La escalada militar entre Estados Unidos e Irán no solo sacude los cimientos políticos y estratégicos de Oriente Medio. También empieza a dejar huella en la economía global, con el petróleo como protagonista de una nueva ola de incertidumbre.
El ataque a Irán no tarda en pasar factura: “Se avecina un colapso económico”
Durante los recientes enfrentamientos entre Irán e Israel, marcados por bombardeos cruzados, el precio del barril se disparó hasta los 78 dólares —unos 67 euros—, lo que supone un aumento del 13% respecto a los días anteriores, cuando apenas superaba los 70 dólares. Esta subida anticipa el posible caos si la tensión continúa escalando.

En el epicentro de esta crisis se encuentra el Estrecho de Ormuz, un paso marítimo crítico por el que fluye casi una quinta parte del petróleo mundial. Es la única ruta viable para transportar crudo desde el Golfo Pérsico a los grandes mercados internacionales. Y su control, parcial o total, recae sobre Irán y otros países de la OPEP como Emiratos Árabes Unidos y Omán.
Un eventual cierre de este estrecho estratégico —algo que Teherán ha insinuado en más de una ocasión como respuesta a agresiones externas— supondría un “escenario catastrófico”, según coinciden múltiples analistas. El colapso logístico derivado podría reducir el suministro global en un 20%, encarecer el precio del crudo y generar un efecto dominó en la cadena energética mundial.
Según datos de TankerTrackers, pese a los ataques israelíes, Irán ha mantenido sus exportaciones en torno a los 2,33 millones de barriles diarios. Pero el margen es frágil. The Washington Post recuerda que, durante el bloqueo parcial de 2019 provocado por las sanciones de Estados Unidos, el tráfico se paralizó casi por completo. El estrecho, que apenas tiene dos rutas de unos 3 kilómetros de ancho, se convierte así en el cuello de botella más vulnerable del sistema energético global.
Si el conflicto se intensifica, el impacto no será solo para las industrias o los gobiernos: el consumidor final también sentirá las consecuencias de una crisis energética con alcance mundial.