Max Payne llegó al mundo de los videojuegos abriendo el camino hacia los tiroteos más espectaculares a cámara lenta dentro del género de la acción en tercera persona. Una trepidante historia, un mundo oscuro y una segunda parte profundizando en los personajes principales de la serie han hecho que el regreso de Max Payne sea evidente, aunque con un ligero cambio de aires justificado por los acontecimientos de las anteriores obras.

12 años han pasado desde los acontecimientos de Max Payne 2, donde nuestro protagonista, Max, está totalmente perdido en la vida, por lo que decide cambiar de aspecto físico -la dejadez es clara tan sólo con ver las primeras imágenes del videojuego-, de lugar de residencia y de vida sana. Dejamos la oscuridad de Nueva York para dar paso a la ciudad calurosa de Sao Paulo, donde comenzaremos el juego siendo mercenarios de una familia adinerada de la ciudad, hasta que, como no, comiencen los problemas verdaderos que lleven a nuestro personaje a un conflicto del que tendrá que salir como sólo él sabe.

El aspecto técnico ha sido remodelado al completo, teniendo en cuenta que la segunda entrega tiene ya varios años. Se mostrarán unos gráficos fotorealistas bastante bien recreados, con efectos de luces para la ciudad y efectos en los tiroteos que realmente dejarán la boca abierta a más de uno. Saldrá para Xbox 360, PC y PlayStation 3 el próximo mes de marzo.