Martin Scorsese está en el centro de la polémica desde hace unas semanas, justo cuando empezó el tour promocional de El irlandés. Tras criticar la calidad de las películas de Marvel, un hecho que ha conseguido que distintos directores se sumen a su cruzada, el director neoyorquino ha vuelto a ser duramente apaleado por la prensa. ¿El motivo? Durante uno de sus coloquios promocionales para la película de Netflix, un periodista le afeó que sus historias no tuvieran personajes femeninos importantes. ¿Su respuesta? Si no es necesario, no hay que poner mujeres en las películas de forma obligada para cumplir cuota.
"Ese ni siquiera es un argumento válido. No es válido"
"No. Ese ni siquiera es un argumento válido. No es válido", arrancaba el director. "No sabría decirte... Mira, esto se remonta a 1970. Es una pregunta que me han hecho durante muchos años. ¿Se supone que debo centrarme en historias femeninas? Si la historia no lo requiere… Creo que es una pérdida de tiempo para todos. Si la historia requiere una protagonista femenina, ¿por qué no?", apuntaba. En ese momento, Emma Tillinger Koskoff, la productora de El irlandés, salió a la palestra defendiendo al responsable de Uno de los nuestros.
Koskoff comenzó citando como ejemplo Alicia ya no vive aquí (1974), un film protagonizado por Ellen Burstyn que le valió la nominación al Oscar a mejor actriz. Scorsese, entre risas sarcásticas, contestó rápidamente: "Oh, claro, esa no es válida. Es solo una película. No cuentan eso. La edad de la inocencia, esa tampoco la cuentan", matizaba sobre la cinta protagonizada por Michelle Pfeiffer y Winona Ryder. En la discusión y el debate posterior, Koskoff mencionó Casino. "Casino. Sharon Stone estaba genial en ella. No cuentan eso. Olvídalo. Solo están todos esos hombres", añadía en tono burlón la propia productora para intentar zanjar el tema mientras apuntaba sobre las distintas percepciones del cine y la manera de consumirlo en las generaciones existentes y venideras.
"En cualquier caso, este es el mundo en el que vivimos. Nuestros hijos son así, y yo no sé qué están haciendo con esos dispositivos. Perciben la realidad de manera diferente. Perciben incluso el concepto de lo que se supone que es la historia de manera diferente", concluía.
