Los hackers al vuelto a hacer de las suyas colándose en nuestros teléfono para realizar acciones fuera de la legalidad.
Google acaba de retirar unas 300 aplicaciones de la Play Store de Android tras descubrir que secuestraban nuestro terminal para utilizarlo en diversos ataques de DDoS con el objetivo de tumbar diferentes servicios o páginas web de cualquier lugar del mundo.
Han sido los investigadores de Akami, un proveedor de servicios en la nube, los que han detectado este tipo de aplicaciones después de que uno de los clientes de su servicio sufriera un ataque de este tipo saturando su página web al no poder hacer frente a la afluencia de datos.
Estas aplicaciones estaban disfrazadas como servicios para descargar tonos para nuestro terminal o como gestores de almacenamiento, incluyendo un malware oculto en su interior que permitía a los hackers utilizar nuestro teléfono en esos ataques.
Según los expertos de Google estas aplicaciones podrían haber afectado a unos 70000 dispositivos Android localizados en más de 100 países diferentes.