hay una gran cantidad de combinaciones posibles, por lo que os animamos a que experimentéis para encontrar la que mejor se adapte a vuestro estilo de juego.
Pero donde Monster Hunter siempre ha destacado ha sido en su multijugador. Como siempre, las misiones de este modo son diferentes y algo más difíciles, y nos obligarán a ir cumpliendo todo tipo de encargos para ir subiendo nuestro Rango de Cazador, lo que nos dará acceso a nuevas misiones. Estas se dividen en tres dificultades bien diferentes: Bajo Rango, Alto Rango y Rango G, y no podremos pasar al siguiente hasta haber completado el anterior.
Jugar hasta con otros tres jugadores es una experiencia única que multiplica la diversión exponencialmente, y por suerte se ha añadido la posibilidad de jugar tanto online como en local. Todas las partidas que hemos jugado en línea han ido como la seda, sin caídas extrañas y sin nada de lag más allá de un pequeño tirón que el juego siempre pega cuando un jugador se monta encima de un monstruo. Eso sí, como el título todavía no está a la venta hemos tenido muchas dificultades para encontrar a otros usuarios, ya que no hay casi nadie jugando, algo que esperamos que cambie cuando se estrene el próximo 13 de febrero.
Nuestra mayor pega en este sentido la encontramos en lo limitadas que están las opciones de chat, con un espacio para escribir frases totalmente insuficiente y con un teclado algo lento e incómodo. Al menos nos dejarán registrar como amigos a los jugadores con los que nos lo hayamos pasado bien jugando, así como escribir varios mensajes cortos predefinidos para que salten automáticamente según lo que ocurra durante la batalla.
La espectacularidad de la caza
Gráficamente estamos probablemente ante uno de los juegos más potentes de Nintendo 3DS. Olvidaos de las imágenes y vídeos que Capcom nos ha mostrado a lo largo de los meses, ya que no tienen nada que ver con cómo se ve en directo desde la pantalla de nuestra consola. El diseño y modelado de las criaturas es imponente y está realmente inspirado, las animaciones de las que hacen gala son de lo mejor que hemos visto nunca en un juego portátil y la cantidad de efectos que se llegan a producir en pantalla sin que el rendimiento del título sufra lo más mínimo es para quitarse el sombrero de asombro. Lo mismo se puede decir del efecto 3D, capaz de hacernos creer que los monstruos se van a salir del juego para pegarnos un mordisco de un momento a otro.
Si tuviéramos que reprocharle algo, nuestras críticas probablemente se centrarían en la resolución que muestran algunas de las texturas del escenario, y en menor medida en el hecho de que cada mapa todavía esté dividido en secciones con pequeñas cargas intermedias, lo que sigue provocando algún que otro momento de frustración cuando el monstruo de turno decide que es buena idea luchar en el límite que separa dos zonas.
La banda sonora solo la escucharemos cuando estemos en combate contra un gran monstruo y en las ciudades, ofreciéndonos, tal y como era de esperar, una buena cantidad de grandes composiciones de tono épico que nos meterán de lleno en la partida, ya sean melodías clásicas o nuevas creadas para la ocasión. Los efectos de sonido tampoco se quedan atrás, ya que todos suenan con mucha contundencia y con bastante nitidez, destacando especialmente los rugidos de cada una de las bestias a las que tendremos que dar caza.
Conclusiones
Monster Hunter 4 Ultimate nos vuelve a ofrecer la clásica experiencia de la saga que los fans llevamos disfrutando desde hace años, lo que solo pueden significar buenas noticias, especialmente cuando tenemos en cuenta los geniales añadidos que se han incluido para la ocasión, como el temible virus de la cólera o la verticalidad de la que hacen gala ahora las batallas, así como la alta movilidad de la que disfrutan nuestros cazadores y las adictivas Expediciones.
Los nuevos monstruos también están a la altura de lo que se esperaba y consiguen sorprender constantemente, haciendo de cada nueva batalla algo memorable. Y todo esto sin olvidarnos de que su ingente cantidad de contenidos, ya sea para jugar solos o en compañía, nos tendrá pegados a la pantalla de nuestra Nintendo 3DS durante meses. La veda se ha abierto, ¿os unís a la gran cacería?